Archivo Vice: Pronto en un amotinamiento cerca de ti

Mostramos el funcionamiento y las heridas que causan algunos de los métodos antimotines. Agradecemos la cortesía de la policía mundial que ha atacado a nuestros manifestantes expertos, por ponernos al último grito de la moda en cuanto a represión se refiere.

GAS LACRIMÓGENO

Gas lacrimógeno en los campos de olivos, un espectáculo poético en el pueblo palestino de Bil'in.

¿Qué rayos me hace? 
La médula de todo arsenal antimotín que se respete (además del inglés, por ahora), el gas lacrimógeno hace exactamente lo que dice en la lata: te hace llorar como a un bebé y no te deja respirar, al punto que crees que vas a morir. Así es como lo usan en Oakland. Aunque se anuncia como no letal, Sarit Michaeli, vocera del grupo de derechos humanos israelí, B'Tselem, asegura lo contrario: "El gas lacrimógeno en sí es considerado por muchos como no letal cuando se usa adecuadamente. Sin embargo, los individuos vulnerables, como ancianos, niños y personas con problemas respiratorios, pueden salir heridos o incluso morir”.

Aunque inhalar el gas puede ser peligroso, Sarit explica que “el principal peligro es la lata en la que viene, la cual es utilizada rutinariamente por las Fuerzas de Defensa de Israel (en particular las latas de aluminio de 40mm) como misil”.

Esto resulta en escenas como la que se ve en el siguiente video, donde el palestino Bassem Abu Rahmah perdió la vida cuando un soldado le disparo al pecho a corta distancia. Así que no sólo correrás por las calles de Londres llorando y moqueando; si la policía enloquece, también tendrás que esquivar misiles al rojo vivo.

¿Cuál es la mejor forma de lidiar con él?
"El gas lacrimógeno convence a tu cuerpo de que no puedes respirar”, explica Sarit, “así que lo mejor que puedes hacer es inhalar perfume, alcohol o incluso oler una cebolla, para engañar a tu cuerpo de nuevo y que empiece a respirar normal. Con frecuencia puedes ver a los palestinos caminando con cebollas, y rociando perfume en el aire. O simplemente compra una máscara de gas. Algo que vale la pena mencionar es que nunca debes lavar tu cara con agua, ya que esto exacerba el efecto del gas, y lo hace peor. Mantente fuera de la mira de los soldados para que no puedan golpearte con las latas, cúbrete cuando sea necesario y, si puedes, usa equipo protector”.

CAÑÓN DE AGUA Un manifestante alemán perdió un ojo por un cañón de agua durante una manifestación en 2010. 

¿Qué rayos me va a hacer?
Inventado en Alemania en los treinta, el cañón de agua es considerado una de las armas más seguras para controlar motines. Hablamos con el anarquista veterano alemán, Ninjo, sobre las muchas veces que ha sido golpeado en la cara. “La primera vez fue el 1 de mayo de 2008 en Hamburgo. Fui a una manifestación anti neonazi y la policía perdió el control, así que llamaron a los cañones. Cuando el agua golpea el suelo suena como un fuerte latigazo, y cuando lo escuché, supe que estábamos en problemas. Me dieron en la espalda, tenía toda la espalda azul con un moretón y podías ver sangre corriendo bajo mi piel. Parecía sangre roja en una ventana, o algo así”.

Esa vez, Ninjo fue víctima del modelo más viejo y brutal, el Wawe 9, pero ahora la policía alemana cuenta con el Wawe 10. Es menos doloroso, pero la policía no suele hacer las cosas más fáciles: “Le ponen gas pimienta al agua y la cosa se pone realmente fea. Cuando te dan, tu ropa queda empapada con esto y arde muchísimo. Lo mejor que puedes hacer es quitarte la ropa y darte una baño frío de varias horas, porque el agua caliente abre los poros y el gas entra todavía más. Tienes que lavar tu ropa tres o cuatro veces antes de volverla a usar”.

