Los Michael Jackson en miniatura de México DF

Sinceramente, este año no he sentido el espíritu de Halloween. Sin embargo, hoy he llegado a la oficina y encima de la mesa había un sobre que contenía un pequeño libro de fotografías de Will Sanders, y que se titulaba Halloween. Dicho libro contenía un montón de fotos de niños de México DF disfrazados de Michael Jackson. Si había algo que pudiese hacerme recobrar el espíritu del Día de los Muertos era un puñado de críos mexicanos disfrazados del hombre más terrorífico del mundo.

Parece ser que Will ha ganado un montón de premios por estas fotografías, que se han expuesto en todo el mundo y han salido en cantidad de revistas, pero yo quería saber más sobre estas fotografías. Por tanto, llamé a Will y le pregunté algunas cosillas.

VICE: Bien, Will, ¿dónde encontraste a todos estos Michael Jackson en miniatura?

Will Sanders:Me encanta Halloween, y estaba en México DF. Por todas partes había gente disfrazada de Michael Jackson. Fue realmente raro. No he vuelto a México desde entonces, así que no sé si sigue de moda. Supongo que solo fue porque fue el año en que murió.

Tiene sentido. ¿Pero toda la ciudad disfrazada de Michael Jackson? Eso sí es devoción.

Bueno, también había muchos niños disfrazados de otras cosas, como monstruos y vampiros y todo eso, pero un porcentaje muy alto de críos iba disfrazado de Michael Jackson. ¿Y sabes el rollo ese del truco o trato? Pues hasta las chocolatinas que les daba la gente eran caras de Michael Jackson. Eso sí que molaba.

No es la primera vez que tomas fotos de Halloween. ¿Qué es lo que te atrae de esa fiesta?

No lo sé. Me encanta el imaginario de Halloween, y el otoño (los colores son geniales), así que no sé, simplemente me gusta. Es una pena que solo sea una vez al año.

Parece que en México es un día importante.

Ya lo creo. Aquí no lo celebramos como es debido, ¿no? Tenemos las calabazas y todo eso, pero en México ponen calaveras por todas partes, todo el mundo se disfraza e incluso tienen el pan de los muertos, que es pan relleno de un montón de cosas. Parecía que el tradicional día de los muertos se estaba desvaneciendo y el Halloween americanizado estaba tomando el poder, lo cual es un poco triste.

¿Cómo era el ambiente?

Era un poco raro, porque el año en que estuve allí todo el mundo estaba preocupado por la gripe aviar, así que la plaza principal, donde suele reunirse la gente, estaba completamente vacía. He estado ahí varias veces y nunca la había visto tan desierta. Siempre está llena de puestos en los que venden las típicas flores naranja que hacen especialmente para el Día de los Muertos. Fue muy raro no ver a nadie. Normalmente el ambiente es genial, pero ese año era un poco fantasmagórico.

¿Qué te ha hecho volver a México tantas veces en Halloween?

Me gusta la tradición que tienen ahí. Es una celebración, es un día muy positivo, y toda la historia visual del acontecimiento es genial. Si pasas por cualquier cementerio en México por esas fechas, todas las tumbas tienen pequeñas fotos enmarcadas y cosas a su alrededor. Es bastante dulce, ¿no crees?

Sí, es bonito. ¿Tienes planeado ir a algún otro lugar en la época de Halloween para encontrar otras rarezas?

No he vuelto desde entonces, me quería concentrar en otras cosas, pero con lo del libro me han entrado ganas de volver. No solo por las fotos, sino porque estar ahí en esta época del año es realmente agradable. Es un sitio especial.

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