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18+

Hablamos con la reina del hairy porn feminista

Nikki Silver es la autora más famosa del porno "peludo".

Todas las fotografías cortesía de Nikki Silver/Naughty Naturals

Nikki Silver, conocida en los círculos de porno feminista por ser la más destacada cineasta de hairy porn (o porno "peludo"), está agradablemente instalada en su despacho de San Francisco. La luz matinal se cuela a través de las vaporosas cortinas, fragmentando la habitación y haciendo que Nikki parezca como surgida de un sueño. Yo estoy en Toronto, pero los dos fumamos maría con pipa a la vez a través de Skype, y la pornógrafa feminista me explica la obra de su vida a través de ese portal mágico.

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VICE: Así que se suponía que debías venir a Toronto en primavera para los Feminist Porn Awards (Premios de la industria del porno feminista) pero no te dejaron entran en Canadá. ¿Qué pasó?
Nikki Silver: Hace cinco años intenté ir a la Columbia Británica, pero llevaba la bolsita de hierba más pequeña que te puedas imaginar y olvidé que estaba en mi bolsa. Mis amigos y yo realmente les parecimos sospechosos, porque simplemente estábamos de viaje y no teníamos ningún plan, así que rebuscaron en todo mi equipaje y la encontraron. No me arrestaron, pero sí me detuvieron, así que cuando volví a intentar cruzar la frontera, el asunto apareció inmediatamente. Me dijeron, "¿alguna vez has tenido problemas para entrar en Canadá?", así que yo les dije que no y después fue como "¡Nos has mentido!". También tengo algunos cargos por delitos menores como robo, participación en manifestaciones y cosas así. Pero se interesaron por uno: que una vez robé un libro.

Te pido perdón en nombre de mi país. ¡Ojalá te hubieran dejado entrar! Pero háblame un poco acerca de tu filosofía y de tu sitio web sobre hairy porn , Naughty Natural.

Bueno, ahora tengo 27 años y más o menos desde que tenía 18 llevo haciendo de modelo en fotos para adultos o trabajando en cosas relacionadas con ese ámbito, como hacer de escort y cosas así. Nunca me ha gustado depilarme, así que empecé a buscar curros para los que no tuviera que hacerlo. Al principio tuve problemas con las grandes compañías. Me sentía menospreciada. Así que empecé a buscar sitios web amateurs y a producir cosas con mi pareja de entonces y con amigos y demás. Simplemente rodar a gente follando, cualquier cosa que pudiera.

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En aquel momento, mi estilo de vida era bastante provisional. Básicamente dirigía un estudio de producción de porno desde mi coche. Era como la dama viajera del porno… Fue bastante divertido. Y trabajaba con comunidades de queers radicales y con personas que no querían un trabajo convencional. De modo que siempre estábamos sin blanca, desde luego no era una cosa que se pagara excesivamente bien. Pero la cosa empezó a mejorar. Unos cuantos amigos se mudaron fuera de San Francisco y yo pensé "Oh, suena bien, nunca he salido de aquí". Así que me mudé allí y las cosas empezaron a despegar.

Háblame acerca de algunos de tus proyectos más recientes.

He estado grabando un montón de escenas de sexo poco convencional con otras modelos femeninas y yo era la estrella. Ha sido muy divertido y representa con más exactitud mi sexualidad que otras grabaciones más "suaves" que he hecho en el pasado. [En una grabación reciente] hacemos un hechizo para conseguir más vello corporal y así poder llevar poca ropa en invierno. Pero como parte del hechizo, necesitamos orgasmos. Así que yo ato a la modelo y la hago correrse en una variedad de posturas diferentes y finalmente la pongo en una silla con correas y un agujero para un Hitachi magic wand , se corre y terminamos el hechizo. También hice hace poco una sesión de chico-chica con mi pareja en la vida real, usando algo de bondage.

Muy bien. Entonces, ¿qué fue lo que hizo que dejaras el porno más mainstream y empezaras a producir tus propias películas?
[Con uno de los sitios web más importantes], el fotógrafo tocó a mi amiga de forma no consentida durante la sesión de fotos. Ella me lo contó más tarde, así que hicimos correr la voz para advertir a otras personas que fueran a hacerse fotos con ese tío. Le dije a mi amiga que debería hablar con la compañía para que le despidieran, ¿sabes? Y lo hizo. Y ellos empezaron a decir "No hemos visto nada malo", o "No hemos podido encontrar el vídeo" y cosas así. Sabían que yo era amiga de esta persona, así que decidieron que yo era la feminazi del hairy porn y que había que odiarme.

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Yo pensaba, "sois unos misóginos y eso es algo que no me interesa". Así que me mudé a San Francisco, justo cuando todo este rollo de porno diferente empezó a tener mucho éxito, y una de las cosas que más éxito estaban teniendo eran las chicas peludas, que es lo que soy yo.

He visto algunos de tus trabajos y puedo percibir mucha intimidad en las sesiones, como si hubiera una conexión auténtica. ¿Cómo consigues crear ese ambiente?
Esa es la parte más difícil. Intento grabar con parejas o amigos que tengan algún tipo de dinámica sexual. Quizá no tienen una relación sexual al uso, pero sí que han practicado el sexo. Es divertido unir a dos personas que se sienten físicamente atraídas y ver qué sucede. Todos nos sentamos antes, tomamos un té y yo les pregunto "¿qué os apetece hacer hoy, chicos?". También hay otras cosas, como la comunicación y crear un entorno agradable. Lo normal es que esté solo yo, masturbándome yo sola o grabando una escena con otra chica. Y si tiene que haber alguien más, intento asegurarme de que sea alguien con quien los actores se sientan muy cómodos. Intento que sean mujeres o transexuales, y solamente alguien que no vaya a perturbar el ambiente de comodidad.

