Hablamos con el director del documental de Techno Viking

Foto cortesía de Matthias Fritsch

Este artículo apareció originalmente en Thump, nuestra plataforma de música electrónica.

El Techno Viking alemán es uno de los memes más queridos de internet. En el vídeo de cuatro minutos, filmado en el festival berlinés Fuck Parade en el 2000, un musculoso alemán sin camiseta—posteriormente llamado «Techno Viking»—reprime a un odioso raver por empujar a una chica del público, sorbe una botella de agua que le entrega uno de sus esbirros y finalmente se suelta a realizar un exuberante baile al ritmo de hard techno. El vídeo inmortalizó al sujeto, quien con su apariencia cómica, con espíritu de Robin Hood y fabulosos movimientos de baile generó miles de GIF hechos por los fans, vídeos de YouTube, camisetas e incluso una línea de figuras de acción, que incluía sus característicos calcetines desparejados.

Pero el clip viral también se convirtió en una pesadilla legal para el artista alemán y creador del documental, Matthias Fritsch, la persona que filmó la ahora infame escena.

En el 2009, casi una década después de que el vídeo de Fritsch triunfara en internet, él recibió una carta de «cese y desestimiento» de los abogados del hombre que aparecía en el clip, alegando que Fritsch no aseguró los «derechos de la personalidad» que se requerían para publicarlo. El hombre—que resultó ser un individuo muy celoso de su privacidad y cuyo nombre nunca se ha dado a conocer—llevó a Fritsch a juicio, exigiendo que no solo retirara el vídeo de internet, sino todas las parodias creadas por otras personas, remixes y mashups. La batalla judicial resultante se convirtió en el primer caso en Alemania que apuntaba contra la cultura del «remix» en internet, generando una pregunta acuciante: ¿hasta dónde se puede llegar cuando una persona que no desea estar expuesta al público se convierte involuntariamente en un meme internacional?

Tras una prolongada batalla judicial de tres años, el Tribunal del Distrito de Berlín dictaminó que Fritsch sólo podía usar imágenes de Techno Viking si eran manipuladas de tal forma en que él no pudiera ser identificado y que el contenido creado por los fans podía continuar en línea. Fritsch, quien ya había desarrollado la cultura del meme y el reciclaje de internet, decidió hacer un documental sobre la experiencia, creyendo que su caso representa un importante momento en la historia de la red de redes. Según Fritsch, la historia de Techno Viking demuestra el vacío legal existente, determinado por la subjetividad de cada juez—y por qué necesitamos nuevas reglas que controlen la rápida evolución de la cultura de internet.

En el 2013, lanzó una campañaen IndieGoGo para crear el film y aunque no obtuvo el dinero que buscaba, Fritsch por fin completó su proyecto el año pasado. El 15 de octubre, Fritsch finalmente lanzó una película editada de 50 minutos que originalmente duraba 90, publicando la versión final gratis en línea, para fomentar la cultura de contenido abierto de internet. A través de un intercambio de correos que comenzó en el 2013—tras la sentencia del tribunal—, hablamos con Fritsch sobre su documental, las implicaciones del veredicto del juez para el arte en internet y, por supuesto, qué pasó con Techno Viking tras todo el follón.

THUMP: Ya que no tenías permitido usar imágenes de Techno Viking, ¿Cómo realizaste el documental?

Matthias Fritsch: «Techno Viking» es mucho más que la imagen del protagonista. Es un fenómeno viral que tiene miles de variantes. La mayoría de ellas incluyen extractos de la película original de mi «Kneecam nº 1», pero inspiró un montón de contenido generado por los fans: cómics, animaciones en 3D, dibujos, pinturas al óleo, esculturas, figuras de acción, blogs y artículos.

¿Por qué crees que Techno Viking se ha opuesto frontalmente a que uses su imagen? ¿Te has comunicado con él?

Lo he intentado, pero desafortunadamente se niega a entablar conversación y solo se me permite comunicarme con su abogado. Después de que el vídeo se hiciera viral, traté de descubrir quién era y cómo contactar con él, pero acabé tirando la toalla y estaba seguro que contactaría conmigo tarde o temprano.

¿Grabaste el vídeo desde una cámara secreta u oculta? En algunas partes, parece que estaba en una mochila. ¿Es problemático que Techno Viking no supiera que lo estabas filmando?

