FYI.

This story is over 5 years old.

Actualidad

Hablamos con el cineasta musulmán gay que filmó en secreto su peregrinaje a la Meca

Como musulmán, no debes meterte con la Meca. Al hacer esta película, me convierto en un transgresor. Estoy cruzando la línea... Lo que empeora el asunto es que soy un musulmán gay".

Todas las imágenes son fotogramas de la película

"La llamo la película selfie de Arabia Saudí", me dice Parvez Sharma, director de cine y activista de la comunidad LGBT de origen indio y residente en Nueva York. Estamos en el Sheffield Doc/Fest hablando sobre su nueva producción, A Sinner in Mecca, antes de su estreno en Europa.

Grabado en secreto con un iPhone, su documental representa uno de los pocos recuentos visuales del hajj —la peregrinación sagrada que cada musulmán debe hacer al menos una vez en su vida—, pues está prohibido filmar el ritual.

Publicidad

No es la primera vez que Sharma hace películas controvertidas. Su último documental, A Jihad For Love, sobre musulmanes gais, fue censurado en muchos países de Oriente Próximo. A Sharma le sorprende la cantidad de respuestas negativas a esta nueva cinta por parte de personas que ni siquiera la han visto. "Estoy recibiendo una gran cantidad de mensajes cargados de odio, muerte y amenazas", afirma.

"Como musulmán, no debes meterte con la Meca. Al hacer esta película, me convierto en un transgresor. Estoy cruzando la línea… Lo que empeora el asunto es que soy un musulmán gay". Entonces, ¿qué lo impulsó a crear una película como estas? Nos reunimos con Sharma para descubrirlo.

VICE: La película ha suscitado reacciones positivas, pero también negativas. ¿Qué es lo más controvertido, que hables sobre sexualidad en el contexto de la Meca o que hayas filmado allí?

Parvez Sharma:Creo que ambas cosas. La perspectiva del musulmán gay fue el centro de mi película anterior, A Jihad for Love . Yo ya había salido del armario y esta película trata sobre mí emergiendo como musulmán. Es una reivindicación de la fe, una manifestación de la aceptación del Islam bajo mis propios términos. Eso es lo que mortifica a la gente… Pero también la mera existencia de la película ha causado ira. El hecho de que entrara en el lugar más sagrado del Islam con un iPhone y dos cámaras que parecen teléfonos y me atreviera a hacer una película sobre este ritual.

Publicidad

Cuando decidiste que realizarías el hajj, ¿sabías que querías hacer una película sobre eso?

La parte personal de este ritual era más importante que filmarlo. Pero mi faceta de director pensó: "No hay otra manera de documentar algo que solo haré una vez en mi vida". De hecho, en Arabia Saudí no sabía si iba a lograr salir vivo. No tenía ni idea de si la gente descubriría quién era yo. Si buscas mi nombre en Google aparece todo lo que he hecho en mi vida. No sabía si el rodaje sobreviviría y si podría salir del país.

En el mes que estuve en Arabia Saudí, me detuvo la policía religiosa y logró borrar parte del material. La gente hace fotos del hajj porque quieren inmortalizar el momento de haber estado ahí, así que se trata de algo habitual. Pero hacer una foto te lleva solo unos segundos.

Como director de cine, pasas mucho más tiempo allí, ya que necesitas hacer tomas desde diferentes ángulos. De esta forma llamas mucho más la atención. La policía religiosa está continuamente caminando armados con porras y si haces algo malo, te golpean. Es absurdo. A veces me pegaron bastante fuerte.

En las escenas, hay momentos en los que se ven personas saludando o levantando el pulgar a la cámara. Otras veces aparecen civiles (gente normal, no la policía religiosa) que no está muy de acuerdo con que filmes en ese lugar tan sagrado. ¿Tuviste problemas por eso?

