Eurovegas se fue a la mierda pero BCN World está cada vez más cerca

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Pese al fracaso del proyecto Eurovegas, en Cataluña se sigue trabajando duro para poder construir ese enorme complejo turístico llamado BCN World que, entre otras cosas, incluirá seis macrocasinos. Pero este proyecto no es nada nuevo, pese a que todo el asunto de Eurovegas pareció una especie de batalla de egos entre Barcelona y Madrid, el macrocomplejo de Salou y Vila-Seca se remonta a 1989, momento en que La Generalitat expropió unas tierras y permitió que se construyera el parque de atracciones Port Aventura. Actualmente, Melco, el gestor del primer macrocasino de BCN World —de 35.000 metros cuadrados—, ya ha obtenido la licencia después de que El Parlament de Cataluña modificara la legislación vigente para poder aplicar rebajas fiscales a las actividades de juego y apuestas —del 55% actual a un 10%— y haber alterado el plan urbanístico para poder edificar en la zona. Pese al apoyo de los principales partidos —CiU y PSC—, hay varias voces contrarias al proyecto, quienes aseguran que, entre otras cosas, el tipo de turismo que atraerá a la zona difiere totalmente del que se estaba impulsando hasta ahora por parte de los ayuntamientos locales. Hablamos con Joan Pons, el responsable de la plataforma “Aturem BCN World”, para saber qué hay detrás de este proyecto.

VICE: ¿Cómo está actualmente todo el tema de BCN World? Parece que el proyecto haya desaparecido de los medios pero el asunto sigue adelante, consiguiendo concesiones fiscales por parte de la Generalitat.

Joan Pons: Ahora empieza la etapa en que realmente BCN World mostrará sus cartas y resolverá cual es su proyecto realmente. Entendemos que esto lo tendría que haber hecho antes, pero tenemos un Gobierno de la Generalitat dispuesto a legislar para un interés privado sin que este haya sido capaz de presentar un proyecto claro y viable.

¿Por qué expropiar, en 1989, 825 hectáreas para crear Port Aventura, que solamente ocupa 192 hectáreas?

Porqué expropiar es muy fácil para unos, y si me puedo llevar 10 en vez de 5, está claro que me llevaré 10. Si en su día se criticó Port Aventura, no era por el modelo de desarrollo turístico, sino por la fórmula utilizada: la expropiación justificada en el interés general de la creación de un centro turístico. Pasados unos años vemos como se ha especulado a niveles inmorales con los terrenos que en su día se “robaron” a payeses y propietarios de la zona. La indemnización que recibieron en su día no contemplaba el incremento urbanístico ni el uso de casinos que ahora se plantea. Eso es un robo a cara descubierta y con el beneplácito de muchos políticos.

Expropiar más de lo debido, sin proyecto a largo plazo, implica cosas como la que estamos viendo: improvisación, proyectos fallidos, inseguridad jurídica y tratos de favor para colocar los terrenos.

Parece que todo este proyecto, juntamente con el de Port Aventura, haya sido una maniobra de “La Caixa” y otras empresas para sacar beneficios de unos terrenos expropiados por la Generalitat.

Sin duda alguna. Debemos recordar que en el acto de presentación de BCN World en setiembre de 2012, en el centro de la foto aparecía Isidre Fainé, presidente de La Caixa. Después no lo hemos vuelto a ver. La Caixa era propietaria del 100% de los terrenos de BCN World y con la modificación legislativa esos terrenos incrementaron de valor y los pudo vender al grupo Veremonte [impulsor del proyecto BCN World], quitándose así del medio un activo tóxico que tenía. Aquí, en esta compra-venta, se encuentra la explicación de las principales prisas para aprobar el cambio legislativo. Lo que venga a partir de ahora a La Caixa no le importa ni lo más mínimo. El negocio les ha salido redondo, les felicito.

¿Qué opinan los otros grandes casinos de Cataluña (el Gran Casino de Barcelona, el Casino de Tarragona y el Casino Castell de Peralada) sobre las rebajas fiscales que se aplicarán a BCN World?

La rebaja se aplicará también a estos casinos, pero solo a partir del momento en que entren a funcionar los casinos de BCN World. Por lo tanto, estamos delante de un trato de favor muy claro hacia los intereses de BCN World, en detrimento del resto del sector que llevaba años reclamando un mejor trato fiscal.

¿Qué tiene de malo la potencial masa turística que vendrá a la zona atraída por este tipo de complejo?

Sobretodo supondrá un retroceso de la economía turística local actual, el modelo turístico de la Costa Daurada huye de grandes resorts y complejos, pretende ofrecer un producto turístico diverso y repartido por todo el territorio: playa, turismo cultural e histórico, comercio, naturaleza, aventura, parques temáticos, etc. BCN World, tal y como han dicho en numerosas ocasiones sus promotores, pretende ofrecer todo esto en un complejo cerrado, con el plus de los casinos.

Si se nos dice que BCN World va a generar trabajo, también quisiéramos saber cuántos puestos de trabajo actuales va a destruir. No hay duda de que un hotel familiar de Salou, el comercio de Reus o el mismo Port Aventura, se pueden ver gravemente afectados si el turista lo tiene todo en el recinto de BCN World.

Más turistas no significa más negocio, supone un cambio de modelo que no ha sido debatido entre el sector.

La población de la zona está a favor del proyecto por la oferta de empleo que generará. Con las administraciones y gran parte de la ciudadanía en contra vuestra, ¿cómo puede detenerse todo este proyecto?

No es del todo cierto, hay mucha población en contra y mucha más desinformada. Con desinformación expresa y solo recibiendo noticias del número de los supuestos puestos de trabajo que va a generar, es normal que la opinión pública general sea favorable. Pero todas las personas y colectivos con los que hemos hablado, después de explicarles los detalles de BCN World, muestran su rechazo contundente al proyecto.

El proyecto se detendrá con información y contrainformación. Además, por sí solo se va a deshinchar, lo estamos viendo estos meses. Hasta ahora se ha seguido el mismo esquema que proyectos fallidos como Eurovegas y Gran Scala, en ambos se modificaron leyes, se compraron terrenos, se anunciaron grandes inversiones, ¿y dónde está ahora el proyecto?