FYI.

This story is over 5 years old.

Elecciones 2016

Jodidos por las elecciones: cuando palmas 200 euros por la mesa electoral

Tener que pagar 200 euros para poder ser presidente de la mesa electoral o viajar desde otro país son algunas de las cosas que han tenido que hacer algunos españoles para no acabar en la cárcel.

Otra vez elecciones. Pues sí. Tenías mil planes hechos para aquel fin de semana (para algunos más largo de lo habitual), pero como buen patriota irás a votar. Tu país te necesita.

Cambiarás la fiesta con tus amigos por una comida familiar en casa de tus padres y acabarás hablando de política. El día de las elecciones siempre toca. Pero entonces, cuando estés puteado y sientas que has desperdiciado tu día de sol y playa para introducir una papeleta dentro de una urna (eso si no has sido previsor y no has votado antes por correo), piensa en aquellos a los que las elecciones le han truncado el día más que a ti: a los que les ha tocado asistir a las mesas.

Publicidad

Por si no es suficiente que se te queden los dedos agarrotados de tanto tachar con una regla, o no tener al día siguiente no tienen voz después de repetir mil veces "ha votado", hay algunos a los que les toca viajar cientos de kilómetros, perder vacaciones pagadas o días de trabajo por culpa de la fiesta de la democracia. Aunque todos irán, todos coinciden en que se podría regular mucho mejor quien tiene o no que ir a las mesas electorales.

SOPHIA PEGA, 26 AÑOS

Estaba empadronada en Menorca, en casa de mi madre, aunque actualmente vivo en Barcelona. Un sábado por la mañana la policía menorquina entregó una carta a mi cuñada. Era para mí y decía que me tocaba ser presidenta de la mesa electoral para el 26J.

Cuando me escribió obviamente pensé "no me lo puedo creer" porque me tocó ya viajar a Menorca en las últimas elecciones por Navidad teniendo que anular un vuelo a Austria.

Me fui a empadronar a Barcelona después de saber que tenía que formar parte de la mesa electoral en Menorca por segunda vez en seis meses. La idea era demostrar que realmente vivo aquí. Intenté recurrir alegando que vivo en Barcelona y que me supone un gasto alto tener que desplazarme hasta Menorca.

Ahora mismo los billetes cuestan unos 200 euros, teniendo en cuenta que en Menorca se celebra San Juan y es un festivo en el que mucha gente vuela a la isla. Me dijeron que como me empadroné después de que se me notificara que tenía que formar parte de la mesa estaba obligada a asistir y rechazaron mi alegación.

Publicidad

Justo el 24 de Junio se casan unos amigos cerca de Figueras y tenemos alquilado con mi novio un bungalow en la playa para todo el fin de semana. Íbamos a volver el domingo por la tarde para votar. Yo tengo el voto por correo…

No es que no quiera estar el domingo en las mesas electorales, si fuera aquí en Barcelona no me importaría, pero el hecho de que tenga que viajar la noche anterior y la mañana posterior, después de haber trabajado desde las 8 de la mañana hasta pasadas las 11 (ya sé cómo va la cosa porque lo tengo reciente), y además de tener que pagar el billete de 200 euros, que sea esta la segunda vez en seis meses, me putea enormemente.

Creo sinceramente que podría ir cualquier persona que viva en el vecindario y que incluso le vengan bien los 60 euros que dan en concepto de dietas. A ver, que no es tenga que estar alguien por mí, simplemente podría ir cualquier otra persona que no se tenga que gastar 200 euros para poder pasar allí el domingo.

A mí me supone tener que volver el sábado por la tarde desde Figueras en tren hasta Barcelona (dos horas), coger un avión hasta Menorca, pedirle a mis hermanos que me vengan a buscar al aeropuerto, que está a una hora de mi pueblo para pasar el domingo 16 horas en la mesa electoral y al día siguiente levantarme pronto para hacer el trayecto inverso e ir a trabajar el lunes habiendo disfrutado de la media jornada de descanso.

Entiendo que se te pueda penalizar si no acudes sin avisar porque obviamente es muy importante que las mesas se puedan constituir, pero me parece que de seis a veinticuatro meses de multa o privación de libertad e incluso penas de cárcel son excesivas.

Publicidad

MIREIA SABATÉ, 29 AÑOS

Mi madre soñó que le tocaba ser presidenta de la mesa en estas elecciones justo cuando ya había pagado un viaje para irse de vacaciones. Se despertó muy angustiada y todos en casa nos reímos de ella.

Un día le llegó la famosa carta. Entonces no nos hizo tanta gracia. Llamé a algunos amigos involucrados en política para preguntarles qué podíamos hacer ante aquella situación.

Justo hace 30 años le pasó a mi madre una situación similar en unas elecciones generales. Fue aproximadamente en las mismas fechas y le tocó estar también de presidenta. En aquella ocasión puso el deber por delante.