En mi película hago una distinción entre la versión saudí del Islam (wahhabismo) y mi versión, que es totalmente diferente. La versión saudí es regresiva, violenta y peligrosa. Las raíces de la ideología de ISIS vienen del Islam Wahabí. La representación de la forma humana no está permitida, así que la fotografía está técnicamente prohibida según la ley del país. Pero dondequiera que vayas, verás imágenes del maldito Rey. Es tan hipócrita…

Publicidad

En otras ocasiones, el ministro saudí de Información ya ha permitido que se realicen un par de películas sobre el hajj con directores escogidos por ellos para retratar el ritual del modo que ellos querían. Lo que yo estaba haciendo era completamente distinto y por eso la película es tan importante. Habla precisamente de las cosas que los saudíes no quieren que hables porque quieren que se les vea siempre de manera positiva.

En laMeca,visitas un centro comercial y señalas la basura que han dejado. Estabas claramente sorprendido por el grado de comercialización de la ciudad. ¿También culpas de eso a los saudíes?

Tengo mucho que decir en contra de los saudíes. Desde hace ya muchas décadas, han destruido de forma deliberada la historia del Islam. Durante todo el siglo XX y este siglo, Arabia Saudí ha hecho todo lo posible por destruir la historia islámica.

Otro de los aspectos que el Islam de Arabia Saudí rechaza es la adoración de ídolos; por eso ya no es posible identificar las tumbas de sus ancestros. Destruyeron la primera casa en la que el profeta Mahoma vivió con su esposa y construyeron una hilera de baños públicos.

La Meca se está convirtiendo en una especie de Las Vegas. El paisaje está cambiando constantemente. Han construido hoteles de siete estrellas y llamativos centros comerciales. Hay un edificio que aparece siempre en la película, la Torre del Reino. Les dijeron a los arquitectos que debían construir algo más grande que el Big Ben, que tenía que ser el reloj más alto del mundo. La torre hace que la Kaaba, una estructura sagrada dentro de la mezquita más sagrada del Islam, Al-Masjid al-Haram, parezca diminuta en comparación. Hay un Starbucks a pocos metros de este lugar sagrado. Es obsceno.

Publicidad

¿Conoces muchos gais en Arabia Saudí? ¿Qué tipo de vida llevan?

Gracias a mi última película, conocí a mucha gente gay en Arabia Saudí. Establecimos cuidadosamente una amplia red clandestina, y enviamos estos DVD a diferentes países. Sé que en muchas ciudades de Arabia Saudí, entre ellas Riad y Yida, se organizaron proyecciones de A Jihad for Loveen dormitorios y salones de casas. Hay gente que sigue en contacto conmigo y me dicen "Vi tu película y me cambió la vida".

Como en cualquier parte del mundo musulmán, la regla básica es "no preguntes y no hables". Si no vas por la calle con una bandera del orgullo gay, no tendrás problemas. Pero sí los tendrás si te descubren. Este país no respeta los derechos humanos y perpetra decapitaciones en público continuamente. Todo eso tiene que acabar.

La película se centra sobre todo en el Islam Wahabí, pero, ¿te preocupa que algunas personas la interpreten como una crítica más amplia al Islam?

He pensado en ello estas últimas semanas. Actualmente los musulmanes se encuentran asediados: por nosotros, en primer lugar, pero también por "Occidente" que quiere retratarlos de una manera específica. Los musulmanes hablan mucho de la islamofobia. Lo veo todos los días de formas muy diversas.

Después de ver esta reacción, me he preguntado si el público podría concluir que la película es islamófoba, pero no lo creo. Creo que la película es como una oración. Es una película muy a favor del Islam y contra Arabia Saudí. Si consigues ver la película y conectar con ella, te das cuenta de eso. Si no, es otra historia diferente que yo no puedo controlar.

¿Qué impacto esperas que tenga tu película?

En esta película estoy asumiendo el poder de la monarquía más reservada e infame del mundo. Creo firmemente en el poder de los documentales narrativos como agentes de cambio social. ¿Podré crear una Primavera Árabe en Arabia Saudí? No estoy seguro. ¿Podré cambiar el hecho de que los estadounidenses se lleven tan bien con los saudíes? Probablemente no. Pero al mismo tiempo creo que esta película hará que las personas cambien de opinión respecto a este país.

@rachsh