Una analogía entre la venta de UFC y otros ejemplos de compra-venta en el mundo deportivo

En el verano de 2015, un conglomerado chino compró la serie de Triatlón Ironman de Providence Equity Partners LCC por una cifra aproximada de 650 millones de dólares.

Las carreras Ironman, que crecieron bajo la conducción de Providence y experimentaron expansión después del trato cambiaron de ser una marca fuerte a un dueño y operador de carreras competitivas en todo el mundo.

Tal trato es el paralelo más reciente en el panorama de los negocios deportivos a la compra de UFC, que se finalizó por una cifra reportada de cuatro mil millones de dólares hoy lunes, después de discutirse en los últimos meses.

ESPN reportó que el trato es la transacción más costosa para una organización en la historia de los deportes.

"Por lo general se forman ligas alrededor de los equipos", dijo Robert Boland, Residente del Departamento de Administración Deportiva de la Universidad de Ohio. "Es sólo en el contexto moderno que una unidad administrativa o de gobierno en los deportes ha sido considerada una propiedad que puede venderse".

UFC, que sirve en parte como liga de artes marciales mixtas y en parte como compañía promotora de eventos promocionando sus peleas, notificó a sus peleadores sobre la venta mediante un correo electrónico el mismo lunes.

El correo, que no indicaba la cantidad de la compra-venta, explicó que el gigante WMG-IMG había comprado UFC junto a "Silver Lake Partners, KKR, MSD Capital, L.P. y MSD Partners, L.P. como inversionistas estratégicos".

"Ironman es el mejor circuito de triatlones", dijo Boland. "Pero no es el único. Tiene la mejor propiedad intelectual. UFC tiene la mejor propiedad intelectual (entre las promotoras de peleas). Tiene distribución respetable y algunas estrellas".

La diferencia entre la venta de UFC y la venta de Ironman es la cantidad de dinero involucrada.

En comparación, los Clippers de Los Ángeles —una de las 30 franquicias de la NBA— fue vendido por dos mil millones al antiguo director de Microsoft, Steve Ballmer en 2014.

"No puedo pensar en algo tan grande cambiando de manos así (en los deportes)", dijo el director del Center for Sports Communication de la Universidad Marist, Keith Strudler. "Es casi como lo que veríamos en el mundo corporativo donde un grupo de inversionistas llega y compra una organización. Refuerza la idea de que estas cosas son en verdad un negocio".

A principios de 2005 se llevó a cabo un trato similar cuando Bain Capital y un grupo de consultoría deportiva hicieron una oferta para comprar la NHL. En ese momento, la liga de hockey estaba en medio de la clausura de toda una temporada antes de que se hiciera una oferta de 3500 millones para comprar los 30 equipos que la conforman.

"Al comprar los 30 equipos y combinarlos en una sola identidad, discutían, podían modernizar las operaciones, aumentar las ganancias por transmisiones y negociar los salarios de los jugadores desde una posición de poder", declaraba un artículo de Bloomberg en 2012 en el que se detallaba el intento de compra.

En una menor escala en 1999, la antigua estrella de la NBA, Isaiah Thomas compró la Asociación Continental de Basquetbol por diez millones de dólares.

A principios de 2016, Activision Blizzars compró las acciones de la Major League Gaming, una compañía de e-sports por casi 46 millones.

"Es difícil vender una liga como esa cuando tienes un montón de equipos con dueños diferentes", dijo Strudler. "Es raro que veamos una organización como dueña de todo".

En una entrevista con The Los Angeles Times la semana pasada, el presidente de UFC, Dana White y el dueño, Lorenzo Fertitta, se pronunciaron sobre la venta.

"Lo que está pasando es lo normal", dijo Fertitta. "Con cualquier compañía de este tamaño y magnitud no se habla sobre las cosas en las que se está trabajando en términos estratégicos. Así que no hay nada que reportar".

Durante esa entrevista del 5 de julio, White contó una anécdota sobre un viaje reciente a Bangor, Maine, diciendo "La gente me grita, 'Felicidades'. Yo veo a mi familia, diciendo, 'La mayor parte del mundo piensa que los Fertitta y yo ya no somos dueños de UFC'. Es increíble. Somos dueños de UFC. No vendimos UFC, todavía es nuestro".

Entre los grupos que supuestamente estaban involucrados en la compra-venta estaba Dalian Wanda Group, de China —que también compró Ironman— señalando el posible deseo de expandir la presencia del deporte en China.

"No puedes pasar 24 horas sin ver una compañía china invirtiendo en propiedades deportivas", dijo Joe Favorito, profesor en la Universidad de Columbia. "Todos los días pasa algo. Ya sea en un equipo de futbol en Italia o una compañía de e-sports. Continuaremos viéndolo y probablemente lo veremos en los Estados Unidos dependiendo de cómo se solucionen las leyes de impuestos".

Una constante en los reporte de los medios que reportaban la venta era que White seguiría siendo la cara de UFC y que estaría involucrado en las operaciones diarias de la compañía.

White dijo en el programa Dan Patrick Show en mayo que "el día en que nos decidamos a vender, probablemente no querré continuar haciendo esto", pero el correo que envió UFC a sus peleadores esta mañana decía que White seguirá con su papel y seguirá teniendo acciones en la compañía".

"Si buscas UFC en Google, el primer nombre que aparece es Dana White", djio Favorito. "Ha sido el rostro de la organización desde que los Fertittas compraron la compañía, tal vez desde antes. Creo que han hecho un buen trabajo construyendo narrativas para algunos peleadores con el paso del tiempo. Randy Couture va y viene, de alguna manera también Ronda Rousey va y viene. Georges St. Pierre igual. El único rostro consistente con UFC a lo largo de los años ha sido Dana White".

UFC fue adquirido por Frank y Lorenzo Fertitta, operando como Zuffa LCC, por dos millones de dólares en 2001. El correo que envió UFC a sus peleadores indicaba que al cierre de la compra-venta, Lorenzo renunciaría a su puesto como Director Ejecutivo. Pero también declaraba que tanto Frank como Lorenzo mantendrían una participación pasiva con acciones minoritarias en la compañía.

"No hemos visto un momento catastrófico para UFC", dijo Strudler. "Cuando alguien fallezca en televisión y todos estén viendo. No hemos tenido una investigación sobre por qué cierta persona recibe más promoción. Desde la perspectiva de los dueños, es un momento perfecto para vender la empresa y sacar provecho. Construyeron algo a partir de la nada. Potencialmente esta situación tendrá más desventajas que ventajas".

@philterrigno