“Los pintores usualmente deben trabajar con la gravedad pata evitar que la pintura se corra. Conmigo es lo opuesto. Mis materiales quieren salir disparados, y el desafío es forzarlos a permanecer en el papel” explica Rosemarie Fiore al teléfono desde Los Angeles, donde una exhibición de sus pinturas abrió la semana pasada en la Galería Vont Lintel. Los trabajos, que incluyen albercas circulares de colores, le dan nombre a su nueva serie Eclipse. Como planetas en órbita, cruzan silenciosamente otros caminos y hacen vibrar al papel.
Fiore vive y trabaja en Bronx y ha estado utilizando maquinaría encontrada para crear su obra desde su residencia en Skowhegan, completada después de su posgrado. Sus primeros experimentos con pirotecnia comenzaron en Roswell, Nuevo México con un accidente. “Estaba encendiendo una bomba de humo y al lanzarla dejó una linea punteada azul” dijo.
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Desde ahí, ha creado sofisticadas herramientas para capturar color y humo. “Al principio solo aseguraba petardos en un palo de escoba y los arrastraba en papel,” dice. Ahora su laboratorio incluye varios contenedores con llantas específicamente diseñadas para que las bombas de humo se apliquen con la presión necesaria. Las herramientas están perpetuamente en desarrollo: “Mientras estoy creando el trabajo, veo que puedo crear una nueva extensión. Siempre estoy transformando las herramientas y desarrollando cosas.” Para Eclipse, modificó la tapa de un bote de basura y la llamó “Odisea en el Espacio”
Ella describe su proceso como una danza meditativa en papel, cargada de silencio—estas son bombas de humo, no petardos con pólvora. “Algunas máquinas se mueven mejor que otras. Es como un compañero de baile: cuando tienes un buen compañero, no debes forzar nada. Puedes anticipar los movimientos del otro para moverse suavemente juntos.” El baile tiene límites temporales estrictos: una vez que las bombas de humo se quedan sin pigmento, el show se acabó.
La obra de Eclipse, no se compara con las grandes pinturas previas de Fiore, en las que además de usar bombas de humo, hacía collages para crear composiciones frenéticas y en capas. “Esta exhibición se enfoca más en la simplicidad del humo, sobre la interacción de los colores y la creación de sutiles profundidades.” El uso de papel suave para grabado, también ayudó a la producción de estos matices de ensueño.
Piezas más grandes de estas series se están trabajando. En algunos meses Fiore estará colaborando con el departamento de metales en la UNC Greensboro para crear una “enorme herramienta de producción” de 1.20 metros.
Para ver más de la obra de Rosemarie Fiore, incluyendo un archivo de sus pinturas y dibujos con pirotecnia, visita su sitio.
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