

NIÑOS EN RIESGO VITAL
Máximo, de diez años, herido por una bala.
Max sobrevivió tras una cirugía compleja que duró seis horas. La bala sigue alojada en el cuerpo del niño.
Kimberly estuvo internada una semana después de que una bala le rompiera el brazo.
ESTALLIDO OCULAR
Nahuel recibió tres impactos de perdigones en su cuerpo y un cuarto le reventó el ojo izquierdo.
Nahuel sostiene algunos de los perdigones que los vecinos reunieron tras la represión policial esa noche.
CON PLOMO EN EL CUERPO
Tomás cubrió con su cuerpo a su hermano para protegerlo y recibió diez perdigones.
De los diez perdigones que recibió Tomás, seis se le incrustaron en el cuerpo y solo pudieron removerle cuatro.
Seis de los diez perdigones los recibió en la espalda.
LAS CARAS DE LA RESISTENCIA
Ayelén Salgado y Víctor Chanfreau, voceros de la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios de Chile.
Los recintos donde se rindió la PSU fueron custodiados de manera exclusiva por Carabineros.
La ejecución de la prueba estuvo llena de errores: a los jóvenes les cambiaron las sedes a última hora, el test empezó tarde y muchos no pudieron entrar.
En distintas sedes donde se hizo la PSU, varios secundarios respondieron al llamado de la ACES para boicotear la prueba.
Con carros lanza agua y lanza gases, Carabineros resguardó las sedes donde se rindió la PSU.
ENCAPUCHADA
Tomás junta todos los restos de lacrimógenas y perdigones que recoge afuera de su casa cuando pasea con su mamá.