Cómo preparar leche con mariguana

La leche con mariguana es trampa, un cheat de la vida que pocos se atreven a tomar, un carril de bicis en el tráfico eterno de la monotonía. No hay nada mejor que despertar con un cafecito con leche cargado de buena vibra. O un cereal espacial. O un té, un licuado, hot cakes, o unos huevos con catsup y leche cannábica. Sus aplicaciones son infinitas, como su grandeza.

A diferencia del porro cruzado y el bong de 20 pesos, el proceso para hacer leche galáctica es un poco más tardado, pero mucho más gratificante. En total te debería llevar alrededor de hora y media hacer esta piedra filosofal del siglo 21, aunque una vez que la tengas podrás guardarla y beberla por varios días.

Vas a necesitar esto:

• Dos tazas de leche entera (la grasa es necesaria para activar el THC).
• Agua.
• Una olla grande y una más pequeña (para hacer un baño María).
• Un colador.
• Oro verde (entre ocho y diez gramos).

Primero muele la mariguana lo más fino posible. Puedes usar un grinder o el colador.

Pon agua a hervir, la suficiente para meter la otra olla pero no tanta como para cubrirla por completo.

Coloca la olla pequeña en el agua hirviendo y echa la leche ahí.

Esparce la mariguana en la leche y déjala cocinar alrededor de una hora. Es menester que le eches un ojo y le muevas de vez en cuando para que no hierva, se desparrame o se quede pegada a la olla.

Así:

Bien, si vives en México y tienes más de doce años, probablemente sepas a qué huele la mariguana. Si ya pasó una hora y tu leche ya huele a mota, pruébala. Si tu leche sabe a que alguien cocinó mariguana en ella, probablemente está lista.

¡Eureka! Ni los alquimistas medievales tenían tu capacidad de fusión molecular. Dependiendo de la calidad y la cantidad de mariguana, le leche se pondrá más o menos verde. Ojo, no soy tus papás ni nada, pero estas dos tazas de leche tienen entre ocho y diez porros de mariguana.

Es difícil resistirse a tomar un vaso de leche del universo. Aún así, lo más recomendable es probar con un poco y ver qué tan cargada quedó: un café genera el balance perfecto para volarte y despertarte. Dicho eso, se trata de un experimento y la ciencia no descansa, así que ponte creativo y date un paseo por la Vía Láctea.

Fotos por @manboob.pablo