Darth Vader, Pacquiao y el príncipe que quiere ser presidente de la FIFA

Esta semana se confirmó un secreto a voces, la FIFA es un nido de ratas. Tras una investigación, el Departamento de Justicia de EE. UU. ha acusado a 14 dirigentes de la FIFA y arrestado a 6 de ellos por participar en extorsiones, sobornos y lavado de activos por unos 150 millones de dólares durante los últimos 24 años.

El escándalo no ha podido estallar en un momento peor (o mejor): dos días antes de la votación para elegir al próximo presidente de la FIFA.

Casualmente…

Estos son los únicos dos candidatos: Josep Blatter, un suizo calvo y gordo de 78 años, quien ha sido presidente la FIFA desde 1998, ha trabajado con los 14 hombres acusados, afirma ser el tipo de persona que simplemente "sigue adelante, como una cabra de montaña" y, con cuatro elecciones ganadas de manera consecutiva, es algo así como el Floyd Mayweather de la burocracia deportiva.

En la otra esquina está Ali Bin Hussein: príncipe de Jordania, descendiente directo de Mahoma y paracaidista militar certificado.

Alí es descendiente de los Hachemí: la familia que fundó Jordania, uno de los estados más prósperos de todo el medio oriente, y traza sus ancestros hasta Fátima, hija del profeta Mahoma y fuente de toda su descendencia en la tierra. Se graduó de Princeton (la misma universidad que ha graduado a 37 premios Nobel), luego se unió a las fuerzas armadas de su país, donde obtuvo el grado de brigadier y su certificación como paracaidista militar.

En 2011 fue elegido vice presidente FIFA para Asia, convirtiéndose, a sus 36 años, en la persona más joven en alcanzar ese rango. Al año siguiente, consiguió consiguió levantar el veto que la FIFA había impuesto sobre el velo, una medida que había descalificado a la selección sub 18 de fútbol femenino de Irán de las eliminatorias para los Juegos Olímpicos de Londres.

Y además le gusta que le digan Manny Pacquiao.

El príncipe Ali se ha convertido en una esperanza de renovación al interior de FIFA. Michel Platini, ex jugador francés y presidente de la Unión Europea de Asociaciones de Fútbol (UEFA), ha manifestado públicamente su apoyo al príncipe y se ha comprometido a reunir la mayor cantidad de votos posibles para su campaña.

Platini, quien en 2011 apoyó a Blatter en su cuarta reelección como presidente de la FIFA a cambio de que el suizo no intentara una quinta reelección, se siente traicionado y dice que Blatter se está aferrando a la presidencia de la FIFA ya que le entregado su vida a esta institución y teme al vacío que significaría vivir lejos de ella. "Si Blatter realmente ama a la FIFA, debería anteponer los intereses de la institución a los suyos", afirmó Platini en una entrevista.

Faltando menos de 24 horas para la votación, el príncipe Ali y su aliado Platini no la tienen nada fácil. El poder de Blatter al interior de la FIFA es tal que en las elecciones de 2011 y 2007, nadie más se postuló para la presidencia.

Para la elección de mañana, en la que de cada uno de los 209 países afiliados a la FIFA cuenta con un voto, Blatter cuenta con el apoyo de la mayoría de países afiliados a las confederaciones de Centro y Sudamérica, CONCACAF (que aporta 35 votos) Y CONMEBOL (que aporta 10 votos, entre ellos el de Colombia).

Cabe decir que los seis dirigentes arrestados provienen de Uruguay, Brazil, Trinidad y Tobago, Las Islas Caimán, Costa Rica y Venezuela.

A estos apoyos se suman los de la mayoría de países afiliados a las confederaciones de África, Oceanía y Asia.

De momento, las esperanzas del príncipe Ali se basan en los apoyos que obtenido de la mayoría de países afiliados la Confederación Europea, con la excepción de Rusia, que fue elegida como sede del próximo mundial en una elección que es una de las razones que han llevado a la policía suiza a arrestar a estos hombres, cuyo promedio de edad esta alrededor de los 65 años, en un hotel de cinco estrellas esta semana.

Al apoyo de los países europeos se suma el de algunos países disidentes que, como Australia, han decidido desobedecer a la voluntad de la confederación a la que pertenecen.

Luis Figo, ex futbolista de Real Madrid y Barcelona, y Michael Van Praag, presidente de la Federación Holandesa de Fútbol, son dos de las figuras importantes que están ayudando a Ali a reunir votos para enfrentarse a todo el músculo político de Blatter.

Figo, quien también estuvo interesado en la presidencia, retiró su candidatura en enero de este año afirmando que la votación era"un plebiscito para otorgarle el poder absoluto a un hombre y no voy seguir ese juego". Van Praag, también retiró su candidatura en enero con los siguientes palabras: "El príncipe Ali Bin Hussein es el candidato que parece tener más opciones de derrotar a Sepp Blatter en este momento".

Algunas de las propuestas del Principe Jordano son: rotar el mundial entre las 6 confederaciones, abrir el debate acerca de la tecnología como ayuda para los árbitros y reevaluar el sistema actual de ranking para selecciones nacionales.

Ali, quien afirmó que quiere convertir a la FIFA en "una organización de primera, digna de un deporte que une a billones de personas alrededor del planeta" ha retado a Blatter a un debate público, propuesta que el suizo aún no ha aceptado.

En pocas horas sabremos si las elecciones de la FIFA resultan como las películas: donde Luke Skywalker le gana a Darth Vader todas las veces o como en la vida real: donde los Mayweathers siempre se quedan con la corona, con el cheque y con un frasquito pequeño para poder llevarse a casa las lágrimas del público.