Acusan de intento de homicidio a futbolista que pateó a árbitro

Artículo publicado originalmente por VICE en inglés.

Un partido de fútbol brasileño se convirtió en un caos esta semana cuando un jugador enojado derribó al árbitro y pareció patearlo deliberadamente en la cabeza mientras estaba en el suelo.

William Ribeiro, mediocampista del Sport Club Sao Paulo, fue arrestado en el estadio y luego acusado de intento de homicidio.

El impactante video del incidente, ocurrido el lunes, muestra a Ribeiro atacando al árbitro Rodrigo Crivellaro a mitad del partido, dejándolo inconsciente en el campo.

El investigador de la policía Vinicius Lourenço de Assunção explicó a ESPN su razonamiento del cargo imputado a Ribeiro, alegando que “según el médico, el árbitro presentó un habla confusa. Corría un riesgo muy grave de lesión en la columna cervical y la cabeza”.

“Por eso decidí el delito de intento de homicidio. Cuando pateas la cabeza de alguien que está en el piso, corres el riesgo de matarlo”, dijo Lourenço de Assunção.

Según el investigador, si es declarado culpable, Ribeiro podría enfrentar hasta 30 años de prisión, aunque podría recibir una sentencia significativamente menor si el árbitro sobrevive. Según los reportes, Crivellaro pasó la noche en el hospital y fue dado de alta al día siguiente.

El ataque tuvo lugar en el estado brasileño de Rio Grande do Sul durante un partido de segunda división entre el Sport Club Sao Paulo y el Esporte Clube Guarani.

Si bien el video del incidente no muestra los momentos previos al ataque, los medios locales informaron que Crivellaro se estaba preparando para darle a Ribeiro una tarjeta amarilla por quejarse. El video comienza con Crivellaro cayendo hacia atrás, después de lo que parece ser una patada o un empujón por parte de Ribeiro. Lo que está perfectamente claro es que tras el primer golpe, Ribeiro procede a patear a Crivellaro en la cabeza.

Mientras el árbitro yace inconsciente en el campo, algunos jugadores comienzan a darle empujones a Ribeiro, mientras que otros, preocupados por la salud de Crivellaro, llaman la atención del personal de apoyo para que ingrese al terreno de juego. Varios hombres armados vestidos con equipo de seguridad y camuflaje, quienes también portaban grandes porras, corren al campo para sofocar la riña. Una ambulancia llega poco después y Crivellaro es colocado dentro para ser llevado al hospital. Debido al incidente, el resto del juego se pospuso.

El presidente del Sport Club Sao Paulo, Deivid Goulart Pereira, calificó el incidente de “repugnante” en un comunicado.

“Nuestro club enfrentó uno de los episodios más tristes de su historia, una escena fatídica que no solo conmocionó a todas las personas que aman el fútbol [de Rio Grande do Sul], sino a todos los que simplemente aman el deporte en general”.

“Ofrecemos disculpas al profesional que fue herido y a su familia, así como también ofrecemos disculpas al público, en general, por la lamentable escena”, continuó, señalando que el ataque ocurrió en el 113 aniversario del equipo.

Goulart Pereira anunció que el contrato de Ribeiro había sido “rescindido sumariamente” y que tomarán “todas las medidas posibles y legales”.