Seguimos comprando espejos a los españoles

325 mil millones de euros es lo que se estima como retorno de inversión al fichaje de sólo un año de Javier “Chicharito” Hernández en el Real Madrid, el club más rico y popular del mundo. Lo mismo con la contratación de la sensación colombiana James Rodríguez con un retorno de inversión por 700 millones de euros.

Florentino Pérez, el segunda vez presidente del Real Madrid y dueño de ACS (Actividades de Construcción y Servicios), una de las empresas más grandes e importantes de construcción de España y el mundo. Desde su primer periodo como presidente del club, llevó al equipo blanco a la cima, rompiendo records en contrataciones y creando el equipo “Galáctico”, una constelación de estrellas en el campo ganando lo suficiente para pagar deudas externas de países pobres. En su segundo periodo volvió con la cartera desenvainada y volvió a romper sus propios records de contrataciones, logrando de nuevo un equipo plagado de estrellas.

Todo comenzó en el año 2000 en el Parque de Valdebebas al norte de Madrid. Las influencias políticas de Florentino y el carisma de presidente del Madrid lograron recalificar los terrenos para la construcción inmediata de una urbanización que incluía cuatro rascacielos y la ciudad deportiva del Real Madrid. Una recalificación que 14 años después sigue en problemas legales, ya que el parque estaba protegido por leyes ambientalistas y ecologistas y se cambió la zonificación para uso mixto.

El parque de Valdebebas incluye la ciudad deportiva Real Madrid y aún falta la construcción del parque de atracciones Real Madrid, además del estadio de baloncesto.

La coincidencia es que la empresa ACS se llevó 500 millones de euros en ganancia proyectada en esa recalificación obscura y que es calificada ilegal hasta el día de hoy. Pero esa ganancia logró que el Real Madrid saneara todas las deudas y se formara el primer equipo galáctico, con jugadores como Figo, Beckham, Owen, Ronaldo y Robinho. Pero la contratación que detonó la bomba fue la de Zinedine Zidane por 73 millones de euros. Para el año 2001 era algo que no había pasado y sin duda fue una noticia a nivel mundial.

ACS y Florentino Pérez aprovecharon el boom de bienes raíces de principios del 2000 y lograron que la empresa creciera más allá de las fronteras españolas, especialmente en América Latina. Florentino dejó de ser presidente en el 2006 y se dedicó a seguir colonizando América con su empresa.

Para el 2009, en plena crisis inmobiliaria en España, Florentino vuelve a ser presidente del Real Madrid siendo el único candidato, nadie más pudo dar el bono de 54 millones de euros necesarios para la candidatura. Para ese época, ACS había diversificado tanto que aún con la “crisis del ladrillo” podía financiar la candidatura y también los grandes contratos que se dieron. Kaká, Cristiano Ronaldo, Xabi Alonso, Mourinho, Ozil y Di Maria fueron sus elegidos. El Real Madrid resumía el despilfarro de dinero y caprichos de la clase política y empresarial española en una de las crisis económicas más fuertes y que más golpeaban a la clase media en las últimas décadas.

Para después del mundial de Brasil el Real Madrid tenía que seguir con la línea de contratar el mejor talento y al mayor precio posible, pero no sin antes hacerlo con el retorno de inversión correspondiente. Para Florentino, el Real Madrid es sólo una herramienta de relaciones públicas y atención a sus verdaderos clientes. Cada domingo los palcos del Santiago Bernabéu están repletos de políticos y empresarios con quien firmará contratos millonarios de construcción alrededor del mundo.

Mientras la contratación del colombiano James Rodríguez se daba por 80 millones de euros, una cifra que muchos consideraban muy por encima del valor real del jugador, Florentino y ACS cerraban el contrato de construcción de la autopista “Conexión Pacífico 1” en Colombia, con ganancias de 500 millones de euros. El retorno de la inversión de James no se daba por camisetas, publicidad o entradas vendidas, si no por el contrato de construcción logrado en Colombia.

Un par de meses después, el Real Madrid trae a préstamo del Manchester United por un año al Chicharito, desembolsando dos millones de euros, pero con el mismo tipo de retorno de James, sólo que por 325 mil millones de euros, ¡eso sí es negocio! La casualidad que Florentino haya visitado México cinco días después de la presentación de Chicharo es solamente para adjudicarse una variedad de contratos millonarios con Pemex en construcción y servicios.  

La proyección de México y el orgullo falso de nuestros políticos de tener a un jugador mexicano en el Real Madrid es suficiente para caer de rodillas ante el magnate español. Seguimos comprando espejitos.

@pazcabrales