¿Cuál es la mejor forma de lidiar con él?
Cuando le pregunté si había alguna forma de luchar contra los cañones de agua, Ninjo no parecía tener muchas esperanzas. “Desde Mainzer Straße en 1990, la policía tiene una prueba para los cañones de agua. Parte de esta prueba involucra arrojar una lámina de concreto desde un cuarto piso sobre uno de los vehículos. No puedes hacerle nada a esa cosa. Tiene tres cañones, incluyendo uno en la parte de atrás, y creo que hay nueves personas adentro controlándola. El chorro es del grueso de un balón de futbol y es suficientemente poderoso para romper tus costillas. El nuevo modelo también puede disparar a la izquierda y a la derecha al mismo tiempo, lo que resulta en una enorme pared de agua que protege a unos 200 policías.

“Había una foto interesante de las manifestaciones en Mainzer Straße. Arrojaron una lavadora llena de concreto sobre uno de los cañones y rompieron el tanque de agua”.

Así que ahí lo tienen, cuando salgan a comprar cebollas y Brut barato para lidiar con el gas lacrimógeno, asegúrense de comprar también una lavadora llena de concreto.

BALAS DE GOMA Bala de goma y pistola (las balas de goma también pueden ser utilizadas con rifle y escopeta)

¿Qué rayos me va a hacer?
Hay reportes de estos en Oakland durante las protestas de Occupy el año pasado. Se describen como “menos letales”, pero una vez más, eso no quiere decir que no hayan matado o lisiado gente.

“Llamarlas balas de goma es ridículo”, dice Sarit. “No están hechas de goma, son metales cubiertos de goma o plástico. Si estás suficientemente lejos la bala no te penetrará, pero hay veces en las que el núcleo metálico puede atravesar tu ropa y tu piel. Es un dolo muy severo y después te sale un moretón con una costa enorme; te puede romper un hueso. En una ocasión, un manifestante israelí, Limor Goldstein, fue golpeado en la cabeza y la bala penetró su cráneo”.

Como Waleed, un manifestante egipcio, aprendió durante los amotinamientos de febrero: “Yo y otros tres güeyes logramos robarnos unos escudos de la policía antimotines, e hicimos una barricada mientras los otros manifestantes se escondían detrás, arrojando piedras a la policía. Después de una hora, uno de los soldados se escabulló hasta un callejón aledaño con una escopeta y comenzó a disparar. A mí me dieron en un costado y comencé a sangrar mucho. Las balas paralizaron mi costado izquierdo; apenas podía caminar. En el hospital, los doctores me dijeron que me sacaron 18 perdigones del cuerpo. Todavía tengo uno adentro”.

¿Cuál es la mejor forma de lidiar con él?
Para protegerse, Waleed y sus amigos usan equipo protector: lentes, cascos, botas de seguridad y máscaras de gas, dos pares de jeans y chalecos de taekwondo. “La distancia mortal es de diez metros, así que asegúrate de estar lo más lejos posible. Mi amigo Basim perdió un ojo en la batalla de la calle Mohammed Mahmoud".

ACEITE DE ZORRILLO

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¿Qué rayos me va a hacer?
Completamente no letal, el aceite de zorrillo se dispara con un cañón de agua desde un vehículo y es muy efectivo para dispersar a las multitudes. Es muy usado por las FDI y algunos dicen que es más temido que el gas lacrimógeno. “Después de ser bañado en zorrillo vas a desear que sea gas lacrimógeno. El gas lacrimógeno dura como cinco minutos, pero la peste se queda contigo”, explica Sairt. “El olor a zorrillo es el más asqueroso que hay. Los palestinos la llaman ‘agua de mierda’. Según la policía israelí, quien lo desarrolló, es una especie de compuesto orgánico hecho de levadura y proteína. Es tan desagradable que te dan ganas de vomitar, pero no he escuchado de alguien que haya salido herido o que haya muerto”.

¿Cuál es la mejor forma de lidiar con él?
"Si no está diluido tarda un par de lavadas en salir de tu ropa y varios baños para deshacerte del olor. Si eso no ayuda, hay quienes dicen que nadar en el mar ayuda a eliminar el olor mucho más rápido. Pero el olor se puede quedar contigo durante semanas o meses, ¡no puedes escapar!”

@henry_langston