A base de goles, Marco Fabián ha cambiado la percepción de su técnico sobre los mexicanos

“No les tenemos miedo”, dijo Andrés Guardado en Brasil, cuando Niko Kovac, entonces técnico de Croacia, buscó atemorizar a la Selección Mexicana previo a su enfrentamiento en la Copa Mundial: “Si hay algunas rodillas temblando, son las de ellos”. En ese partido, los croatas fueron eliminados por los mexicanos con un marcador de 3-1 y Andrés Guardado celebró moviendo las rodillas y negando con el dedo. Marco jugó apenas seis minutos de ese partido.

En México no se supo más de Kovac hasta marzo del año pasado al ser nombrado entrenador del Eintracht Frankfurt. A su llegada, Marco Fabián comenzó a perder minutos al punto de ser borrado de las convocatorias, la explicación tenía que ver con planteamientos y necesidades del equipo, pero el padre del jugador insistió en que la decisión de Kovac estaba movida por el resentimiento hacia los mexicanos.

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Más de un año después, Marco Fabián se ha convertido en jugador clave en las aspiraciones de Kovac para la salvación del descenso y la disputa por la clasificación a competencias europeas. A pesar de haberse perdido los primeros partidos de la temporada por una lesión lumbar, el delantero volvió en la mejor forma y esta semana sumó su tercera mención consecutiva como MVP de la jornada de la Bundesliga, tras comandar la voltereta de su equipo ante el Augsburg.

“Los mexicanos tienen algo especial en sus genes. He jugado contra México en un par de ocasiones y sé de lo que hablo”, declaró Kovac a medios alemanes”, y sumó: “Marco es líder dentro y fuera del campo por su manera de hacer las cosas, es por eso que es una de las figuras de nuestro equipo”.

Marco Fabián vive una gran temporada en la que sólo se ausentado por lesión, ha jugado en 21 partidos, marcando siete goles y asistiendo en cuatro ocasiones. Los tres últimos partidos han marcado su valía.