FYI.

This story is over 5 years old.

Noticias

La muerte de 'Charlie Hebdo'

Hoy murieron valientes e irreverentes periodistas del semanario satírico francés. Hoy murieron, en manos de extremistas islámicos, activistas y militantes por la libertad de expresión que defendieron sus ideales hasta el fin de sus días. Hoy murieron...

Conocí a Charb, el jefe de redacción de Charlie Hebdo, en un evento de Femen en París. Era el año 2013 y el frío rodeaba el Lavoir Moderne Parisien. Tomábamos cerveza con jugo de jengibre mientras platicábamos con la redacción de Charlie Hebdo sobre la importancia del derecho a burlarse de las religiones y de la sátira como crítica política. Recuerdo las risas, la música y los grandes debates de esa noche sobre el islam, el judaísmo y el catolicismo. Luz, otro caricaturista de la redacción, me dibujaba caricaturas narizonas en el cuerpo mientras contaba chistes de todo tipo y se reía aspirando todo el aire posible. Recuerdo que me dolió el estómago ante las bromas críticas y el agudo sentido del humor de ambos caricaturistas. Por alguna razón, siempre tenían los dedos manchados de acuarelas y parecían estar constantemente despeinados.

Publicidad

.

Hoy no hubo nada de eso en la redacción de la publicación satírica francesa. Este miércoles 7 de enero, Charb, con quien reí y debatí el año pasado, está muerto. Fue brutalmente asesinado por tres hombres encapuchados que con armas largas entraron al edificio donde los caricaturistas sostenían una junta editorial. También murieron valientes e irreverentes periodistas como Michel Renaud, Bernard Maris, Tignous, Cabu y Wolinski. Tuve la suerte de conocer a cada uno de ellos. Luz se salvó por un pelo. Muy a su estilo, llegó tarde a la junta editorial. Hoy es su cumpleaños. Un cumpleaños que nunca olvidará.

Tignous, Charb, Wolinski y Cabu. (De izquierda a derecha) Foto vía Le Point.fr.

Charlie Hebdo es una revista semanal de sátira y caricaturas que se fundó en 1969. Acosados por los juicios de difamación en su contra, la editorial desapareció de 1981 a 1992 y reanudó sus publicaciones desde entonces. Se burlaban prácticamente de todo: musulmanes, católicos, judíos o políticos.

Sacerdote, rabino y profeta en portada: "Es necesario cubrir con un velo a

Charlie Hebdo

"

.

Era la crítica por medio de la risa; era la catarsis que provoca el sentido de la burla; era libertad, honestidad, extremo ateísmo y laicidad. Era. Porque el ataque de hoy vaticina el inicio de su muerte. ¿Cómo seguir después de tal atentado? Me duele escribir en pasado. Me duele recordar los encuentros, las charlas y debates. Más de treinta balazos se escucharon en París este 7 de enero a eso de las 11 de la mañana. Fue un ataque planeado, sin duda. El diario Le Monde replicó un video en donde se escucha a los asesinos gritar "Allahu Akbar" (Dios es grande), y "On a vengé le prophète Mohammed! On a tué Charlie Hebdo!" (¡Hemos vengado al profeta Mohammed! ¡Matamos a Charlie Hebdo!)

Publicidad

[daily_motion src='//www.dailymotion.com/embed/video/x2e6xny' width='480' height='270']

El presidente francés, François Hollande, lo calificó como un acto terrorista. No es el primero y no será el último. Si bien critican a judíos y católicos por igual, son los dibujos del profeta musulmán Mahoma los que más generan controversia. En 2006 fueron amenazados por primera vez después de replicar los dibujos que el diario danés Jyllands-Posten hizo sobre Mahoma.

Edición de 2005 del diario holandés

Jyllands-Posten.

En 2011, Luz dibujó al profeta de nuevo para una edición que fue renombrada "Charia Hebdo", haciendo referencia a la Sharia, o leyes del islam, y trataba a Mahoma como invitado editorial para comentar el contenido del periódico en cada página. Dos días después de dicha publicación, las oficinas de Charlie Hebdo fueron bombardeadas.

Charia Hebdo. "100 latigazos si no están muertos de risa".

En 2012, una genial portada criticaba el carácter de "intocables" de judíos y musulmanes. Tienen razón, ¡es imposible criticarlos! Al que critica al judaísmo se le tacha de antisemita, y las críticas a musulmanes se califican instantáneamente como islamofóbicas. Pero las ideas no tienen raza y las religiones no son nada más que un discurso.

La clase política francesa los tachó de irresponsables después de esta portada. El debate mundial se centraba en la película Innocence of the Muslims, y aparentemente no era buen momento para burlarse.

Publicidad

Portada: Los intocables. "No se pueden burlar"

.

Charb estaba en los top 10 más buscados por Al-Qaeda. Siempre traía guaruras consigo. En cada borrachera y cada debate, eran como parte del equipo. Uno de ellos murió intentando protegerlo.

