Como sierras circulares

Hace dos años casi la palman al salirse de la carretera de un volantazo, en medio del desierto, para evitar atropellar a un conejo, y hace uno se arriesgaron a tener un encontronazo con la Ley por tocar a pleno volumen en la calle, en un escenario improvisado en la parte trasera de un camión. De lo primero sólo tenemos la palabra del cantante y teclista Mookie Singerman, de lo segundo hay evidencia en YouTube. Más evidencias de la catadura (sonora) de Genghis Tron las encontramos en Board Up The House, su segundo disco: un curioso híbrido entre el metalcore (no huyáis) y las secuencias circulares de Philip Glass y Terry Riley, la improbable colisión entre el death espástico y las bandas sonoras de Goblin cuando al final de la película la protagonista huye del asesino (su tutora). Tras saltar de la animosa pero pequeña Crucial Blast a la animosa pero algo menos pequeña Relapse, Genghis Tron se prefiguran como mascarones de proa junto a los paisajistas Zombi y el extravagante Vverevvolf Ghrevv de una forma de metal imbuido de electrónica que nada tiene que ver con chuscas tentativas anteriores, y que suena como sierras circulares cortando acero mientras los camilleros te gritan histéricos que te pondrás bien. Vice: Cuando os ponéis repetitivos, y lo digo en el buen sentido, me viene a la cabeza el Philip Glass que sólo tenía un teclado y al que nadie hubiera financiado una obra sinfónica. Mookie (voz, teclados): Glass es una influencia que todos en el grupo compartimos. Eres el primero que lo menciona, y es extraño, yo creía que era evidente. Pero también nos mola el black metal y el material más técnico, como Dillinger Escape Plan. Y Godflesh. Y el grindcore. Pig Destroyer son cojonudos. Llevar los ritmos programados os libera de tener que sonorizar una batería, pero a cambio os fuerza a pasar una de horas que no me puedo imaginar construyendo cada redoble ante una pantalla. Un currazo, ¿no? Bastante tedioso, sí, pero como estuvimos en el paro un año entero, había tiempo de sobra. Michael, el teclista, se ocupa de crear los sonidos y programar los sintes, y además de tocar la guitarra, Hamilton se encarga en directo de disparar los ritmos. En este tipo de música, teniendo además en cuenta que en directo no podéis interactuar con un batería, un ritmo bien programado marca la diferencia entre una canción tremenda y una canción de mierda, supongo. ¡No te equivocas! Los teclados y las guitarras pueden crear texturas interesantes, pero si el ritmo no está bien hecho, a nadie le importará mucho lo que hagas. Pasar de Crucial Blast a Relapse es un paso importante, y ya que ahora se cuenta con vosotros para telonear a grupos consagrados como Converge y Dillinger Escape Plan, ¿crees que en breve Genghis Tron y bandas afines serán cabezas visibles de un nuevo movimiento dentro del metal? No lo sé, pero de lo que sí estoy convencido es de que en un futuro próximo este tipo de música será importante. Que grupos como Zombi o nosotros tengamos distribución en todo el mundo sugiere que la gente del metal se está abriendo a estilos de música no tradicionales. ¿Será Genghis Tron la próxima gran sensación? ¡Así lo espero! Si Board Up The House se vende bien, podríais pujar por el rancho de Michael Jackson. (Risas) No nos alcanzaría ni vendiendo toda la tirada, me temo. Neverland es muy caro. Yo me conformaría con conseguir la subvención de una gran compañía. Ya nos respaldan Moog, Ernie Ball y Novation, pero lo que molaría es tener el apoyo de Fritos. ¡Bolsas gratis de Fritos para toda la vida! www.genghistron.com