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Las camisas madiba de Mandela

Jamie Clifton
London, GB

Obviamente, cualquier persona con ojos se habrá dado cuenta del ascenso que han tenido las camisas estampadas en estos últimos 18 meses, pero de todas formas, nadie lleva una mejor que Mandela. El verano pasado después de permanecer toda la noche echándonos a perder, una amiga y yo decidimos ir a hacer algunas compras de cosas de segunda mano. Cuando me compré una de las camisetas estampadas estaba un poco obsesionado con el tiempo, y mi colega comenzó a cantar el estribillo de "Free Nelson Mandela" y siguió cantando con intervalos de 15 minutos durante el resto del día.

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En Sudáfrica las camisas nunca se han ido realmente y han llegado a ser conocidas como Madiba (es el nombre del clan Xhosa de Mandela) y son muy populares entre la gente de S.A. Hablé con Desre Nash, editora de la página web presidentialshirt y diseñadora que le dió a  Mandela la primera de esas camisas, un número negro de seda decorado con imágenes de peces de colores. Esta misma diseñadora a estado haciendo camisas para él desde entonces. Por desgracia, la primera vez que iba a entrevistarla, su casa había sido saqueada por algunos jóvenes de la localidad.

VICE: ¿Qué pasó antes?
Desre Nash: Lo siento, tío. Me he levantado esta mañana para descubrir que nuestra casa había sido allanada, la televisión, todos nuestros objetos de valor del salón, y mi bolso habían desaparecido, y una mujer sin su bolso no es bueno ¿sabes? Mi marido bajó las escaleras cuando los escucho, pero creo justo acababan de escaparse, que es probablemente una buena cosa ya que en realidad nadie quiere encontrarse con gente así.

¿Este tipo de cosas suceden a menudo por esta área?
Bueno, sí, por desgracia todavía sucede en todas partes en el sur de África. Hemos estado en este complejo particular tan solo unos pocos meses y no había sucedido nada hasta hoy, pero sí, creo que los robos son bastante normales. Gracias a Dios no hubo violencia involucrada con nosotros.

Cierto. ¿Vamos a seguir con la entrevista?
Sí, estoy lista para ti.

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Guay. Háblame de la primera camisa que le diste a Nelson Mandela.

De acuerdo, básicamente se trataban de los dos días antes de su investidura y él venía a hacer un par de apariciones públicas en Ciudad del Cabo. Ese día tenía que reunirse con la comunidad judía y el día antes había ido a hablar con la comunidad musulmana en un lugar llamado Bo-Kaap, creo que todo eso sólo servía para demostrar cuán involucrado estaba con every demographic? del país. Él estaba hablando acerca de cómo las familias judías en el sur de África habían sido separadas por el Apartheid en los últimos diez años y estaba haciendo una llamado hacia nuestras familias para que regresaran a Sudáfrica, y trajesen con ellas las habilidades y conocimientos que habían aprendido en el extranjero, lo cuál que me tocó de cerca, ya que acababa de volver de los Estados Unidos unos meses antes.

¿Cómo conseguiste darle aquella primera camisa? Seguro que no podías simplemente ir y darle algo, no?

No. Bueno, yo siempre había querido estar en el nuevo conjunto de Nelson Mandela en Sudáfrica y fue un sueño para mí tener la oportunidad de reunirme con él. Me enteré de que estaba haciendo algunos actos de presencia en la misma calle donde yo vivía y pensé "tengo que darle un regalo", pero no hay mucho que comprar a las 23 horas un sábado por la noche, ¿sabes? Entonces me acordé… "Espera, tengo una camisa de mi antigua tienda en los Estados Unidos con la etiqueta todavía, sólo ocurre que es una extra grande". Así que esa es la camiseta que le di y que se convirtió en la famosa camisa del pez.

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Esa fue la que desató la locura de las camisas Madiba?

Sí. Bueno, esa camiseta se convirtió en la firma de la marca, así que creo que hubo una especie de tendencia, si quieres llamarlo así. Mientras Mandela estuvo en el poder hasta su gobierno comenzó a usar esas camisas, pero creo que el actual gobierno a vuelto a la sangrienta historia del traje y la corbata.

