8.000 globos iluminados recrearán el Muro de Berlín

Imágenes: Daniel Büche

Si de casualidad estas en Berlín en la segunda semana de noviembre e intentas ir desde el centro a través de la calle Friedrichstraße en dirección hacia Kreuzberg, seguro no llegarás muy lejos. A la altura del "Checkpoint Charlie", el famoso paso de frontera de la época de la Guerra Fría, la carretera quedará bloqueada por un muro de globos iluminados a unos tres metros de altura.

Del 7 al 9 de noviembre, unos 8.000 globos blancos de sesenta centímetros rodearán la ciudad, marcando la Lichtgrenze (frontera de luz), una instalación de casi 16 kilómetros que abarca la línea original del Muro de Berlín entre el puente Oberbaumbruecke y la calle Bornholm. Durante dos días y dos noches, el oriente y occidente de Berlín quedará de nuevo dividido.

La instalación fue creada por el artista y diseñador Christopher Bauder, que normalmente se dedica a desarrollar instalaciones cinéticas con LED con su empresa WHITEvoid y su hermano, el cineasta Marc Bauder. En 1998, los hermanos filmaron el documental Keine Verlorene Zeit (Sin Tiempo Perdido), sobre el destino de los jóvenes demócratas republicanos que fueron blanco de la Stasi al final de los 70. Dos de estos militantes de la oposición clandestina dieron a luz a la mujer de Marc, la directora Dorte Franke, tras haber pasado dos años en la prisión de la Stasi antes de ser rescatados por la Alemania Occidental.

Marc Bauder ha pasado un total de 120 horas trabajando con las imágenes del archivo histórico del Muro. En pantallas de vídeo de nueve metros de altura situadas en seis puntos clave a lo largo del camino, planea mostrar el Berlín dividido con la ciudad que conocemos hoy. Cada 150 metros a lo largo de Lichtgrenze, los visitantes también encontrarán un total de cien anécdotas e historias personales sobre el Muro, formando un paisaje colectivo de memorias de Berlín.

La carga emocional también la añadirán los padrinos de los globos que, el 9 de noviembre a las siete de la tarde, fecha del aniversario de la caída del Muro, pegarán mensajes personales a los globos y luego los desconectarán, dejando que las esferas llenas de helio se pierdan en el cielo nocturno de Berlín. Las luces LED integradas en los soportes, que requieren un total de 60.000 baterías, iluminarán los globos mientras despegan en su viaje estimado de doce horas: el material natural y biodegradable del que están formados es capaz de mantener el helio durante mucho más tiempo que un globo normal.

Para mantener el carácter ecológico del evento, los Bauder pidieron a investigadores de la Universidad de Hannover que produjeran los cierres de los globos también con material biodegradable. Los materiales resultantes serán descompuestos por factores medioambientales naturales, incluyendo luz del sol, oxígeno y bacterias.

Si se te pasó el periodo de solicitud para convertirte en el padrino de uno de los globos, todavía tienes la oportunidad de enviar tu mensaje de forma virtual a través de la plataforma Caída del Muro 25.