Dolce and Gabbana vende los refrigeradores más cool del mundo por $33,000 dólares

Dolce and Gabbana, la lujosa casa de moda italiana, quiere que uses rayas esta temporada para "un look urbano de verano" sugerente al perfil de los 60s o 70s. La moda puede ser toda tuya si quieres comprar esta playera de $745, o incluso un $vestido de 7,945.

Pero, ¿tu refrigerador? Definitivamente tendría que estar adornado con un diseño basado en las Cartas del Tarot, con lunas y soles y estrellas. O escenas de batallas sicilianas de la Edad Media. ¡O ambas!

La mejor parte es que sólo te costará $33,000 dólares. Vale totalmente la pena, si estás dispuesto a querer desesperadamente que tus aparatos domésticos te opaquen.

Muchas celebridades son conocidas por usar Dolce & Gabbana —sólo que ninguno de los dos ha vestido un refrigerador antes–. El nuevo diseño de neveras será parte de una colaboración de edición limitada entre D&G y Smeg, producido en una serie limitada de 100, y conocida como Frigoifero d'Arte,o sea el "Refrigerador del Arte."

Los diseñadores sicilianos trajeron artistas locales para crear escenas y patrones que evoquen cuadros tradicionales, incluyendo teatros de marionetas sicilianos, carruajes con caballos y escenas de batallas famosas de la historia italiana. Cada refrigerador estará pintado a mano y firmado por el artista. La colección será presentada en la feria internacional del mueble, Salone Internazionale del Mobile 2016, la cual será llevada a cabo en Milan este mes.

Dolce & Gabbana ciertamente saben llamar la atención, ya sea con un refrigerador de $33,000 o con una declaración contra la fertilización in vitro, las madres sustitutas y la adopción gay.

En medio de reacciones violentas masivas, los diseñadores se disculparon luego por sus comentarios controversiales del año pasado, pero parece que esperan reparar el daño con aparatos domésticos de estética alucinante.

Si pueden encontrarles perdón en sus corazones, Dolce and Gabbana estarán muy contentos de venderles un refrigerador súper sofisticado. Sólo no se les ocurra poner pinturas hechas por "niños sintéticos" en la puerta del refrigerador –eso definitivamente sería un problema y sería tan de mal gusto–.