Música

Platicamos con Cromosapiens: Hip hop de la vieja escuela en la era del trap desechable

Fito. C, Sergio Funk y Jonah en los raps y coros, Jars Man en la producción y mezcla de audio y DJ Ventura en las ruedas de acero, son los nombres que conforman Cromosapiens, un grupo de hip hop cuya misión es retomar ritmos funkys, beats de disco funk y disco, y la estética de las primeras grabaciones de rap, revitalizando este sonido de principios de los ochenta para el público actual, ávido de IG stories y de comentar en Facebook. Cromosapiens es, además, el último acto nacido en el seno del Colectivo Tres G, uno de los nombres más importantes para la generación de una escena de hip hop en la Sultana del Norte, alias Monterrey.

Tres G fue un colectivo fundado por Quid Comba (hermano mayor de Sergio Funk), Jars Man y Tocadiscos Trez, y llevan buena parte de los últimos diez años (o más) siendo un referente del hip hop nacional, enseñando a las nuevas generaciones los vericuetos necesarios para generar productos de calidad de manera independiente, organizando eventos y llevando a nombres claves del hip hop global a tocar a Monterrey, y ayudando a todo tipo de otras labores en su ciudad, desde rentar equipo o hacer videos hasta haber tenido un espacio radiofónico en el FM; además de tener en Jars Man al encargado de hacer la mezcla de audio para la mayor parte de los proyectos más escuchados y de mejor calidad del rap mexa.

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En lo musical, Menuda Coincidencia tal vez sea el nombre más destacado que ha dado Tres G, pero está también el proyecto que hicieran Nukenin Tab y Jars Man, Fito. C como solista, La Sarta de Barbajanes, y el propio Quid Comba. En esa constelación de actos independientes que mantienen una bandera de hip hop consciente y música con vibra positiva, se inserta Cromosapiens, un acto sui géneris en la oferta actual del rap en español, que es una inyección de energía con un mensaje anclado en el viejo adagio de Afrika Bambaataa: “Peace, Unity, Love and Having Fun”. Sacaron un EP de ocho canciones y un remix el año pasado que se llama Lando, y están trabajando en el segundo disco.

Cromosapiens toca este jueves 15 en CDMX, el viernes 16 en Puebla, y el sábado 17 de marzo en Querétaro. Charlé con Sergio Funk y Jars Man sobre su proyecto, sobre algo de la historia de Tres G, sobre su estética musical, sobre el papel de Jars como mezclador oficial del rap en México y más cosas. Checa lo que me dijeron.

Noisey: ¿Me pueden decir quiénes son y qué papel juegan dentro de Cromosomas?
Sergio Funk: Cromosapiens. [Risas].

Jars Man: Yo soy Jars Man, yo soy el productor, ingeniero… de Cromosapiens. Cromosomas son nuestros enemigos. [Risas locas].

Qué quemón we.
Segio Funk: Yo soy Sergio Funk, me encargo de los lyrics. Y los que faltan del grupo son Fito. C, que también se encarga de los versos; Jonah, que canta y rapea; y el DJ Ventura que está en las tornamesas.

La propuesta intenta mezclar funk, tal vez con un poco de raíces afrolatinas, algo relativamente raro. El único referente que tengo en español es Illya Kuryaki. O tal vez no tanto así, pero en español no hay muchos casos de grupos similares.
Jars: De hecho, la inquietud de hacer los ritmos funkys fue primero porque quería hacer latin breaks para las batallas de break y que el [DJ Tocadiscos] Trez las pusiera. Nunca pudimos aterrizar nada él y yo, y yo le seguí moviendo y le mostré los beats que ya estaba logrando a Fito y a Funk, para darle en este tipo de beats y a ver qué salía.

Venimos el año pasado a un evento de Akil [Ammar, rapero de la CDMX con veinte años de carrera] en el Foro Hilvana y tocamos la de “Me encargo”, que fue la primera que logramos. Y la banda respondió súper positivamente y decidimos que podríamos darle por ahí. Entonces la idea es esa: mezclar ritmos funkys y soul setenteros y ochenteros, pero abordados desde una visión rapera. Porque es lo que somos y es lo que hacemos, al final de cuentas. Y pues ya. Básicamente este disco [ Lando], la línea que trae es de la música que sonaba del 79 al 82 más o menos. Pero con ese toque rapero. No es tan latino, como dices, pero sí planeamos que en el segundo haya un poco más de percusiones, para darle ese feeling latino a uno que otro beat porque hemos platicado con b-boys y les gusta el proyecto, también queremos aportar algo para ellos, que era la idea original.

