Sigue a VICE Sports en Facebook para descubrir qué hay más allá del juego:Que no te engañen: el golf es un deporte peligroso y quien diga lo contrario miente.El primer ejemplo que lo deja más claro que el agua —y nunca mejor dicho— es el que grabó la ex estrella de la NHL Teemu Selanne. El ex jugador de hockey fue a jugar con unos amigos y uno de estos tenía una bola complicada. Si se junta alguien con poco equilibrio y la proximidad de un charco o una pequeña baza, el resultado siempre es el mismo: chapuzón.Lo mejor de la escena, sin embargo, es cuando Selanne gira la cámara y se ve un tío con una barriga redonda y tensa que sostiene un puro en la boca estirado en el suelo sin aún creerse lo que ha pasado, otro que está de rodillas porque no se aguanta la risa y por último un buen hombre que ya trae una talla al recién bañado. Eso sí, con la sonrisa más burlona que se pueda imaginar.Es solo agua, pensarás. Sí, solo agua, pero cuando veas el próximo vídeo vas a desear caer siempre en el bunker. A ningún golfista le cuentan que el hoyo 17 puede ser el próximo escenario de la nueva película de Jurassic Park.
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Si este caimán se lo llegan a encontrar Selanne y compañía, seguramente no se habrían reído tanto.Los jugadores de golf no son conscientes de los peligros que asedian un capo perfecto de 18 hoyos bien cuidados. Seguid dando golpes, practicando vuestro swing y cuidando vuestras maderas: pero no os olvidéis nunca de vigilar vuestra espalda.