Las cucarachas son el futuro

Hasta hoy, las cucarachas han existido básicamente para ser motivo de gritos y repugnancia cuando las vemos en la cocina. Son las reinas de la tierra; cuando suba la marea, el sol se apague y la humanidad se extinga, las cucarachas sobrevivirán.

Pero el futuro de las cucarachas es otro, no sólo serán personajes de una pesadilla post apocalíptica. Por si no lo sabéis, por todo el mundo están criando cucarachas en granjas para convertirlas en parte de una dieta básica y también las estamos convirtiendo en cíborgs.

Empecemos —como se hace siempre que se habla del futuro— con China. Ahí es donde está dando frutos el negocio del cultivo de cucharachas y donde la operación más grande de cucarachas se está gestando: se crían más de diez millones de cucarachas. Una reciente investigación del LA Times sobre el nuevo sector, descubrió que China tiene más de cien granjas de cucarachas y cada semana crean más y más granjas.

Las granjas venden sus cucarachas a compañías cosméticas y proveedores de medicina tradicional; es proteína súper barata. Casi siempre, los insectos son aplastados para convertirlos en un polvo rico en proteínas antes de ser empaquetados y enviados por mensajería. El negocio es tan exitoso que el precio de la cucaracha se ha elevado. Desde 2010, los precios se han elevado de dos dólares por medio kilo hasta 20 dólares. Cinco gigantes farmacéuticos están comprando cucarachas al por mayor y está disparando los precios; el cultivo de las cucarachas está en camino de convertirse un negocio exitoso.

El negocio de las cucarachas es tan rentable que están buscando expandirse a otros mercados. The Times dice: “los granjeros esperan que aumente la demanda al vender las cucarachas como si fueran un manjar”.

La gente ya come cucarachas secas en muchas partes del mundo. Recuerdo haber visitado los mercados de Bangkok y ver gente meter la mano en bolsas gigantes y comerse las cucarachas como si fueran papitas. Las Naciones Unidas, de hecho, ha estado animándonos a que comamos más insectos, ya que son ricos en proteína y criarlos no requieren muchos recursos. Son sostenibles. Que nos jodan, tenemos que aguantarnos y aceptar que las cucarachas son asquerosas pero la criatura del futuro.

Además de ser competencia para la fuente de comida del mañana, las cucarachas están siendo hackeadas. Roboroach, el kit de "construye tu propia cucaracha cíborg" fue noticia hace poco, ya que demostró lo fácil que es conectar a las cucarachas para, por ejemplo, apostar por nosotros. La tecnología te permite controlarlas desde tu Smartphone.

El hecho de que la tecnología sea lo suficientemente simple como para convertirse un proyecto de Kickstarter de 99 dólares, levantó sospechas y nos hizo pensar sobre las aplicaciones de cucarachas robot. Ahora, los investigadores creen que las cucarachas cíborg serían buenas para rastrear zonas de desastres, porque las cucarachas a control remoto pueden meterse entre las piedras después de un terremoto y recopilar datos de la escena antes de que lleguen los trabajadores de rescate.

Las cucarachas también están demostrando ser fuentes de información importantes para los estudios robóticos, porque se equilibran sin usar sus cerebros, los robotistas están echando manos de los insectos para aprender a programar a los robots para que hagan lo mismo.

Mientras tanto, los científicos de Harvard están construyendo auténticas cucarachas robot. Como apunta Michael Graham, estos pequeñines podrían ser usados algún día para recopilar información sobre ecosistemas y hacer pruebas de contaminación.

Odio decirlo, amigos, pero el mundo de mañana estará lleno de cucarachas.

Lee el artículo original en Motherboard.