Dodger Montaño tiene el UFC como horizonte en Albuquerque

Sale de su cuarto, baja las escaleras y toma contados pasos para toparse con el tatami. Ahí saluda con una comodidad familiar a los rostros con los que se encuentra, sonriendo, y a la vez, listo para el choque de guantes, caiga donde caiga el golpe, y listo para seguir adelante. De la pelea, Augusto “Dodger” Montaño no teme. “Tal vez el no pelear”, es a lo que me responde temer.

Concentrado enteramente en su desarrollo como peleador, desde hace más de un año, Dodger vive en uno de los gimnasios de MMA más reconocidos a nivel mundial—Jackson-Winkeljohn MMA. De la Ciudad de México y haciendo su carrera de MMA con el equipo Bonebreakers en su país natal, Dodger ha hecho de Albuquerque, Nuevo México su ciudad.

La inspiración que genera Cain Velasquez, la libertad que representa la cultura de los piratas, la rebelión musical de Bob Marley, el pos-punk y movimiento gótico de Bauhaus, las palabras de Raoul Vaneigem, todo esto acoge a Dodger en su dormitorio, valiéndose de distintos elementos de la vida para seguir firme en cada paso, con cada reto, y manteniendo la mirada determinada.

“No es nada fácil. Allá [en México] la gente te ve, sabe y tiene noticias por las redes sociales, por los medios, y dicen, ‘qué padre, qué chido, qué bonito’, pero cuando ya estás aquí en el sparring, cuando te cae el golpe, te caen las patadas, cuando te abren, te tumban y uno dice, ‘sí, bueno, qué padre, qué chido’. No todo es tan bonito, ni es puro gozo. No venimos aquí a jugar canicas. Esto es parte del proceso”.

Entre el duro entrenamiento y medirse día a día con los mejores peleadores del mundo, dejar costumbres culturales, aprender un nuevo idioma, encontrar un nuevo hogar, desapegarse de los círculos sociales, dejar la intimidad que ofrece un espacio propio, y convertirse en el nuevo del barrio donde no necesariamente seas completamente bienvenido han sido más detalles dentro del conjunto de obstáculos que ha enfrentado Dodger en esta búsqueda de su desarrollo y construcción de su camino, en parte, hacia el UFC.

Mientras el conteo regresivo hacia el primer evento del UFC en México continúa, lo que aparenta ser el último paso para que Dodger finalmente pise el octágono es su próxima pelea el 31 de mayo del 2014 en el MMA Jackson’s Series XII en Pueblo, Colorado. También debuta como peso wélter, bajando una categoría y describiendo el cambio como “la mejor decisión”, encontrando condiciones mejoradas como peleador y atleta.

“El objetivo con esta pelea es concretar. Con todo este proceso, con todas las cosas que hemos podido mejorar, el proceso de un año de depurar mis capacidades técnicas y mis habilidades, el objetivo es demostrarlas y pasar este examen que cierra este ciclo. Me siento muy bien. Me siento rápido, fuerte y capaz para hacerlo”.

Dodger está cerrando su segundo campamento de pelea en Jackson-Winkeljohn, rodeado de campeones mundiales y los entrenadores que los han formado; pero para el cierre de la preparación, su hermano Erick “Perry” Montaño—también peleador peso wélter—viajó a Albuquerque para apoyarlo en los últimos detalles.

“Me siento magnífico”, mencionó Dodger sobre tener a su hermano al lado. “Para mí es mi otra mano, y es una fuerza más poderosa. Estoy más contento, más firme, y con una buena base con mis hermanos del equipo también.

Albuquerque se encuentra en el norte de la ecoregión del desierto de Chihuahua, pintada con cerros en sus horizontes, los largo días, y los extremos de la dura caída del sol sobre la ciudad con sus helados inviernos nevados, son contextos en los que Dodger dice haber encontrado un encanto, ahora en este cierre de ciclo.

Así, día a día, Dodger baja del dormitorio, pisa el tatami, sube a la jaula, golpe manoplas, y acepta el reto. Del gimnasio hace un recorrido hacia uno de estos horizontes de la ciudad, busca contemplación en sus sesiones de acondicionamiento, trotando sobre los desérticos cerros y encontrando vistas sobre la ciudad de Albuquerque.

“Ya estoy en la línea para poder pertenecer [en el UFC]. Es la conclusión no sólo de un proceso de este año, si no de diez años atrás. Todas las actitudes, todos los hechos de mi vida corroboran esto; y significa que no sólo lo puedo lograr yo, significa que México puede estar en mis zapatos, al igual que los chicos que me ven. El lapso más importante es éste”.

Dodger tendrá su segunda pelea en los EUA el 31 de mayo del 2014 en la pelea co-estelar de Jackson's MMA Series XII en Pueblo, Colorado.

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Esta entrevista fue publicada originalmente en Fightland, nuestra plataforma sobre la cultura de la pelea. Síguelos en Twitter y búscalos en Facebook.