Conocemos bien a Felipe Hernández. Suele colaborar con nosotros y en ocasiones pasa por la oficina y nos trae alguna muestra de sus proyectos personales como el fanzineKrev, que realizó junto a Diego Sánchez. Pero tenía una sorpresa guardada: empezó a hacer fotos a monjas por la calle hace dos años y medio. "La primera la tomé en diciembre de 2012 y la última, la semana pasada. Siempre en Madrid".
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¿Por qué este interés por los hábitos y las mujeres que los llevan? "Las monjas siempre me han llamado mucho la atención, no sé si tiene algo que ver que fuera a un colegio de Misioneras, aunque nunca ninguna de ellas me llegó a dar clase. Lo que me atrae principalmente es la estética y lo que se parecen unas a otras. Como puedes observar hay varios tipos de outfits. Supongo que tendrá algo que ver con su convento o su congregación".El objetivo de Felipe es capturar por las calles de la capital a alguna de las casi 30.000 religiosas que hay en nuestro país (con una media de edad de 63 años). Nunca ha tenido problemas con ninguna de estas señoras, "aunque a veces no se han dado cuenta de que las he fotografiado". Y si alguna vez tiene la oportunidad de hablar con ellas, se establece un diálogo, tiene muy claro qué les va a preguntar: "Les diría qué les parece el sello Flying Nun Records y también les hablaría de la foto de portada del EP 'Maximmun Rythm & Shit', de Doctor Explosion".Las fotos de estas religiosas son siempre verticales "para cogerlas de cuerpo entero, ya que la razón principal de estas imágenes es la estética que tienen estas religiosas, por eso prefiero este formato". Además, le llama mucho la atención el parecido físico que tienen unas y otras "y los disfraces que suelen llevar son un buen contraste con las calles de una ciudad como Madrid".