Y en el rapeo, ¿cuál es la intención? Lo que he escuchado es muy apegado a la realidad inmediata, y cosas de la amistad, vibra positiva.
Funk: Para abordar los temas, se va llevando una cosa con otra. Jars llega con la propuesta del beat, y el beat te da cierta sensación y lo platicamos entre los que escribimos, que somos Fito, Jonah y yo, y ahí vamos partiendo tal vez del coro y luego ya teniendo la idea sentada, cada quien desarrolla la lyric según su personalidad.

Jars: La idea básica de los temas es el encontrar tu fuerza interior y explotarla. El no estar mortificado si no encajas en tal cosa o en tal rol que están prescritos. Y no sentir esa presión. Porque vemos gente, tenemos amigos que la neta se la pasan bien agüitados porque siguieron lo que les dijeron. Y pues es como un: “No te mortifiques, tú puedes hacer lo que quieras. Nada más distingue tus cualidades y dale por ahí”.

En la música,¿estás usando samples?
Jars: Sí, samples. Y completo con instrumentos ahí en el software.

El proyecto también tiene una cosa estética, ¿no?
Jars: Sí, para definir el team, el grupo. Estamos con la idea espacial, como en los setenta que lo hacían con la música funk. Imprimir un poco de eso. Estamos trabajando también los personajes, todavía no están muy definidos, pero queremos que sí haya una mitología de los personajes: de dónde vienen, cómo llegó todo. Entonces en un futuro sí me gustaría que tuviera incluso un tipo cómic explicando el rollo.

Funk: Que la gente entienda un poco más del nombre, ya con el tiempo explicarle de dónde viene Cromosapiens. Lo que representa el nombre.

Que no Cromosomas.
[Risas].

Ustedes forman parte de un colectivo con una historia bastante larga en Monterrey. Y de algún modo Cromosapiens es, por decirlo así, el último hijo de Tres G. ¿Qué papel juega dentro de la historia de Tres G?
Jars: Estábamos trabajando con el proyecto de Fito, el de Los Hijos de los días. Ya ves que el trae un discurso más rebel, más de crítica a las injusticias sociales y cosas por ese lado. Pero Cromosapiens en particular no es necesariamente así, sino es más positivo, energía y ese rollo. Dentro de Tres G es el que hemos avanzado más rápido. Porque todavía están trabajando Menuda [Coincidencia; MC decano de Monterrey y también parte de Tres G] Quid Comba [Fundador del colectivo y otro MC decano de Monterrey] y Pues Lee en el de La Sarta de Barbajanes [Uno de los proyectos colaborativos con más tiempo dentro del colectivo]. Ya tienen cinco tracks armados. Y en este caso, nosotros somos dos teams dentro del crew. Ellos se juntan unos días en el estudio; nosotros nos juntamos otros días en el estudio y avanzamos. Obviamente yo les ayudo. Y Ventura también jala con ellos.

Y por lo que dices, están hablando un poco a futuro. ¿Ya tienen canciones grabadas para lo que sigue?
Jars: Sí, ya tenemos cuatro terminadas. Y más beats que todavía están ahí sin abordar. La línea todavía la estoy trabajando. O sea, la línea de este primer EP quedó más o menos sobre la marcha. Fue saliendo así como iba sacando los beats y los que más me iban gustando, que encajaran. En el segundo sí está más evolucionada la forma de la producción porque ahora sí ya le agarré muy bien la onda a los ritmos funkys. Al principio era darle y a ver si salía. Si salía, le seguíamos; si no, intentábamos de nuevo. Y ahora sí ya tengo más afianzada la fórmula, ya me salen y ya hay para escoger y para darle.

Y en el en vivo tienen planeado hacerlo con una banda, con metales y ese pedo.
Jars: Sí. De hecho, primero tenemos planeado grabar unas sesiones de estudio con una banda de Monterrey que se llama Driver, tocan funk. Ellos fueron de los primeros que nos empezaron a apoyar y recomendarnos con promotores de la ciudad. Y nos empezaron a poner en eventos que no eran de rap. Son unos compas con una vibra bien chida y ya hablamos con ellos para armar esas sesiones. La idea es armar rolas de este EP pero con ellos. Por lo menos el bajo, la guitarra y el sinte. Y lo de los metales, también tenemos que ver eso, porque es un poquito más difícil. Pero de entrada, esos tracks que no requieran metales, van para las sesiones de estudio.