No, la cámara no estaba oculta y tenía un objetivo de ojo de pez enorme. La sostenía en las manos a la altura de las rodillas. [Techno Viking], de hecho, la mira durante un segundo mientras baila.

¿Crees que el veredicto fue injusto? ¿Puedes explicarnos por qué has calificado el juicio de absurdo?

Creo que el veredicto muestra que los jueces no entienden la parte artística de mi trabajo. No ven el aspecto conceptual. Aun así, los jueces dijeron que la gente que había creado cómics, dibujos y otras reacciones que no usan el material original podían expresarse. Eso es un absurdo, pues [Techno Viking] quiere desaparecer de internet, lo cual no es posible con un fenómeno viral como este. Además, el tratar de censurar el fenómeno le ha dado más atención al meme. No tiene sentido tratar de resolver esto en un tribunal. Habría tenido más sentido arreglarlo de una forma más humana y compartir con él los ingresos cuando se dirigió a mí.

¿Cuánto dinero ganaste con este vídeo?

Antes de que mandara a su primer abogado, gané 10.000 euros en un periodo de dos años, solo por los anuncios de YouTube.

¿Cómo cambió tu punto de vista sobre los memes y el arte en internet después de la experiencia con Techno Viking?

Este fenómeno me puso en contacto con la extremadamente rápida y dinámica cultura del meme, que es la forma de cultura pop más intensa de estos días.

¿Fuiste una de las primeras personas en ser demandadas por iniciar un meme? ¿Cuáles son las leyes existentes para la cultura de internet? ¿Crees que necesitamos nuevas leyes?

En Alemania, este fue el primer caso en un tribunal sobre un meme. Las leyes que llevaron a este veredicto tienen 100 años de antigüedad. No funcionan con la cultura del meme, pues estos fenómenos son globales y no pueden ser controlados. Los usuarios que remezclan contenido viral se mueven en terreno pantanoso. Por ejemplo, en el caso de Techno Viking, todos los que usan el material original en Alemania se arriesgan a meterse en problemas judiciales similares a los míos: derrochar miles de euros solo para descubrir en un juicio cuál es la situación legal. Y aún así, [el veredicto] depende totalmente de los jueces. No hay bases para una cultura del remix como la que podemos ver en la web. Las leyes en Alemania necesitan una implementación de uso justo que haga más fácil entender qué es posible y qué no lo es.

¿Qué pasó en los dos años después de la sentencia?

[Techno Viking] recurrió y quiere censurar las variantes en cómic y sus siluetas en una película ya censurada que uso en mi sitio web. Le llevó mucho tiempo al tribunal, pero no quisieron seguir con su recurso y le sugirieron que abandonara el caso para evitar seguir pagando costes. Si el tribunal rechaza el caso oficialmente, [los costes] son el doble que si te retiraras tú. Como resultado de su desestimiento, se hizo válido el veredicto del 2013.

Shinya Yamaoka

¿Cómo ha cambiado esta experiencia tu forma de hacer filmes?

Soy consciente de los límites desde que se validó la sentencia. Pero desafortunadamente no al 100 %, porque la sentencia es un poco vaga en lo que respecta a censurar al demandante. Algunos abogados creen que una silueta es una violación a los derechos de la personalidad.

¿Cómo ha cambiado la vida de Techno Viking desde que se convirtió en viral?

No sabría decirte. En los papeles sus abogados escribieron que se le acercó gente de derecha, que perdió trabajos, que la gente lo reconocía cuando iba en bicicleta. Nada se probó durante el juicio.

¿ Utiliza Techno Viking internet? ¿Crees que entiende cómo funciona la cultura de la red?

No sabría decirte. Oficialmente, le costó dos años enterarse de que era mundialmente famoso. Quizá no tiene a alguien que le explique lo que está sucediendo y como funcionan las dinámicas de las comunidades en internet.

¿Has tenido algún contacto con Techno Viking recientemente?

Desafortunadamente jamás tuve la oportunidad de hablar con él. Le dije muchas veces a su abogado que me gustaría conocerlo en persona pero no hubo interés por la otra parte. Menciono este problema al final del documental. Espero que algún día nos conozcamos. Después de todo, estamos en el mismo barco—ambos perdimos el control, pero tuvimos diferentes formas de lidiar con el problema.