"Para mí la dignidad es no atacar aquello que la persona no eligió ser. Nosotros nos burlamos de la gente que toma una decisión. Las religiones así son, se nace de una manera, pero se puede elegir ser o dejar de serlo —excepto tal vez por los judíos por ser un tema de sangre—. A partir del momento donde existe una elección, entra la posibilidad de crítica", me dijo Charb, el jefe de redacción de Charlie Hebdo, en una entrevista que le hice en 2013.

Los caricaturistas de Charlie Hebdo murieron por virtud de un dios imaginario y metafísico que dicta reglas y legitima castigos. Sus portadas y trabajos son una verdadera herejía para la rama sunni dentro del islam, en la que cualquier representación del profeta está terminantemente prohibida. Más aún, en el fundamentalismo salafista —una de las áreas más radicales del islam que se adhiere a las tradiciones impuestas en la Arabia del siglo VII— se castiga con la muerte a estos herejes. Ahí parece estar la justificación.

Portada: Crítica en contra de la homofobia, el Cardenal Vingt-Trois tiene tres papás. "Padre, hijo y espíritu santo"

.

Es importante aclarar que el ataque NO es culpa de TODOS los musulmanes. Tanto la Liga Árabe (organización que agrupa a los Estados árabes del Medio Oriente y el Magreb) como Al-Azhar (una de las escuelas más prestigiosas para aprender el islam en el mundo) condenaron los ataques al periódico satírico. Debemos distinguir a las personas musulmanes y al islam como religión misma. Y por otra parte y de manera muy contundente, a quienes predican el fanatismo dentro de este último.

Publicidad

Culpar a todos los musulmanes es el equivalente a pensar que un solo acto de violencia en las marchas, hace que todo el que proteste sea violento.

As a Muslim, killing innocent people in the name of Islam is much, much more offensive to me than any cartoon can ever be. — Iyad El-Baghdadi (@iyad_elbaghdadi)enero 7, 2015

Por otro lado, decir que los caricaturistas provocaron su propia muerte es un acto no sólo insensible, sino ignorante. Hasta en la filosofía básica del ojo-por-ojo, fuera de la justicia estatal, es ridículo pensar que caricaturas y dibujos se equiparan con las AK-47 que los terroristas utilizaron para asesinarlos.

Este miércoles el mundo perdió a unos grandes críticos. Perdimos a una revista que entendía que el mejor cuestionamiento era tan visceral como la risa. Eran una editorial a favor de la democracia, la ecología, la defensa animal, la igualdad y sobre todo, la laicidad. Burlarse de la religión y blasfemar contra sus profetas era su manera de reivindicar las libertades en una democracia. En Francia y el mundo, perdimos sus dibujos. Charlie Hebdo ha muerto y me duele escribirlo.

El último dibujo de Charb es una premonición escalofriante.

.

Casi de manera inmediata nació el #JeSuisCharlie en redes sociales. Y sí, todos somos Charlie, porque actos así siembran miedo para seguir criticando. Todos somos Charlie en un mundo donde los periodistas son asesinados por distintos núcleos de poder. Todos somos Charlie porque hoy es un día de luto para la libertad de expresión.

Publicidad

El periódico New York Daily News censura la caricatura de Mohammed que Charb sostenía después del atentado de 2011. Seguramente no querían problemas. Un precedente tristísimo para la libertad de expresión.

Yo soy Charlie, porque recuerdo las manos de sus caricaturistas llenas de risas y acuarelas. Recuerdo su redacción, llena de policías y guaruras pero siempre con un ambiente inteligentemente festivo.

Cuando platiqué con ellos, Luz me regaló el ejemplar que se publicó una semana después de la portada de "los intocables". En la primera plana se leía la frase: "Periódico responsable". El resto de las páginas estaban tristemente vacías. Recuadros en blanco firmados por todos sus caricaturistas. "Por esencia, la sátira ofende", me dijo Luz, "si nos preocupamos por ofender los sentimientos de personas abstractas, jamás publicaríamos nada. De eso se trata esta edición. Desde entonces cada hebdomaire tiene la leyenda de 'periódico irresponsable': la responsabilidad es autocensura."

"Periódico responsable. ¿Podemos reír de todo?"

En la segunda página de este número Charb escribió, a manera de sarcasmo, una carta explicatoria a dicha edición con páginas en blanco:

"La ventaja de este nuevo estilo de Charlie Hebdo, es que nunca más nos separaremos del pensamiento correcto. Semana por semana, nos encargaremos de someter nuestros dibujos a un comité de censura presidido por los dirigentes de la Unión de Organizaciones Islámicas en Francia, el Consejo Representativo de Instituciones Judías de Francia y los representantes del papa. La ventaja, es que este nuevo Charlie permitirá que sus caricaturistas vivan una vida normal, sin amenazas ni críticas de sus compatriotas expertos en geopolítica y sociología de los ghettos…"

Hoy esa edición se vuelve realidad. Murió Charlie Hebdo y la libertad murió con ellos. De ahora en adelante, la ultraderecha francesa encontrará bases legitimas para perseguir el terrorismo a expensas de la diversidad de expresiones y la vida privada de los ciudadanos.

Ha muerto la crítica. Ha muerto la sátira. Murieron Charb, Michel Renaud, Bernard Maris, Tignous, Cabu y Wolinski.

Hoy es día de luto mundial.