¿Por qué los grandes jugadores tienen problemas mentales?

Sigue a VICE Sports en Facebook para descubrir qué hay más allá del juego:

Como más avanza tu carrera como futbolista, más baja tu salud mental.

La afirmación parece chocante, pero al fin y al cabo parece la conclusión a la que ha llegado un delicado estudio de la FIFPro. La asociación de jugadores ha entrevistado a más de 800 futbolistas y ha llegado a una resolución que… bueno, nos sorprende quizás menos de lo que debería.

Al parecer, hay muchos futbolistas profesionales con problemas mentales. Lo chocante es que esta situación sea producto, según la FIFPro, de las lesiones: la creencia general es que muchos vienen con el kit del caos mental de serie.

Los resultados claves de la investigación de FIFPro relativa a los problemas de salud mental en el fútbol profesional pic.twitter.com/S7NmsQQn4u
— FIFPro (@FIFPro) 6 Ottobre 2015

Echemos un vistazo a lo que ha descubierto este estudio:

• más del 40% de los jugadores, en activo o retirados, han sufrido por lo menos una o dos lesiones graves a lo largo de su carrera.
• más del 30% de los jugadores, en activo o retirados, sufren de ansiedad. Esto es fácil de comprobar viendo algún que otro vídeo en YouTube.
• más del 20% de los jugadores no duermen bien o tienen dificultades a a la hora de coger el sueño.
• más del 20% de los ex jugadores tiene problemas con el alcohol. Algunos casos extremos lo dejan claro.

Conclusiones:

Eres un chico listo y quieres ser un jugador de fútbol profesional para ganar mucha pasta y ser más famoso que Cristiano Ronaldo (aunque, no nos engañemos, es imposible serlo más que él). Empiezas tu carrera, sufres una lesión y empiezas a notar los efectos en tu confianza. Te sobrepones, llegas a la élite, fichas por un equipo de Champions League y alcanzas la Final: sin embargo, la presión es tan bestia que terminas estando un mes sin dormir y te pasas los tres días previos al partido sentado en el inodoro por culpa de los nervios. A media hora de la Final empiezas a perder el pelo de golpe, y solo empezar te dan un codazo en la sien en un choque en el área. Al levantarte no tienes muy claro quién eres ni donde vives.

Has ganado o perdido la Champions League y te da igual porque no te enteras mucho de qué va la película. Te retiras al cabo de unos años y el vacío interior te empuja hacia el alcohol.

Vale, estamos poniendo un caso muy extremo, pero no sería el primero. Ocurre en las mejores familias, además. Dinos, ¿aún estás seguro de que quieres ser futbolista profesional?