Unos anfitriones de Airbnb asesinan presuntamente a su huésped

Ramis Jonuzi, obrero de la construcción de 26 años, alquiló una habitación por 30 dólares la noche (algo menos de 20 euros), a través del portal Airbnb en el barrio de Brighton East, en Melbourne. Jonuzi atravesaba un mal momento en lo personal y buscaba un sitio barato en el que alojarse; sin embargo, menos de una semana después, su cuerpo sin vida fue hallado en el jardín de la casa y, pese a los esfuerzos de los servicios médicos, no fue posible reanimarlo.

Jonuzi fue presuntamente asesinado por sus anfitriones, Craig Levy, Ryan Smart y Jason Colton, a los que se imputa un delito de asesinato. Colton, además, ha sido acusado de violar a Jonuzi con un objeto. Todavía no se conocen los detalles del crimen, la causa de la muerte ni los hechos precedentes, pero al parecer Jonuzi tuvo problemas con la casa desde el principio, ya que le comentó a un amigo que no le gustaba el ambiente que había y que quería mudarse.

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Y él no fue el único huésped que presentó quejas. Según el diario The Age, otros usuarios habían publicado reseñas negativas de su estancia allí, diciendo que se sentían incómodos e inseguros en la casa y que incluso les habían robado varias de sus pertenencias. Uno de ellos incluso recomendaba que era “la mejor forma de pasar una noche, comprar un martillo de 50 dólares, machacarte la mano con él e ir de urgencias al hospital”.

Los amigos de Jonuzi lo describen en Facebook como un tipo cálido, atento y sincero. En declaraciones para The Age, otros amigos aseguran que no era agresivo por naturaleza, pero que probablemente fue sincero con cualquier problema que tuviera en la casa.

Un portavoz de Airbnbn aseguró que desde la empresa “muestran su más profundo pesar y su indignación” ante estos hechos, y añaden: “La familia cuenta con todo nuestro apoyo y hacemos llegar nuestras más sinceras condolencias tanto a ellos como a sus amigos”. Desde Airbnb también han señalado que la casa se ha retirado del sitio web y que la empresa colaborará con las autoridades en la investigación. “No tiene cabida en Airbnb un acto tan execrable y que va contra todo lo que representa nuestra comunidad internacional”, aseguró.