Entonces, ¿cómo conseguiste realmente darle la primera camiseta?
Bueno, al final de su discurso en la sinagoga, la calle estaba repleta con unas 10.000 personas, había un montón de abuelas porque es una zona de ancianos, y todos estaban tratando de obtener una visión del hombre. Me acerqué a su coche y llamé a la ventanilla del conductor, éste, la bajó de inmediato, a diferencia de Estados Unidos en los que probablemente te echen y probablemente te detengan, ¿sabes? Luego, el conductor señalo al guardia y dijo: "Ve y dile a él, él te ayudará", y por supuesto el conductor estaba en plan "No hay problema", así que le di un enorme abrazo para pasar a Nelson Mandela. Después de eso me fui y me encontraba en un alto, como si estuviera en 50.000 nubes, ¿sabes?

¿Cuál fue el siguiente paso después de eso?
Bueno, estuve preparando mi debut, sí. Luego, al día siguiente de la inauguración, un amigo me llamó diciendo: "¿Has visto el periódico?" pero no me dijo nada. Compré un diario y, para mi absoluto asombro, allí estaba él en la portada con la camiseta del pez que yo le había dado. Empecé a enviarle camisas a través de María, su PA.

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Wow. Así que, cuando empezaste a hacer camisas específicamente para él?
Debió haber sido alrededor de un año después de la camisa de los peces. Recibí de la nada una llamada de María, diciendome que la próxima vez que se encontrasen en Ciudad del Cabo iban a organizar una reunión conmigo y me quede asombrada. Era como si mi dieta básica fuera, orar y soñar con la reunión con Nelson Mandela. En serio. Creo que mucha gente pensaba que había perdido el norte.

¿Entonces, qué ocurrió cuando te reuniste con él?
Bueno, cuando entró en la habitación, literalmente me lance en sus brazos y empece a abrazarlo. En ese momento, estaba muy llorosa y él dijo: "es un honor conocerte" y yo deseaba sólo corregirle, ¿sabes? decirle algo como: "No, el honor es mío!" Esa es la humildad de este hombre. Luego le dije que quería ofrecerle mis servicios, pero que yo no estaba buscando una paga ya que yo ya tenía mis negocios de fabricación de camisas de hombre. Entonces me preguntó: "Bueno, ¿te gustaría hacer algunas camisas para mí?" y pensé "Oh, Dios mío, por supuesto!" Un mes más tarde le entregue la primera camisa de seda para su 79 cumpleaños.

El otro día fue su cumpleaños, ¿verdad?
Sí, 93, lo que te muestra el tiempo que he estado involucrada en esto hasta ahora, da un poco de miedo . Pero sí, a continuación, en los próximos cuatro años fui invitada a todos los banquetes presidenciales que tuvieron lugar.

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Wow. ¿Tienes algún chisme de los banquetes?
No chismes, no. Sin embargo, en el banquete de Bill y Hilary Clinton, me presentó al presidente Clinton como si yo fuera su creadora de camisas personal, cosa que era bastante.

¿Te acuerdas de como eran las primeras cuatro camisas que le hiciste para él?
Las cuatro primeras eran estampadas.

En ese momento, yo estaba trabajando en Indonesia, haciendo camisas de seda en el centro de Java, por lo que las camisetas era todas pintadas a mano, uno de los tipos de camisas de Mandela.

¿Has venido con los diseños?
Bueno, sí. Una combinación de mí misma, el sastre que hizo el corte de las camisas, y los chicos de Java. Actualmente he hecho muchos de los diseños y ya no me siento y los hago todos uno a uno.

¿Te ha preguntado alguna vez él por alguna impresión en concreto o algo así?
No, pero lo que si hizo, en 1996, en su visita de Estado a Gran Bretaña, es que María me llamo porque necesitaba cuatro camisas negras para usar mientras él estaba allí. Para ese viaje, en realidad la reina lo invitó a quedarse en el Palacio de Buckingham, cosa que no suele ocurrir normalmente. No sé donde por lo general a la gente pero no es en el Palacio de Buckingham. Además, él también fue uno de los únicos visitantes que no llevo traje mientras estuvo con la reina. En realidad, una vez que estuve en su casa me dijo que después de ese viaje, Giorgio Armani le había llamado y estaba muy molesto porque Mandela no llevaba ninguno de los trajes que le había dado!