Con qué tipo de público ha funcionado más. Me imagino que no necesariamente el rapper ¿o sí? ¿Cómo ha sido la respuesta?
Jars: Sí ha funcionado con el público rapper. Las primeras veces que lo tocamos fue con público rapper.

Funk: Rapeadas totalmente.

Jars: Sí, las primeras venía todavía en los flyers anunciado como Fito, pero tirábamos las rolas funkys a ver qué pasaba. La gente se prendía. Y al otro día estaban: “¡Eh! ¿Cómo se llama esa rola? “¿Dónde encuentro la de ‘No va a a volver’?” y todo el rollo. Y con el público fuera del rap, pues mejor. Porque en general es gente un poquito más abierta a la música. Ya ves que en el circuito hip hop es un poco más estricto. Y que si no eres boom bap, tal vez no te oyen y así. Pero ha funcionado.

Funk: De hecho, por eso se nos ha acercado gente que son músicos, que tocan algún instrumento, que tienen algún grupo y les gusta el sonido. Por la musicalidad que tiene esta clase de beats y todo el proyecto.

Jars: Sí, se abrieron las puertas súper rápido y la gente está bien dispuesta a meternos en sus eventos. Entonces, yo creo que no hemos tenido problema con eso. Al contrario, ha resultado muy favorable.

Ni el funk ni el disco funk son géneros con un público amplio en México. Y generalmente es para DJs o diggers. No necesariamente mucha gente dentro del hip hop está ahí, excepto beatmakers o ciertos estudiosos de la cultura. ¿Cómo ven ese papel que puede tener el funk o el disco funk, ahora que lo están llevando como bandera?
Jars: Una de las principales ideas del proyecto es ayudar a que la gente se acerque a esos ritmos que fueron los que tomó el hip hop en sus comienzos. También parte de los beats están inspirados en los primeros raps. En Kurtis Blow principalmente. Más que nada es eso, abrirles una ventana para que, si no sabían parte de la historia, puedan estar un poquito al tanto de estos ritmos que son parte fundamental del hip hop.

Funk: Sí, ahorita lo que predomina son beats más trap, tal vez un poco boom bap; pero en todo caso, ya las generaciones actuales no echan tanto la mirada hacia lo primero.

Jars: Eso. La idea es aportar la perspectiva para que vean cómo se hizo el rap cuando comenzó. El tipo de rapeo que usamos también es muy parecido al primer rap. Y dar esa contraoferta, ahora que todo está inundado de lo demás, es una decisión que tomamos para que haya más variedad en el rap mexicano y más variaciones de calidad.

Jars, cuéntanos un poco sobre el rol que juegas en la escena del rap mexicano. Mucha gente no sabe que mucha de la música que han escuchado o que consumen, la mano final por la que pasa es tuya. Cuéntanos de ese papel y de los artistas con los que trabajas.
Jars: Se fue dando. Desde con Skool [77], que fue de los primeros trabajos que empecé a mezclar. Y luego con Akil [Ammar], un poco ahí con Bocafloja. [Estos tres raperos, Skool de Guadalajara y los otros dos de CDMX, ayudaron a cimentar las bases de la escena del rap en México la década pasada]. Y la gente en Monterrey me empezó a buscar más. Ya después a nivel nacional, con la misma exposición de los discos del Akil, empezó a llegar gente como los de Homegrown.

El Alex [Malverde] comenzó a hablarme para mandarme trabajo. Lo de Yoga Fire, por ejemplo, el último EP que publicó [La ciudad del diablo], yo lo mezclé casi todo. Rolas como “Homegrizzy Boyz” y todas esas que han sacado sueltas, donde sale Alemán, varias rolas. Los Hood P: el EP que grabaron allá en Monterrey con Merer y con Jin [El Express Play], también lo mezclé yo, ese ya está pero no ha salido. De hecho, en estos dos días, mezclé los beats de la Final de Batalla de los Gallos [La final internacional del certamen más importante de freestyle, que tuvo sede en CDMX el año pasado], de los productores que escogieron Danny [Brasco; beatmaker de Monterrey y uno de los arquitectos del sonido actual del rap en México] y Serko [Fu; MC de los Caballeros del Plan G, y host de Red Bull Batalla de los Gallos].

