Anderson Silva quiere pelear en Río, pero sólo si el rival es Nick Diaz

Si las cosas hubiesen ido acorde al plan, la pelea del ex campeón mediano Anderson Silva con Kelvin Gastelum en UFC 212 seguiría en pie para el 3 de junio. Pero seamos honestos, ¿cuántas veces las cosas salen como las planeamos? Casi nunca. Desafortunadamente, Gastelum se convirtió en la víctima más reciente de las reaccionarias reglas de la Agencia Antidopaje de los Estados Unidos en contra del consumo de marihuana, y así de simple Silva se quedó sin oponente para UFC 212.

Dado que el evento se llevará a cabo en Río de Janeiro, Brasil, Silva está dispuesto a permanecer en la cartelera. El reto para el equipo de UFC no sólo recae en buscarle un nuevo oponente, sino también un rival que esté dispuesto a entrenar y viajar hasta Brasil en un período de un mes y medio. Por fortuna para Silva, su promotora parece estar haciendo su mejor esfuerzo.

Trabajando con la certeza de que encontrarán un nuevo rival para Silva, viajaron a Río para participar en la rueda de prensa de este martes con las demás estrellas del evento. Como era de esperarse, Silva evitó varias preguntas sobre los posibles reemplazos de Gastelum.

Cuando se le preguntó qué opinaba de una pelea con Vitor Belfort, Silva expresó desinterés total y dijo que prefería enfrentar a alguien que venía de ganar (Belfort tiene tres derrotas consecutivas). Cuando se le preguntó por Uriah Hall, con quien se supone pelearía en mayo, el brasileño dijo lo mismo. ¿Luke Rockhold? Silva opinó lo mismo.

"Vengo de ganar", dijo Silva por medio de su intérprete. "No había ganado una pelea en mucho tiempo, por eso no tiene sentido que me enfrente a alguien que viene de perder. No me llevará a ningún lado, no tiene lógica. Espero que UFC pueda conseguir a un peleador que viene de ganar y que pueda aportar algo a mi legado, de otra forma no tiene sentido".

El asunto detrás del rechazo de Silva tiene que ver con su interés por pelear con Nick Diaz —peleador que no ha ganado desde que derrotó a BJ Penn hace seis años—. Me gusta Anderson Silva y Nick Diaz, pero la idea es muy mala.

"Es algo que se ha mencionado", Silva dijo sobre una posible pelea con Diaz. "Es posible que se haga. Lo respeto mucho, creo que es un peleador excelente. Sería una pelea interesante, una pelea entretenida y con mucho sentido"

Silva y Diaz ya se enfrentaron una vez. De hecho, la pelea de 2015 es la aparición más reciente de Diaz en el Octágono.

A pesar de la espera fue una pelea decepcionante por muchas razones. Fue torpe y, para colmo, ambos peleadores dieron positivo en las pruebas antidopaje —Diaz por marihuana y Silva por una sustancia prohibida mucho más seria, Drostanolone—. Como resultado, la decisión unánime a favor de Silva fue borrada de los anales de las artes marciales mixtas, y reemplazada por las palabras "sin decisión".

En este sentido, una revancha entre ambos no es la mejor idea. Sin embargo, todo indica que es el único rival que Silva quiere ver en el Octágono, a pesar de mostrar cierto interés en Yoel Romero el día de ayer durante la conferencia de prensa. Desafortunadamente, el manager de MMA, Malki Kawa, reveló que Silva había rechazado la posibilidad de enfrentar a Romero.

¿De verdad Silva cree que una revancha con Nick Diaz "tiene sentido" o sólo quiere una pelea que sabe que puede ganar? ¿En realidad está convencido que enfrentarse con los mejores medianos como Luke Rockhold o Yoel Romero no vale la pena o está un poco preocupado por su edad? Es imposible saber. Sin embargo, Silva se ha ganado el derecho de escoger a sus oponentes.

Lo único bueno es que podríamos ver a Nick Diaz de vuelta en la jaula.