Un sueño hecho realidad: Recibir la carta de convocatoria a la mesa electoral justo cuando te has comprado un billete para irte de vacaciones

En la misma carta que te llega a casa se recogen los motivos por los que puedes eximirte para no formar parte de una mesa electoral. Si tienes cualquier baja, incapacidad o causa médica grave justificada que te impida acudir a la mesa electoral, si tienes una boda o un evento de un pariente cercano, si tienes más de 70 años, si eres monja de clausura… son algunas de las justificaciones que se admiten para evitar ejercer el cargo de presidente, vocal o suplente.

El caso de mi madre en principio era una de las excusas válidas. Aparentemente era cuestión de trámites. El procedimiento era el siguiente: Si demostrabas que el billete lo habías comprado justo antes que se publicase la fecha de los comicios podías presentar una alegación adjuntando el recibo de los billetes y mediante una carta de renuncia a la mesa electoral. Así lo hizo. Pidió permiso para ausentarse de su trabajo para ir a la Ciudad de la Justicia a presentar en persona todo el papeleo.

Publicidad

Mi madre es una persona políticamente comprometida, pero claro, no dejaría de irse de vacaciones para estar en una mesa electoral… ¡ya tenía previsto votar por correo!

VICKY (MRS KIRSCHTEIN), 21 AÑOS

Soy de un pueblo muy pequeño de Cantabria que quizás ni sabéis dónde está. Somos menos de 300 habitantes. De hecho en el censo se juntan los dos pueblos vecinos y en total somos unas 400 personas. En dos años me ha tocado estar en la mesa dos veces. En mi pueblo no hay mucha gente jóven, así que siempre le toca a gente más mayor, pero a mí precisamente la primera vez que me tocó votar. A mi hermano le tocó una vez de suplente.

Cuando eres de un pueblo muy pequeño y te toca siempre a ti, jode

Justo el fin de semana de las elecciones se celebra el salón del manga de Bilbao. . Se va a celebrar por segunda vez, pero es el mayor evento de este tipo que se realiza en la zona norte y me hacía mucha ilusión.

No me dolería tanto faltar un día si no fuera porque me he pasado un montón de horas confeccionando un cosplay (disfraz de un personaje). Todavía no está terminado. Prefiero que la gente de mi pueblo no sepa que soy una friki que se disfraza de personajes japoneses porque a saber cómo pueden llegar a interpretarlo.

SANTIAGO PINTOS, 21 AÑOS

Vivo en Daroca, pero estoy empadronado en Zaragoza, a hora y media en bus. Terminé este diciembre las prácticas del grado superior y ahora mismo estudio para sacarme el carnet de conducir. Trabajo puntualmente en una piscina de camarero y me mantengo gracias a mis padres. Tengo 21 años y mi trabajo anterior digamos que no me generó paro.

Me toca de presidente de mesa y justo el fin de semana de las elecciones me habían dado curro. Me llaman según me necesitan, pero ese finde seguro que lo pierdo. Tendré que estar en Zaragoza el día antes porque a las 8 ya tengo que presentarme en el colegio electoral. Por suerte me puedo quedar en casa de un familiar.

Publicidad

Aunque me den 63 euros en concepto de dietas estoy perdiendo dinero además de tiempo. El trayecto entre Daroca y Zaragoza ya cuesta ocho euros y en un fin de semana de vigilante me puedo sacar más que con las dietas que me pagarán. Con ese dinero que me sacaría de más iría de vermut por el pueblo.

Existe muchísima gente en el paro y sin ningún ingreso que le vendría muy bien ese dinero y que no le supondría ninguna carga. Con 63 euros podrían comer varias semanas. Por un lado veo correcto que se regule la asistencia, aunque deberían de poder existir voluntarios para suplir a la gente que nos viene mal.

RAQUEL ANDRADES , 20 AÑOS

Cuando me llegó la carta del Ministerio pensé lo peor. Mi hermano fue quien recibió la notificación. La verdad es que ni me enteré yo misma (bajo mi punto de vista eso lo hacen fatal, porque si en mi casa no hay nadie no me entero que me ha tocado).

Ahora estoy estudiando para los exámenes finales de mi carrera. El día 29 tengo el examen que considero más importante del curso. Para mí es el que tiene más relevancia y además es una asignatura que necesita bastante estudio y lectura.

El día 29 tengo el examen más importante de mi carrera y me ha tocado de vocal el 26. Un día perdido en estas fechas es significativo

Vivo en Sevilla, en un piso de estudiantes. Justo el día 26 hay huelga de transporte y no sé cómo iré hasta Puerto Real para ser vocal de la mesa electoral. El billete cuesta unos 13,50 ida y 13,50 vuelta.

He ido a reclamar al ayuntamiento pero me han dicho que es en vano. Me dieron un número de teléfono que contacta con una oficina en el Puerto de Santa María pero me dijeron que es algo que no tiene solución. Me dijeron que podía ir personalmente a la oficina a poner una queja pero que otra chica que estudia en Huelva lo había intentado y se lo habían denegado.

Creo que en la mesa electoral debería estar alguien que de verdad necesite ese dinero que dan y que tenga más tiempo. Incluso mi padre, que es autónomo, ha tenido que cerrar más de una vez cuando le ha tocado estar en la mesa electoral.