GTR 2012: Fashionistas

El Global Trend Report es nuestro informe anual de lo que llevan los chicos en cada país del mundo. Bueno, no en todos los países, sólo en los que tenemos oficina. Aquí tenéis el segundo de tres posts que sirven de apéndice para nuestro Especial Moda 2012.

Aquí tienes lo que las chicas jóvenes y los gays están llevando en el planeta moda este año.

ALEMANIA

Los fashionistas de Berlín son, ahora mismo, como viajeros del tiempo camp recubiertos de seda que hubieran vuelto al Londres de los años 80 y decidido que ya es hora de recuperar el look Nuevo Romántico, solo que más gay. Eso se traduce en cuero de colores pensados con la intención de que no combinen, tacones customizados con remaches metálicos, y el pelo afeitado en formas angulosas y teñido de la forma más rara posible. Si realmente quieres calcinar para siempre las retinas de la gente, acompaña todo esto con unas cejas blanqueadas. Las chicas son un poco más discretas que los gays y siguen llevando ese look de severa reina glacial que tan bien llevan las chicas alemanas; esto significa prendas de piel, uñas y labios rojos y vestidos de colecciones esenciales de mediados de los 90 de firmas como YSL y Gucci.

SUDÁFRICA

Todo el que está metido en la moda viste ropa vintage, vaya noticia, pero en Sudáfrica la llevan mucho mejor. De forma parecida a los que tocan en grupos, en Sudáfrica todo está inspirado en los años 90, con esas chaquetas, shorts y camisas de botones hasta arriba con estampados afrocéntricos, pero también están combinando ese look con ropa de jóvenes diseñadores locales –como Samantha Constable y Suzaan Heyns– para hacer sus conjuntos un poco más “fashion”. La mayoría de los tíos negros se están haciendo peinados altos de punta a lo Kid Play (o a lo Cabeza borradora) y las chicas se pirran por rizarse el cabello de forma muy elaborada; los tíos blancos, por su parte, se están decantando por los tupés rockabilly, mejor cuanto más bamboleantes, y las chicas, cortes sesgados o, directamente, la cabeza rapada. Las bambas vintage son populares pero muy caras, así que la mayoría calza brogues o náuticos.

UK

Es decepcionante, pero en el Reino Unido van casi exactamente igual que como iban vestidos el año pasado, lo cual significa básicamente que parecen el equivalente gay de Morticia Addams, todos cubiertos con capas y más capas de materiales negros fluidos y cruces invertidas. Y yo pensando que el meollo de la moda son las ideas nuevas, ya ves tú. Una cosa que si ha cambiado es la introducción de ropa deportiva y de alguna firma británica histórica bien escogida; así, es típico que muchos estudiantes combinen una camiseta de tela negra de alguien como Rick Owens o Damir Doma con shorts o pantalones de chándal Nike negros, y Oxfords Dr. Martens un poco raspados.

SUECIA

Los fashionistas suecos, ahora mismo, están obsesionados con revitalizar la economía de su país. Quizá no sea algo consciente, pero marcas locales como Acne, Cheap Monday y The Local Firm se lo están comiendo todo. Los estudiantes de moda también se fabrican gran parte de su propia ropa. Por ejemplo, la camiseta y la bolsa de este tío son de su colección, Disobey, aparentemente inspirada en la cultura gabber, la dureza de los entornos urbanos y la estética del terrorista suicida; un conjunto de influencias de lo más estándar, evidentemente. Muchos chicos llevan bolsitas de cuero de Acne alrededor del cuello y unas pequeñas gorritas que se colocan en lo más alto de la cabeza.

AUSTRALIA

Los puestos de tacos y los restaurantes mexicanos están apareciendo por todos partes en Melbourne, algo que evidentemente debe haber influido a los fashionistas ya que todos están empezando a llevar cosas inspiradas en Centroamérica y Sudamérica y a recubrirse de pompones y estampados peruanos. La gente con pasta opta por las grandes marcas internacionales, pero como es mucho más “cool” hacerte tu propia ropa o comprar cosas de segunda mano y personalizarlas, estamos viendo muchos chicos con pantalones rasgados y chicas con vestidos deshilachados intencionadamente. A nosotros nos parece bien, porque les da a las chicas un estupendo aire de indiferencia y a los chicos uno de tirado pero sexy.

HOLANDA

Las chicas metidas en la moda van actualmente muy new wave, rollo duendecillo gótico futurista. Ahora mismo es normal y aceptable pintarse los ojos de forma exagerada, dejando churretes, como lo haría un Robert Smith con problemas espásticos, mientras lleves mallas de terciopelo, falda larga, camisa de encaje, un montón de joyería elaborada, zapatos Creepers y pelo color pastel desvaído. De lo contrario solo eres alguien que no sabe maquillarse. Hasta hace poco, si querías sentirte sexy, la regla obligatoria para las faldas era “no por debajo de las rodillas”, pero ahora más largo es igual a más sexy. Aynouk, nuestra chica fashion, es un ejemplo perfecto de esa regla, pero ella ha superado a la mayoría de chicas llevando lo sexy a niveles que dificultan caminar.

