Ushuaia, el refugio más austral del mundo

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Ushuaia, el refugio más austral del mundo

La fotógrafa argentina Luján Agusti nos habla de la ambivalencia de esta ciudad de la Patagonia y de sus nuevos proyectos en México.

La joven fotógrafa argentina Luján Agusti llegó a la redacción de VICE México al igual que muchos de nuestros mejores colaboradores: por suerte para nosotros. El fotógrafo venezolano, Luis Cobelo nos presentó en una fiesta de la revista. En cuanto vi sus fotos me enamoré de su trabajo: una serie de imágenes de un entorno que parecía muy hostil, pero de una familiaridad y calidez que extrañamente te acercan a los lugares y personas fotografiados.

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A diferencia de muchos fotógrafos documentales que se esfuerzan por entender el mundo de afuera y mostrar las dificultades y virtudes de la vida del otro, las imágenes de Luján conducen a un entendimiento propio.

Cuando habla de su madre, quien murió cuando Luján era muy joven, la describe como una mujer muy bonita. La fotógrafa no se da cuenta de que, conforme me va nombrando las características de su mamá, éstas la describen a sí misma, al menos físicamente.

Esta búsqueda la ha llevado a Ushuaia, la ciudad más austral del mundo, en el sur de Argentina, y donde tiene vínculos familiares y de infancia. Estas fotos forman parte del Especial de Fotografía de este año y de la exposición homónima que todavía puedes visitar en la Galería FIFTY24MX (Colima 184, Col. Roma Norte), ciudad de México, de martes a sábado de 1 a 8 pm y domingo de 1 a 6 pm. La entrada es gratis.

Platicamos un poco con ella sobre este proyecto y otros que están en desarrollo.

"El proyecto empezó a finales de 2012 durante uno de mis viajes que hice a Tierra del Fuego", afirma pacientemente luego de que yo perdiera el audio de la primera entrevista que le hice. A su papá lo mandaban por trabajo cuando ella y sus dos hermanas eran pequeñas e iban a visitarlo, más a delante fue a vivir su hermana para allá y empezó a ir más seguido a visitarla.

Dice que lo que más le atrae de este lugar es "su dualidad; Ushuaia es un sitio muy turístico; la gente va a esquiar y a visitar el Faro del fin del mundo… pero cuando la temporada se termina hay una soledad que no se corresponde con la faceta turística por lo que es más conocida. El clima es muy hostil lo que hace que la gente que vive allí tenga una vida muy hacia adentro".

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"Se trata de una zona no propicia para vivir, inicialmente se encontraba la cárcel más importante del país, ya que las posibilidades de escapar y salir con vida eran casi nulas. Dadas estas condiciones, actualmente los sueldos son muy elevados en relación con el resto del país, lo que genera que mucha gente vaya con expectativas de pasar una temporada y poder ahorrar, pero la vida allí es muy cara también. Suelen comprar cosas que luego podrán llevarse a su casa, como autos o electrodomésticos. Esto provoca que la gente quede como atrapada, generando una dinámica social muy particular".

Cuando le pregunté por algún personaje con el que se haya identificado más, sin pensarlo dos veces dijo que Bismark (que aparece aquí abajo), quien tiene unos 35 años y es guía de montaña. "Lo conocí y quería hacerle un retrato, estaba pasando un momento particular de su vida pero igual se ofreció a ayudarme y entendió enseguida de qué quería hablar; su foto dice mucho para mí".

En cuanto al impacto que tuvo la Guerra de las Malvinas en Ushuaia y en toda la Patagonia fue muy grande ya que por cuestiones gráficas está más cerca de las islas y las ciudades costeras eran puertos de provisión de armas y alimentos. En ese entonces, la familia de Luján vivía en Puerto Madryn, donde ella nació.

"Viviría [en Ushuaia] más de grande. Para mí Ushuaia es como una especie de refugio, me gustaría vivir allá pero más adelante", y agrega que "No hay mucha vida cultural…pero por otro lado es de los pocos lugares que quedan donde todavía puedes dejar la puerta abierta…"

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Luján pasó tres meses en Ushuaia para acompañar a su hermana cuando ésta tuvo a su primera hija. Lo que más le gusta de este lugar, es que se trata de la única ciudad argentina a la que se accede cruzando la cordillera de los Andes. "El vínculo con la naturaleza allí es muy especial, tenés esa sensación de que estás dando un paso en un lugar donde nunca nadie antes lo ha hecho".

Cuando le dije que a mí Ushuaia me parecía más bien un sitio triste, ella respondió: "Para mucha gente la ciudad no es así, pero eso tiene que ver con como veo yo las cosas".

Hace un par de meses se vino a vivir a la ciudad de México. Un contraste radical si consideramos que es un sitio con decenas de millones de personas y una vida nocturna mucho más perene que sus ríos y parques. Este cambio la ha estimulado para trabajar con otros temas, aunque al final, las historias que le interesan están vinculadas con la identidad.

"Me interesa trabajar sobre historias que me ayudan a construir mi propia identidad a través del otro. Quién soy yo, qué creo. Con cada trabajo que realizo voy entendiéndome y conociéndome un poco más a mí. Mi proyecto de Ushuaia comenzó con la idea de hablar del lugar, pero creo que inevitablemente terminé hablando de mí, de como veo yo las cosas".

Uno de sus trabajo actuales es sobre las diferentes creencias en México, como el vínculo intenso con la tierra, y con la muerte. "Actualmente, también estoy trabajando en un libro sobre un proyecto que realicé sobre mi mamá".

Sigue a la autora en Twitter:

@misslexia