¿Cómo está el mercado para el hairy porn ?
He llegado a varias conclusiones. Existen distintos tipos de consumidores de hairy porn. Con frecuencia son gente mayor, de modo que la primera imagen que tienen del sexo o sus primeras experiencias sexuales fueron con mujeres sin depilar. Quizá no las axilas o las piernas, sino más bien el bosque completo. Es como si pensaran "la primera vez que estuve con una mujer había un bosque ahí abajo, así que mi cerebro animal se conecta con eso". Y también puede ser una subcultura como los burners, ¿sabes a lo que me refiero? ¿Burning Man? Ah, sí, unos hippies.

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Foto por Quinn Cassidy

¿Por qué crees que la industria del porno mainstream sigue tan obsesionada con dar forma y eliminar de forma mecánica y casi quirúrgica el vello corporal femenino?
En términos de por qué la sociedad dominante y el porno tienden a la depilación total, creo que es producto de varios factores. No quiero lanzar mierda necesariamente sobre la industria del porno mainstream, pero es una industria capitalista como cualquier otra y está obsesionada con la juventud, ¿sabes? Creo que la depilación empezó quizá por varios motivos. Yo lo entiendo en cierto modo. Tienes que empujar a través del pelo, apartarlo de en medio… Todo parece más grande, los labios también parecen más grandes. Pero tener pelo es sinónimo de ser sexualmente maduro y de, bueno, de ser una mujer adulta. O una persona, en realidad.

Algunas mujeres a las que realmente les va arreglarse, con sus uñas y su maquillaje, y que llevan el cuerpo completamente depilado por todas partes, se molestarán si se emplea el término "natural" para referirse a las mujeres con vello, como si se insinuara que ellas no son naturales. ¿Qué les dirías tú?
Intento no ser lo que podría llamarse una supremacista del vello corporal. No quiero criticar a nadie por depilarse o por hacer cualquiera de esas cosas, porque creo que realmente es un gusto personal. Lo que me molesta a mí es la homogeneización cultural. No digo que no seas natural si no te depilas, pero es más natural no depilarse. Seamos sinceros. Y luego está la gente que tienen que hacerlo [depilarse] para que les contraten. Así que quizá les guste de verdad hasta cierto punto, pero sinceramente, no hay mucho trabajo para las modelos que no se depilan. Por eso mucha gente trabaja de scort, mucha gente se dedica a las webcams, mucha gente hace cosas diferentes y adicionales. Yo me he dado cuenta de que, si te haces productor, básicamente incrementas la longevidad de tu carrera.

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Tienes una mente intensamente centrada en los negocios.
Bueno, para empezar soy una judía de Nueva York. Y para seguir, mis padres tienen un pequeño negocio. Llegaban a casa y decían "hoy hemos ganado este dinero, y así es como lo hemos conseguido". Básicamente tenían reuniones de negocios durante la cena. Así que lo tengo algo así como grabado a fuego en la mente. Incluso cuando apenas tenía trabajo, seguía ahorrando dinero. Y disfruto mucho apoyando a otra gente, veo potencial por todas partes.

Cuando estoy en un rodaje, les digo "puedes promocionarte así, o hacer esto otro". Podría decir que he sido la Mommy Ho de mucha gente. He sido su mentora para que llegaran a trabajar en la industria del sexo. Lo hago a través del porno y mostrándoles cómo hacer las cosas de forma más segura y cómoda. La gente puede maximizar su potencial para obtener beneficios de muchas formas diferentes, y a mí me encanta ayudar a la gente a conseguirlo. Y hacerlo yo misma, por supuesto.

A pesar de haber trabajado con tanta peña queer, no etiquetas tu trabajo como porno queer.
Sí, depende de cómo lo definas. Esta es la escena de porno queer independiente más grande del mundo, creo yo. La mayoría de este tipo de porno se produce aquí. Así que el significado no es solo que los actores sean queer o que el productor lo sea, sino que toda la filosofía del proyecto y la filmación también es queer. El porno queer es como que cualquiera puede grabar con cualquiera, haciendo lo que sea. Y eso no es lo que hago yo. Mi sitio web es muy particular.

Ya. Me he dado cuenta que las chicas que grabas son convencionalmente bellas en un sentido occidental. Son delgadas, con tetas grandes… ¿Eso forma parte de lo que dices?
Así es. Cuando dejé de grabar con los grandes mega sitios, pensé "no voy a ganar dinero en esto si no grabo lo que sé grabar y lo que sé vender". Me gusta la diversidad hasta cierto punto, pero [mi sitio web] es todavía bastante limitado en comparación a lo que podría llamarse diversidad en un sentido más amplio. La gente que rueda porno queer van del rollo "grabaríamos a cualquiera". Literalmente.

Da igual lo gordo que estés o lo delgado, lo viejo o lo joven que seas, si llevas todo el cuerpo tatuado o no, ¿sabes? Y lo encuentro genial, lo apoyo al 100 %, pero yo no sé cómo hacerlo y venderlo bien.

¿Cuál es tu próximo proyecto?
Tengo pensado trabajar en un proyecto en primavera que se basará en una película porno de los años setenta (no quiero desvelar demasiado) y en él aparezco yo como una bruja bisexual adicta al opio que adora lamer coños y acariciar a su gato.

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