Así fueron los primeros años del punk en Ámsterdam

FYI.

This story is over 5 years old.

Fotografia

Así fueron los primeros años del punk en Ámsterdam

El punk llegó a la capital holandesa en 1977, después de que Hansje Joustra crease una tienda de discos en el centro de la ciudad después de haber estado en Nueva York donde se encontró de cara con la explosión inicial alrededor del CBGB.

Izquierda: la cantante de Storch el 30 de abril de 1979, durante el festival punk Fuck the Queen, frente al coffee shop punk NoName

Hacia 1977, el punk llegó a Ámsterdam como una exhalación. El epicentro del fenómeno era Rozengracht, población en la que Hansje Joustra había establecido su tienda de discos. Hansje había estado en Nueva York, donde visitó el legendario CBGB, y a su regreso estaba más convencido que nunca de que el punk se iba a comer el mundo, y su tienda de discos sería el escenario en el que ocurriría. Hubo movimiento, grandes planes, de los que surgieron las dos primeras discográficas del género en Ámsterdam: Plurex y No Fun.

Publicidad

Ambos sellos ficharon a las primeras bandas de punk holandesas, como los Tits, los Helmets, Meccano Ltd., Mollesters y Subway. De la noche a la mañana, los Países Bajos tenían una prolífica escena punk, antes incluso de que se impusieran las crestas y los piercings en la nariz. Por aquel entonces, una chupa de cuero ya era muy punk.

Sin embargo, la primera oleada enseguida perdió fuelle: la mayoría de las bandas acabaron abandonando claudicando y pasando a otros estilos y géneros (post punk y new wave), y Plurex y No Fun empezaron a publicar material más experimental. No Fun, además, cambió de nombre y pasó a llamarse Torso.

El año pasado, al periodista musical Oscar Smit se le ocurrió la genialidad de poner en marcha un proyecto con el que rendir homenaje a las tres discográficas (Plurex, No Fun y Torso): organizó una band night en Paradiso y un tour punk guiado por la ciudad, elaboró un libreto y montó una exposición en la sala Melkweg. Para las últimas dos iniciativas contó con la ayuda de Leonor Faber-Jonker, autora de "No Future Nu", un libro sobre la historia del punk holandés.

Las siguientes fotos pertenecen al archivo del fotógrafo Martijn de Jonge, que cedió unas cuantas imágenes para la exposición. También se incluyen fotos de varios artículos relacionados con el punk que podían verse en la exposición. Algunas son de la primera oleada del punk, otras pertenecen a un periodo posterior, en el que empezaban a predominar las tachuelas, el cuero, los imperdibles y los botones.

Publicidad

Fanzine punk "Attack", que existía incluso antes de que se formaran las primeras bandas punk en los Países Bajos

Izquierda: la bajista de Speedtwins, Jacki, en el Paradiso en 1978. Derecha: Nicole frente al escenario en el Paradiso. 1978

Punks jóvenes y felices en el Paradiso. 1978

Fanzine Attack

Punks del norte de Holanda durante una fiesta en la casa okupa "De Muur" en Spuistraat, Ámsterdam, el 30 de abril de 1986

Más punks, entre ellos la cantante de Zweetkutten ("Coños sudorosos") en la casa okupa De Muur, Ámsterdam, el 30 de abril de 1986

Árbol genealógico hecho por Joris Pelgrom, de los Helmettes para establecer las relaciones entre las distintas bandas del panorama (ya que muchas compartían a sus miembros)

Un chico con sombrero nazi durante el festival Fuck the Queen en 1979, frente al NoName

El legendario sencillo "Half Twee" de los Helmettes. Según Leonor, este tema es punk en estado puro: tosco, divertido, de aficionado y pegadizo. Fue producido por Dirk Polak (quien posteriormente fundó Meccano Ltd). Finalmente, Dirk decidió utilizar un pseudónimo, por lo que hubo que volver a hacer la portada para que se leyera "Dirigido por Bakfiets"

Ivy Green, una de las primeras bandas de punk holandesas, posan con los fans junto al Paradiso