¿Sabes ese grupo con el que andamos flipados y te recomendamos encarecidamente, OFF!? Bueno, pues ya han publicado su álbum, homónimo, a través de sus seguros servidores de VICE Records. Puedes encargarlo AQUÍ, si lo deseas. Y sabes que lo deseas.
Teníamos curiosidad por saber cómo se hizo un disco tan pistonudo, así que fuimos a preguntárselo a Keith Morris.VICE: Desde el momento de decidir hacerlo hasta el de su publicación, que fue ayer, ¿cuánto tiempo os ocupó hacer este disco?
Keith Morris: En componer las canciones tardamos unas tres semanas y media, aunque DIMITRI y yo nos habíamos propuesto dedicar dos meses para intentar ser creativos mientras la otra mitad del grupo se dedicaba a lo que fuese que tuviera que dedicarse. No funcionamos como una banda "a tiempo completo", ya que tres de nosotros cuatro tienen hijos, obligaciones familiares, ese tipo de cosas divertidas. ¡En esta organización musical, yo soy el único bala perdida! Después nos reunimos en ABC Rehearsal para aprendernos las canciones. Esta parte del proceso nos tomó de seis a siete horas, a pesar de que habíamos acordado tres sesiones de ensayo de tres o cuatro horas cada uno. Quedábamos y nos contábamos chistes y cotilleos, charlábamos, bebíamos café helado, nos metíamos con este o con aquel y con otros grupos, hacíamos pausas para mear… Y nos pusimos las pilas el tiempo suficiente para memorizar las canciones. Ya habíamos reservado tiempo en un estudio de grabación, los Kingsize Sound Labs, en la gran ciudad de Eagle Rock. A la grabación le dedicamos un desorbitado total de tres días, o lo que es lo mismo 36 horas. Cuando digo 36 horas estoy mintiendo, por supuesto, porque el primer día consiste en presentarse allí, descargar nuestro equipo, instalarlo en el estudio, esperar a que el técnico instale los micrófonos, probar que el bajo, la guitarra y la batería suenan y, por mi parte, pegar unos gritos ante el micro. Entre una cosa y otra pues nos dio la hora de cenar, a eso de los 8. Mandamos al segundo técnico a que nos buscara algo de papeo. Si descontamos un par de pausas para echar unos tragos, tardamos unas siete horas en clavar un par de temas. Esto es porque tocamos cuatro o cinco veces cada uno. Intentamos tener terminados todos los temas hacia la mitad de la tercera sesión de estudio, para así poder dar luz verde al proceso de mezclado. La de mezclar es la parte más larga del cotarro este de OFF! haciendo música. Dura una semana o dos, y entre tanto pensamos qué vamos a poner en la portada. Lo siguiente es enviar la música a que la mastericen, en Santa Bárbara. Es una preciosa comunidad costera a unas pocas millas al norte de California. No sé cuánto tarda el tío que masteriza, pero calculo que serán un día o dos a razón de unas seis horas al día. En conjunto, todo esto hace un gran total de unas, digamos… ¿272 horas?Guau. Cuéntame cómo firmasteis por VICE Records.
Pues usando un bolígrafo para poner nuestros nombres en la parte de abajo de unos papeles que nos mandaron… Soy amigo de Brett Guerwitz, guitarrista de Bad religion y propietario de Epitaph records. Le puse nuetro primer EP y casi se corre. ¡Me dijo que era lo mejor que había oído en cinco años! Y que haría cualquier cosa que le pidiéramos. Se redactó un contrato, ambas partes lo aprobamos y, en el último momento, Steve McDonald, que es mi bajista favorito, nos preguntó que por qué teníamos tanta prisa por firmar con Epitaph. SMcD dijo que quería una segunda opinión y que era colega de Suroosh Alvi, el pez gordo de VICE a nivel mundial. ¿Ves a dónde conduce esta historia tan bonita? Jamie Farkas, la chica que forma parte del grupo de toma de decisiones, nos envió un plan que totalmente distinto al de Epitaph. A todo el mundo en OFF! le moló, a todo el mundo en VICE también, y aquí estoy yo ahora, escribiendo esto para ti. ¡El destino! ¿Cuál ha sido el concierto más estresante que habéis hecho hasta ahora?
OFF! dimos nuestro primer concierto en Beerland, durante el festival SXSW en Austin, Texas, hace un par de años. Aquella actuación nos puso de los nervios. ¡Sólo habíamos ensayado dos horas! ¡Y el SXSW es una locura y un caos! Esta confusión, y la sensación de que las cosas se estaban saliendo de madre, casi descarrilando, aumentó el frenesí con que encaro cada concierto. Yo me pongo muy nervioso antes de los conciertos. ¿Sabes eso del jugados de béisbol veterano que le dice al novato que tiene que sentir mariposas en el estómago porque si no, no está viviendo la vida? Pues eso. ¡Yo amo la vida! Tengo que sentirme así, me hace sentir vivo. ¿Diríais que este disco tiene un tema en concreto?
El mayor tema del álbum es evitar todos los temas. Tal vez podríamos probar a hacer un "disco conceptual" o algo por el estilo, el problema es que los conceptos se me atragantan… Y los arreglos de cuerda… ¿Alguna vez has empezado a componer una canción sobre una chica con la que te estabas viendo y la relación se ha roto antes de que acabaras la canción?
No, todas mis canciones de "amor" las he compuesto después de romper. Así puedo meter sarcasmo y algo de veneno. ¿Nos dejarás subir al escenario cuando toquéis en directo?