ITALIA

Los fashionistas italianos están hartos de que les encasillen como el estereotipo del estudiante de moda, como esnobs vacuos y obsesionados con la ropa, y lo han solucionado comprando un nuevo guardarropa de prendas con inspiración política: un look que es casi exactamente el mismo que lucían nuestros padres durante los “años de plomo”. Adiós a los tejanos ceñidos y los sueters anchos del año pasado y hola a una mezcla de abrigos de marcas caras como Barbour y Montgomery –quizá desviándose un poco del marco del proletariat revolucionario–, cortes de pelo discretos y una paleta cromática no muy alejada de los insípidos colores terrosos, excepto cuando pretenden despistar con una camiseta con estampados africanos o una camisa de colores llamativos.

USA

Los fashionistas neoyorquinos van totalmente a su puta bola. Tanto las chicas como los chicos están muy por la labor de mezclar cosas, siempre que aquellas partes de sus conjuntos que no sean vintage formen el batiburrillo más grande que buenamente puedan. Traducido: camiseta estampada de alguna marca de ropa deportiva, un sencillo suéter de una marca de streetwear, un abrigo que parece barato pero es de una marca de alta costura y mega-caro, y cinturón de algún sitio baratillo, como Kmart o Sears. En cuestión de cabello, las chicas no han dejado morir las puntas teñidas de rubio pero han pasado del rubio civilizado a colores más sucios y grunge, recordándonos a la Milla Jovovich de El quinto elemento si estuviera enmedio de un polvo endrogao con Alabama Whitman, de Amor a quemarropa.

RUMANÍA

No es nada fácil localizar fashionistas en Rumanía, porque han aprendido a relajar su “fashion look” lo suficiente como para que no les vayan señalando con el dedo. Los chicos llevan sus bambas favoritas hasta que se caen las suelas, pantalones de colores neutrales y chaquetas con las mangas enrolladas, cabello muy corto y un buen número de bufandas negras. Lo único que les puede distinguir son las camisas con colores que se dan de hostias entre sí y las corbatas estampadas que llevan algunos. Las chicas van un poco más exageradas, con mallas de estampados geométricos, collares hechos a mano de los que cuelgan jaulas de pájaro, un bolso que fue de su abuela y chaquetas con estampados Mondrian a tope. Por desgracia, también entre ellas están de moda los corbatines, un look que nunca mola.

MÉXICO

Los shorts de cintura alta y las camisas sin mangas son muy populares entre las chicas de aquí, al igual que las botas grandes en plan declaración de principios fetish y las prendas a rayas de inspiración sesentera; todo esto produce mujeres que parecen versiones mexicanas de Françoise Hardy amantes del S&M. Las marcas globales están arrasando en los círculos de moda de México DF, pero los chicos se aseguran de combinarlas con ropa de sus amigos, piezas de diseñadores locales como María Vogel u originales cubiertos de remaches de tiendas vintage como Goodbye Folk.

CHINA

Las fashionistas chinas (¡las hay!) hacen lo que les da la gana. La cultura de la ropa vintage sólo hace unos años que se hizo grande aquí, así que la gente aun está aprendiendo que las botas de motociclista, los calcetines hasta las rodillas con puntos, los pantaloncitos de tweed y las chaquetas rojas de los 80 no necesariamente casan bien solo porque sean vintage. En los clubs se ven muchos zapatos de payaso y máscaras antigás. Mucha gente lo está haciendo bien, pero normalmente son los que compran cosas vintage japonesas, como vestidos pequeños y chaquetones de cachemira de los años 50, porque eso es lo único vintage que va a encajar con nuestra forma corporal.

DINAMARCA

Dinamarca tiene su cuota obligatoria de chicos bohemios de la alta costura, pero solo están repitiendo el mismo look grunge-glamouroso que lucen muchos otros chicos de cualquier ciudad grande. Los que mantienen interesante la moda son los gadedrenge, “chicos de la calle”, que mezclan camisas de botones y chaquetas de marcas como Henri Lloyd y Pendleton con los pantalones deportivos más baratos que encuentren y bambas de ellesse y Fila. Las chicas que van con estos chicos visten como si tocaran la guitarra en The Slits pero prefiriesen estar fumando marihuana con Jane Birkin: chupas de motora, Dr. Martens y estampados de leopardo por todas partes, yuxtapuesto con abrigos de piel, shorts tejanos y tacones de cuña.