Y a mí me gusta ese rol. Obviamente es una responsabilidad y la tomo. Y siempre trato de ir puliendo mis técnicas para que todos los trabajos que vayan saliendo, por lo menos en cuanto a mi parte final, sean muy presentables y que suenen bien. O sea, que cuando vayan y lo muestren en otros países digan: “Órale, allá ese nivel técnico ya lo tienen dominado en México”. Y pues yo sí me preocupo mucho. Siempre estoy viendo nuevas formas de mejorar el sonido. Y yo creo que eso va a seguir. Cada vez me mandan más trabajos. Y yo le doy, sin problema. Ah, también mezclé el del Dr. Zupreeme [DJ y productor de La Banda Bastön] con Letra J [MC de Hermosillo y fundador de la marca de street wear Lucky Bastard]. Y he mezclado más cosas, pero no me acuerdo. Los trabajos de Serko, el EP de Hadrián que sacó con Red Bull con beats de Danny [Brasco]. Casi todo lo que saca Danny me lo manda a mí. Entonces varia gente. También mezclé uno de Eptos que hizo con Danny. El de Guerrilleroz de Monterrey también lo armé yo. Lo del Muers [de Dignatarios, de Gómez Palacio]. DJ Javu. El último sencillo de Alemán con Fntxy [“Tantas veces”, para muchos el mejor track de rap mexa del 2017] también lo armé yo. Son muchas cosas, no recuerdo todas.

Sí, tal vez mucha banda no sabe que eres una especie de mezclador oficial del rap nacional.
Jars: [Risas] Sí, poco a poco fui adquiriendo ese rol. Y me gusta.

Tres G es un colectivo, no quiero decir muy apegados (porque no lo sé), pero sí muy conscientes del hip hop y estrictos con ustedes mismos en ese sentido. Para ustedes ¿qué significa eso? Cuéntenme un poco sobre esa relación.
Jars: Nos ha tocado tener ese rol de aportar para la escena, principalmente la de Monterrey, desde los eventos hasta cuando estuvimos en radio, donde informábamos sobre los eventos que iba a haber, hacíamos pequeños reviews sobre los discos que iban saliendo, invitábamos banda y todo ese rollo de promoción y difusión. Y pues eso. Nos ha tocado la fortuna de hacerlo y nosotros seguimos. Sí somos muy estrictos con eso. Si te fijas, nuestro trabajo nunca cambia de personalidad. Sí hay un discurso y en algunos proyectos hablamos de ciertas cosas, como es el caso de Cromosapiens, pero no hablamos en uno de que “Soy bien Gangster” y en el otro de que “Soy bien santo” y en el otro de que “Putas y perico”. Se nota que somos nosotros. No podrías decir: “Ah, es que estos batos le cambian a su rollo”.

Funk: Yo también creo que como empezamos desde morros, en Monterrey era de generar. Porque los eventos los hacíamos entre la misma banda y a nosotros también nos tocó ese pedo: No me llevan a una tocada, yo tengo que armar la tocada, y tal vez yo toco e invito a tal y tal. Nos tocó desde que no había casi escena. Y pues ahorita ya hay eventos y eventos más grandes y gente que viene de fuera pero seguimos con esas ganas de aportar. Cuando teníamos el programa de radio era de los pocos donde los artistas underground tenían exposición, por ejemplo. O cuando nos toca hacer un evento, traer a alguien de fuera también meter actos teloneros que le están dando y que a lo mejor no tienen esa proyección y darles esa plataforma que a nosotros también nos hubiera gustado desde morros, pero tuvimos que armarla.

Jars: Sí, de hecho todavía en eventos que no son nuestros y que caemos a cotorrear, nos toca rentar equipo, llegar y ayudarles a conectar los cables. Y yo ahí ayudarles a la mezcla, que suene bien, y es parte de. Y si uno no lo hace, a lo mejor todo suena gacho y el público no tiene la culpa. El público quiere disfrutar y nosotros estamos conscientes de eso y aportamos, ayudamos en lo que se puede.

Foto tomada del Facebook Oficial de Cromosapiens.