¡Rotundamente NO! Si queréis meteros en la olla o enseñar las tetas mientras saltáis de un trampolín, por nosotros cojonudo, pero si subís al escenario tenéis que recordar la regla de los tres segundos. Consiste en que podéis pegar botes mientras tocamos, pero tenéis que saltar del escenario en 3 SEGUNDOS. Ni uno más. Somos más que capaces de arreglárnoslas solos con nuestras canciones, no buscamos nuevos miembros que añadir al grupo. Hala, a pasarlo bien.@WolfieVibes
Keith Morris: En componer las canciones tardamos unas tres semanas y media, aunque DIMITRI y yo nos habíamos propuesto dedicar dos meses para intentar ser creativos mientras la otra mitad del grupo se dedicaba a lo que fuese que tuviera que dedicarse. No funcionamos como una banda "a tiempo completo", ya que tres de nosotros cuatro tienen hijos, obligaciones familiares, ese tipo de cosas divertidas. ¡En esta organización musical, yo soy el único bala perdida! Después nos reunimos en ABC Rehearsal para aprendernos las canciones. Esta parte del proceso nos tomó de seis a siete horas, a pesar de que habíamos acordado tres sesiones de ensayo de tres o cuatro horas cada uno. Quedábamos y nos contábamos chistes y cotilleos, charlábamos, bebíamos café helado, nos metíamos con este o con aquel y con otros grupos, hacíamos pausas para mear… Y nos pusimos las pilas el tiempo suficiente para memorizar las canciones. Ya habíamos reservado tiempo en un estudio de grabación, los Kingsize Sound Labs, en la gran ciudad de Eagle Rock. A la grabación le dedicamos un desorbitado total de tres días, o lo que es lo mismo 36 horas. Cuando digo 36 horas estoy mintiendo, por supuesto, porque el primer día consiste en presentarse allí, descargar nuestro equipo, instalarlo en el estudio, esperar a que el técnico instale los micrófonos, probar que el bajo, la guitarra y la batería suenan y, por mi parte, pegar unos gritos ante el micro. Entre una cosa y otra pues nos dio la hora de cenar, a eso de los 8. Mandamos al segundo técnico a que nos buscara algo de papeo. Si descontamos un par de pausas para echar unos tragos, tardamos unas siete horas en clavar un par de temas. Esto es porque tocamos cuatro o cinco veces cada uno. Intentamos tener terminados todos los temas hacia la mitad de la tercera sesión de estudio, para así poder dar luz verde al proceso de mezclado. La de mezclar es la parte más larga del cotarro este de OFF! haciendo música. Dura una semana o dos, y entre tanto pensamos qué vamos a poner en la portada. Lo siguiente es enviar la música a que la mastericen, en Santa Bárbara. Es una preciosa comunidad costera a unas pocas millas al norte de California. No sé cuánto tarda el tío que masteriza, pero calculo que serán un día o dos a razón de unas seis horas al día. En conjunto, todo esto hace un gran total de unas, digamos… ¿272 horas?Guau. Cuéntame cómo firmasteis por VICE Records.
Pues usando un bolígrafo para poner nuestros nombres en la parte de abajo de unos papeles que nos mandaron… Soy amigo de Brett Guerwitz, guitarrista de Bad religion y propietario de Epitaph records. Le puse nuetro primer EP y casi se corre. ¡Me dijo que era lo mejor que había oído en cinco años! Y que haría cualquier cosa que le pidiéramos. Se redactó un contrato, ambas partes lo aprobamos y, en el último momento, Steve McDonald, que es mi bajista favorito, nos preguntó que por qué teníamos tanta prisa por firmar con Epitaph. SMcD dijo que quería una segunda opinión y que era colega de Suroosh Alvi, el pez gordo de VICE a nivel mundial. ¿Ves a dónde conduce esta historia tan bonita? Jamie Farkas, la chica que forma parte del grupo de toma de decisiones, nos envió un plan que totalmente distinto al de Epitaph. A todo el mundo en OFF! le moló, a todo el mundo en VICE también, y aquí estoy yo ahora, escribiendo esto para ti. ¡El destino! ¿Cuál ha sido el concierto más estresante que habéis hecho hasta ahora?
OFF! dimos nuestro primer concierto en Beerland, durante el festival SXSW en Austin, Texas, hace un par de años. Aquella actuación nos puso de los nervios. ¡Sólo habíamos ensayado dos horas! ¡Y el SXSW es una locura y un caos! Esta confusión, y la sensación de que las cosas se estaban saliendo de madre, casi descarrilando, aumentó el frenesí con que encaro cada concierto. Yo me pongo muy nervioso antes de los conciertos. ¿Sabes eso del jugados de béisbol veterano que le dice al novato que tiene que sentir mariposas en el estómago porque si no, no está viviendo la vida? Pues eso. ¡Yo amo la vida! Tengo que sentirme así, me hace sentir vivo. ¿Diríais que este disco tiene un tema en concreto?
El mayor tema del álbum es evitar todos los temas. Tal vez podríamos probar a hacer un "disco conceptual" o algo por el estilo, el problema es que los conceptos se me atragantan… Y los arreglos de cuerda… ¿Alguna vez has empezado a componer una canción sobre una chica con la que te estabas viendo y la relación se ha roto antes de que acabaras la canción?
No, todas mis canciones de "amor" las he compuesto después de romper. Así puedo meter sarcasmo y algo de veneno. ¿Nos dejarás subir al escenario cuando toquéis en directo?
¡Rotundamente NO! Si queréis meteros en la olla o enseñar las tetas mientras saltáis de un trampolín, por nosotros cojonudo, pero si subís al escenario tenéis que recordar la regla de los tres segundos. Consiste en que podéis pegar botes mientras tocamos, pero tenéis que saltar del escenario en 3 SEGUNDOS. Ni uno más. Somos más que capaces de arreglárnoslas solos con nuestras canciones, no buscamos nuevos miembros que añadir al grupo. Hala, a pasarlo bien.@WolfieVibes