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Ja, ja, así que básicamente venciste a Armani para vestir el mejor tipo del mundo.
Bueno, sí. Él estuvo a favor de las camisas antes que del traje para esa ocasión. Creo que las camisas de algún modo representan las nuevas ideas de Sur África, ¿sabes? Eran tan informales y la mayoría de las primeras camisetas llamaban bastante la atención por lo cuál eso le hizo destacar entre todos los líderes mundiales y sus trajes. La única vez que vistió un traje creo que fue en una reunión de la ONU, pero aparte de eso nada, a pesar de todas las otras reuniones de gran importancia como las del  G-8, él siempre vestía una camisa.

Hablando de la ONU, he leído que has hecho camisetas para Mandela con tejidos que le habían prestado diferentes líderes mundiales?
Sí, eso comenzó en la inauguración, en realidad. Su inauguración fue la más concurrida que la de cualquier otro presidente en el planeta, como siempre, y por supuesto todos ellos le llevaron regalos. Algunos de esos regalos eran telas, es un poco raro, ¿eh? Más extraño aún, el tejido de la presidenta de Filipinas era una hermosa seda pintada a mano, similar a algunas de las camisas que yo había hecho a Mandela. Luego hubo algunas seda de unos dos metros, muy bonitas bordadas de color rojo y oro que fueron regalo de la presidenta de la India. Y luego más seda proveniente de Egipto con la bandera de Sudáfrica pintada en ésta.

Fabricar camisas con esos materiales debe haber sido un privilegio?
Bueno, ya sabes, cada pequeño paso en este camino, ha sido como una bendición, como un milagro para mí. Es algo que uno nunca acaba de esperarse ni de creer que puede suceder.

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Háblame de la colcha que hiciste con los tejidos descartados.

Bueno, a lo largo de los años que he dedicado a hacer camisetas he ido guardando un montón de retales. Al principio, no sabía lo que iba a hacer con ellos, pero llamé a mi sastre y me aseguré de no se deshiciera de ellos. Con el tiempo tenía bolsas llenas de seda, incluidos algunos retales de las telas de los presidentes, y un día, poco después de la muerte de mi padre, me desperté y sólo tenía en mente la idea de convertir todos los trozos de tela en una especie pared colgante y gigante. Mandela se había retirado hacía un par de años así que no lo había visto y de pronto mi viejo amigo Daniel me llamó y me dijo que se iba de vacaciones con Nelson Mandela. Yo no tenía idea que era tan buen amigo de Mandela, pero me preguntó si podía ver si Mandela firmaría la colcha para que ésta pudiese ser subastada con fines benéficos. Volamos hasta la residencia de Mandela en Mozambique y pase todo el día con él y con su esposa, y fue uno de los mejores días de mi vida, creo.

¿Le has visto desde ese momento?

Sí. En realidad, me llevé a mi marido hasta allí justo antes de la Copa del Mundo del año pasado, porque quería un poco de nuevas camisetas para el torneo.

Eran temas de fútbol?

Ja, ja, no. Eran de seda negras con botones del famoso cristal Swarovski y tachuelas alrededor del cuello y los puños.

Ah, eso es una lástima. ¿Hay alguna que te haya gustado mucho?
He hecho demasiadas como para elegir! Con los años he hecho más de 150 camisetas para él, y luego estaban las ya existentes que le di a él, por supuesto.

Sin embargo, recientemente he estado haciendo camisas que son … umm, extravagantes tal y como esas, pero no tan chillonas. Ya sabes, más camisetas de color negro con cristales y otras cosas en lugar de usar telas muy brillantes. Sus camisas son más refinadas a medida que a ido creciendo. Pero no, yo no puedo decidir si una es más especial que otra, simplemente ha sido una experiencia increíble en su totalidad.

¿Tienes un recuerdo que sea tu favorito de Mandela? A excepción de las comida, por supuesto.
Sí. En 1999 me invitaron a su fiesta de Navidad personal y me senté junto a él toda la noche.

¿De que hablasteis? Del clima? De la TV?
Ja, ja, no. Me estuvo preguntando acerca de la actual situación política de Indonesia ya que yo estuve allí mucho tiempo haciendo camisas y él sólo estaba muy feliz de seguir llenando mi copa de vino! Esa noche, en realidad, llevaba la camiseta que había hecho con los retales de la tela de la presidenta de Filipinas, y además él llevaba una especie de divertido sombrero navideño como de chef. Esa fue una gran noche.

JAMIE CLIFTON