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Huelga General: Primer comunicado desde Madrid

Hemos visto cargas a caballo y huelguistas siendo conducidos por la policía al metro.

Aquí tenemos el primer comunicado de hoy. Nos lo envía Jairo Vargas desde Madrid, que ha estado en la calle desde la medianoche de ayer: 

- A las 23:00 comenzó a agruparse en la plaza de Antón Martín el piquete juvenil-precario, un grupo compuesto por varios colectivos ya conocidos desde el 15-M como Juventud Sin Futuro, y otros anteriores a él como Toma la Fakultad. Alrededor de las 00:00, el grupo reunía unas 250 personas entre estos colectivos, estudiantes y personas que acudieron a la convocatoria a título personal. Hay expectación y muchas ganas de comenzar la jornada de lucha. Este piquete viene a dar representación a aquellas personas paras las que el sindicalismo tradicional no tiene cabida como los titulados en paro, jóvenes con contratos precarios y que sufren la creciente oleada de temporalidad laboral, que con la nueva Reforma Laboral se agudizará aún más.

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- Desde Antón Martín, comenzó la marcha del piquete juvenil precario por el centro de Madrid. Pronto se cortó el tráfico en un carril en el paseo del prado. Pintadas en pareces, en sucursales bancarias, pegatinas… el centro de la ciudad comenzaba a llenarse de marcas del un día de huelga general. A la altura de Neptuno se puede ver el Congreso de los diputados completamente blindado de policía. El piquete continúa subiendo hasta Cibeles mientras se oyen gritos como “No nos representan” o “ser policía, vergüenza me daría”. La presencia policial es aún muy escasa, nada que ver con lo que sucedería unas horas más tarde.

- Rodeamos la rotonda de Cibeles y la marcha confluye con un piquete del sindicato CC.OO. Los dos grupos  están separados, pero cerca, recorriendo las mismas calles. Se llega a Gran Vía mientras gritan “Mariano, Mariano, no llegas a verano”. Entre los dos piquetes suman alrededor de 500 personas, son obreros y estudiantes más o menos coordinados. Si tras el 15-M, la percepción sobre los sindicatos era que no representaba a un amplio espectro de la realidad social, durante la huelga parece estar claro que “hay que sumar”, que la izquierda debe actual en bloque.

- Ya son las 3:00, se ha recorrido Alcalá, Gran Vía, Plaza de España, Princesa… es hora de comenzar a pensar en el siguiente escenario: las cocheras de la EMT de Carabanchel. Pero el cansancio empieza a notarse. Caminamos junto a CC.OO hasta el Ateneo Primero de Mayo, donde miembros de este sindicato están repartiendo café y bocadillos. Las cocheras de Carabanchel están bastante alejadas como para ir andando, por lo que muchos manifestantes van en vehículos particulares.

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- No puedo asegurar que el piquete juvenil-precario haya llegado hasta las cocheras en coches de miembros de CC.OO, yo lo hice así. Allí hay reunido un pequeño grupo de sindicalistas, trabajadores de la empresa. A medida que van llegando más coches, el piquete crece. La presencia policial ya es mucho más elevada y corren rumores de que hay policía a caballo. No es de extrañar, ya que un millar de antidisturbios ha sido trasladado a la capital desde todo el estado, a lo que hay que sumar los más de 2.000 que componen la Unidad de Intervención Policial madrileña. Puede ser el mayor despliegue policial que haya visto la mayoría de los manifestantes. O, al menos eso dicen.

“- Paralizar los transportes públicos es una de las primeras acciones para que una huelga general tenga éxito. La policía ya se sabe la lección, por lo que, en cuanto el piquete juvenil-precario se une al piquete de CC.OO no duda en pedir de refuerzos. El número de policías ha crecido exponencialmente en minutos. Todos están concentrados frente a las cocheras. Hay mucha tensión. Los piquetes ven salir los autobuses de servicios mínimos mientras gritan “esquilores”. Algunos están allí para certificar que, efectivamente, sólo se cumple con los servicios mínimos. Otros hablan de no dejar pasar a ningún vehículo más. Pero el cordón policial que protege las puertas por las que salen los autobuses es muy numeroso. De repente aparecen los caballos. Hay revuelo.

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-5:30 La primera línea del piquete está ahora compuesta por miembros del piquete juvenil, que poco a poco intenta acercarse a las puertas. Es un momento de caos y la policía carga, también desde los caballos. Hay varios heridos. De vez en cuando, regresa un autobús con las lunas pintadas de spray, pero cada vez son más los vehículos que logran salir a hacer su ruta, ya sin cartel de “servicios mínimos”.

 - CC.OO y su gente se ha movido hacia la parte trasera del grupo, dejando al piquete juvenil solo en primera línea. Este movimiento no le hace gracia a nadie. Hay discusiones y gritos. El piquete juvenil-precario entiende que no se va impedir que los autobuses salgan. CC.OO no parece que vaya a movilizarse para bloquearlos. El piquete precario está molesto y decide retirarse de las cocheras”. Un grupo grande de jóvenes comienza a caminar entonces hacia un centro social ocupado de los alrededores.

El grupo se compone de unas 150 personas. En una fila larga, caminamos hacia el lugar de descanso. Hay una media hora de camino, pero la policía nos sigue de cerca. Hay “lecheras” detrás del grupo y una siete motos –algo nuevo hasta ahora- de la Policía Nacional que nos siguen en cada esquina que giramos. Hay miedo a una carga, estamos lejos y no hay cámaras, por lo que sería fácil disolver el grupo. La tensión es contante, la policía está muy cerca. De repente, un grupo de antidisturbios comienza a seguirnos a pie, con escudos, cascos y escopetas de bolas de goma. Se les puede escuchar que están “hartos” de seguirnos. El centro social ya está cerca, pero no termina de llegar.

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-7:30. Por fín entramos en el centro social ocupado. Allí espera algo de comida y café. Pero no estaríamos mucho tiempo allí. Tenemos que movernos, tenemos que salir. La policía nos ha seguido hasta el final. Es demasiado arriesgado ir a pie hasta el centro de Madrid, por lo que se decide ir en metro. La policía no se despega y nos “acompaña” hasta el mismo andén.

La sensación es de tristeza, no se ha logrado el objetivo de la mañana y se ha obligado al grupo a utilizar el metro a pesar de ser jornada de huelga. Al salir del metro tengo que ir a casa a cargar baterías. La próxima cita es en la Puerta del Sol a las 10:00. Mientras, el piquete juvenil decide unirse a la asamblea del barrio de Lavapiés para continuar la jornada de lucha. De camino a casa me encuentro con un coche de policía destrozado. Al parecer, ha chocado con otro vehículo y se ha atropellado a varias personas. Se confirman seis heridos, entre ellos policías.

10:00. No se ha podido entrar en la Puerta del Sol, el despliegue policial es desproporcionado. Por lo que se corta la Gran Vía. El piquete juvenil vuelve a estar junto a CC.OO, ahora ya con otros sindicatos como UGT y CGT. Durante toda la mañana se recorren las calles del centro  intentando que las tiendas cierren durante la huelga. “No hay cosa peor que ser un esquirol”, se canta. Al piquete juvenil se han unido varios estudiantes. Parecen más jóvenes, pero con ganas de movilización. Durante dos horas continúan las marchas.

13:00 La mañana se da por terminada. Es hora de ir a comer. En el barrio de Lavapiés hay comidas populares para reponer fuerzas. Yo me voy a casa. Tengo que dormir un poco. La accion siguiente está prevista para las 16:30. Al parecer, será una marcha en pijama, o algo así.