‘Chi Chi’ de Azealia Banks nos recuerda lo que la rapera pudo haber sido

Así están las cosas: Azealia Banks es una rapera con un talento sobrenatural que lo petó en 2011 después de lanzar su canción “212”, un himno a Nueva York y a comer vaginas que todavía llena las pistas de baile, seis años después. Continuó siendo una artista prometedero en el EP 1991 y su mixtape Fantasea; con los que se estableció como una artista emocionante a la que seguir en el momento. Pero Azealia también es una persona que, una y otra vez, ha adoptado posiciones a veces equivocadas y muchas veces horribles e indefendibles en redes sociales.

A pesar de su obvio talento, que Banks se haya metido con medio mundo en redes sociales, de Lil Kim a Lady Gaga y su firme compromiso por defender su uso de insultos homofóbicos, terminaron por eclipsar su música. Cuando su muy esperado álbum debut Broke with Expensive Taste fue lanzado en 2014 después de que Banks rompiera sus lazos con Universal, bajo prácticamente todos los estándares, se vio como uno de los álbumes de rap más innovadores e interesantes de ese año, con sus grandes ritmos de house y la firma de la neoyorquina en los flows de fuego rápido.

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En 2016, sin embargo, pasó por un punto que parece de no retorno al haber insultado racialmente al ex One Directioner Zayn Malik, a quien, a través de Twitter, inicialmente acusó de robar la estética de sus videos para el suyo “Like I Would”. Podemos argumentar que es cierto que, como mujer negra, recibe una respuesta desproporcionada por gran parte de su comportamiento, pero después del incidente con Malik, fue amplia y justificadamente condenada.

Todo esto para decir que si no fuera por su ejemplarmente mal uso de las redes sociales, es muy posible que Azealia Banks fuera una de las raperas más apreciadas en el mundo actualmente, y su nueva canción “Chi Chi” parece probar justo eso. El tema muestra el flow profundamente tonificado que hizo que Banks fuera tan amada por sus primeros fans, y parece que su talento se está afilando constantemente: su entonación es más clara que nunca, sus rimas más inteligentes y su selección de ritmo calculadora.

Para muchos, las redes sociales son un elemento inmejorable para la construcción de una base de fans. Y ciertamente ha funcionado para Banks, cuyos fans extremadamente leales se han quedado a su lado a pesar de las controversias. El tema es que en su caso, ha sido más bien un obstáculo. “Chi Chi” es un recordatorio de lo que pudo haber sido si Banks no hubiera utilizado plataformas digitales para comunicar directamente sus pensamientos.