Río de Janeiro y Brasil en general recibieron muchas críticas por pedir más de lo que podían costear al albergar los Juegos Olímpicos de 2016. Ahora, los atletas que suelen morder sus medallas después de recibirlas en el podio podrían llevarse una sorpresa.De acuerdo con Agence France-Presse, más de 142 medallas han comenzado a desbaratarse desde que fueron entregadas a los 2,021 atletas. El vocero de los Olímpicos de Río, Mario Andrada, habló para AFP:
A nosotros nos suena que se están derritiendo, como si fueran de chocolate.Se reporta que las medallas de plata son las más susceptibles a degradarse. Los organizadores de los Olímpicos de Río quisieron verse muy innovadores el año pasado al fabricar sus medallas con materiales reciclados. Las preseas de plata fueron construidas con "partes de espejos, desperdicio de soldadura, y placas de rayos x", y el 92.5 por ciento de plata pura, según el COI. Al parecer el 7.5 por ciento restante las arruinó. Sin embargo, los organizadores y el COI están haciendo todo lo posible por reparar las medallas defectuosas.Así concluye la metáfora del desastre de los Juegos Olímpicos de Río 2016."Hemos presentado problemas con la cobertura en un seis o siete por ciento de las medallas, y todo indica que se debe al cambio de temperatura".