Una visita a la comunidad cristiana antitecnología de Nueva Zelanda

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Una visita a la comunidad cristiana antitecnología de Nueva Zelanda

En medio de las montañas de la costa oeste de la isla sur de Nueva Zelanda vive el grupo cristiano Gloriavale, que sigue los lineamientos de la comunidad amish de Estados Unidos. Sus miembros visten atuendos similares a los del siglo XIX, y hacen muy poco uso de la tecnología o la electricidad.

Desde 1969, el fundador de la comunidad, Neville Cooper, que ahora se hace llamar Hopeful Christian, los ha mantenido aislados del mundo exterior. Con sólo 600 habitantes, Gloriavale es completamente autosuficiente y a ningún individuo se le permite tener posesiones. Es común que en las familias la cantidad de hijos llegue a los dos dígitos, y muchos son padres adolescentes.

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Gloriavale ha sido objeto de fascinación pública desde hace mucho tiempo. Escándalos por abuso sexual, déficit de educación, evasiones de impuestos y muertes han hecho que la comunidad cristiana se mantenga en el foco de los medios de Nueva Zelanda. Pero más allá de eso, su funcionamiento interno sigue siendo un misterio.

Lo que se sabe de la vida dentro de Gloriavale se ha construido a partir de los testimonios de algunos de sus exmiembros. Sin embargo, el fotógrafo canadiense Cam McLaren obtuvo acceso a la comunidad y compartió con VICE un adelanto exclusivo de lo que vio.

VICE: Cuéntanos un poco sobre cómo surgió el proyecto de Gloriavale. Son conocidos por estar aislados del resto del mundo. ¿Cómo conseguiste acceso?
Cam McLaren: Supe de la comunidad hace cuatro años y me pareció muy interesante, pero no fue hasta 2015 que decidí ponerme en contacto con ellos para hacer una visita. Estuvimos intercambiando mensajes durante un largo periodo… me entrevistaron más ellos a mí que yo a ellos. Al final me dejaron entrar, pero decidieron que solo podía tomar fotos después de haber conocido al líder de Gloriavale, Hopeful Christian.

¿Cómo es Hopeful Christian en persona? ¿Te dijo qué esperaba de ti?
Es un hombre orgulloso. La gente no lo trata como a un dios, pero lo respeta como creador, líder y fuente de inspiración.

Gloriavale ha estado involucrado en múltiples escándalos. Después de haber visto su estilo de vida de primera mano, ¿crees que son unos incomprendidos?
Tengo entendido que hay una gran preocupación social con respecto a la comunidad, en especial cuando se trata de la seguridad de los niños, pero mientras yo fui su invitado, me trataron con total respeto. Quieren mucho a los niños y los tratan como si fueran el futuro de la comunidad. Estoy seguro de que Gloriavale tiene sus problemas y a gente con problemas… pero es igual que en cualquier otra parte. ¿Quién no tiene problemas?

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¿Hay algo particularmente sorprendente de su modo de vida?
Me sorprendió mucho la capacidad de autosuficiencia de la comunidad. Cuando hice mi visita, había unos 600 residentes. Son muchas bocas que alimentar. Me dijeron que gracias a sus dietas y sus estilos de vida, los habitantes casi nunca necesitan salir de la comunidad para tratamientos médicos. Hay visitas de médicos y dentistas, así como de otros especialistas que la comunidad no tiene.

Gloriavale tiene propiedades por valor de 30 millones de dólares. ¿Viste muestras de riqueza obvias dentro de la comunidad?
La tierra sobre la que está la comunidad es enorme y en sí misma vale una fortuna, pero la mayoría de edificios son bastante viejos y necesitan remodelaciones. Definitivamente no hay muestras de riqueza. Todos se muestran muy humildes.

¿Dónde dormiste?
Me mostraron un cuarto lleno de flores, con una cama que tenía encima un vestido rosado. Era un ambiente de celebración. Resulta que lo estaban preparando para una nueva familia que se mudaría al lugar poco después de que yo me fuera, y el vestido iba a ser usado por la recién casada.

¿Te restringieron el acceso a la gente?
Podía hablar con todo el mundo, pero gran parte del tiempo estuve andando por la comunidad solo. Es como en cualquier lugar: a algunos les interesa conversar sobre el mundo, a otros no. La gente de Gloriavale viene de entornos muy distintos. Muchos tienen muy buena educación y llevaban unas vidas llenas de éxito antes de entrar a la comunidad.

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¿Tu visita te hizo replantearte la forma en la que vives? ¿Has cambiado algo desde ese momento?
Sí. Cuando me fui, empecé a considerar mi lugar en la sociedad y cómo iba a progresar. ¿Quería formar una familia? Todo quedó más claro después de mi visita. La simplicidad de la vida en la comunidad hace que cualquiera se plantee su estilo de vida.

El libro de McLaren, Gloriavale, se publicó el 1 de noviembre y estará disponible en su página web y en librerías internacionales.