¿Cómo se llamaba el programa y cuánto tiempo duró?
Jars: Se llamaba Boom Box, estaba en D 99, 98.9 FM allá en Monterrey.

Funk: Y duró casi dos años, porque tuvimos una fiesta de aniversario y estábamos planeando la otra y después hicieron cambios ahí en la estación.

Jars: Sí, pusieron al DJ Agustín. Haz de cuenta que el espacio ya estaba calientito, la gente ya lo escuchaba todos los miércoles y hasta nos extendieron el tiempo.

Funk: Sí, al principio fue de una hora y luego fueron dos.

Jars: Y al Agustín lo quitaron del equipo del Cartel de Santa y como él era amigo de los de D 99, le dieron nuestro espacio.

Funk: Pero duró como tres programas.

Jars: O sea, valió madres. La neta la gente allá en Monterrey se disgustó. De que: “Ey, nos quitaron nuestro programa we”.

Funk: El programa ayudaba bastante a hacer comunidad, porque teníamos la libertad de anunciar tocadas muy undeground, pero era una exposición que funcionaba porque la gente escuchaba y sí caía a los eventos. Y los grupos que tenían oportunidad de llevar sus sencillos; obviamente les pedíamos que se escucharan bien, que tuvieran bien grabadas las canciones, para poderlas pasar en la radio. Pero también, por ejemplo, el aniversario que sí alcanzamos a tener una party rapeada, estuvo lleno en un bar de Monterrey

Jars: Estuvo súper lleno, estuvo bien prendido ese rollo también.

¿Qué año fue?
Jars: Eso fue 2009.

Funk: Sí, por ahí. 2009, 2010.

Y en la parte de organizar eventos. Han traído a muchos artistas, buena parte de los artistas españoles que han ido a Monterrey los han llevado ustedes.
Jars: Desde El Chojín que fue el primero.

Funk: Españoles han sido bastantes. Hemos jalado con El Chojín, con Juani[nacka], con Rapsus[klei], con ZPU, con Nach.

Jars: Frank-T.

Funk: Y banda que no es española. Obsesión de Cuba, Doble Filo de Cuba. De los primeros que trajimos fue a Alika de Uruguay, ahorita ya va medio seguido a Monterrey. A DMC con Masta Ace también los metimos en un evento. Ahorita también Anita Tijoux es un referente, pero nosotros la íbamos a traer; tuvimos que cancelar, porque no estaba funcionando la preventa. Y muchos nacionales, de Ciudad de México y otros sitios, los llevamos a Monterrey.

También les ha tocado ver la evolución de la escena, de ser una comunidad pequeña y muy de amigos, a ser un vertedero de memes. ¿Cómo lo ven? Hay una discusión pública más grande.
Jars: Son cosas que tienen que pasar y es bueno que esté pasando. Malo fuera que siguiéramos igual y nadie discutiera nada, y nadie tuviera más notoriedad que otros. Es bueno. Si hoy alguien anda arriba es porque anda haciendo su trabajo bien. Si hay alguien que le tira hate, es porque se está moviendo, como dicen. Y la verdad yo lo veo muy positivo. Obviamente hay cosas malas, pero son las que menos duran. Lo que se está construyendo, se queda y eso es lo importante. Desde que no había nada, ahora eventos grandes en los que están amigos como Trez y mucha gente que conocemos, que hemos visto desde sus primeras tocadas a ya en escenarios muy grandes, en festivales y todo el rollo. Entonces nosotros estamos súper contentos de que esté pasando eso.

Funk: Sí, sobre todo es una escena en la que ya todo está más profesionalizado. Las producciones, el sonido, los shows.

Jars: Sí, todos los trabajos, desde cómo se inician hasta cómo se terminan. El interés por mezclarlos bien, hacer videos de calidad. Ha crecido mucho, ha madurado mucho y yo creo que todavía, obviamente le falta, estamos como a la mitad de un proceso, pero la gente está muy comprometida a eso que falta, se va a dar. Sin problema. Y yo lo veo muy rápido. O sea, el rap mexicano está ganando terreno súper rápido, yo creo que hasta podríamos decir que anda desbancando o ya desbancó tal vez en el habla hispana el gusto por el rap español, y ahora sí la gente consume mucho rap mexicano desde Latinoamérica y desde todas partes de México.

Funk: Sí, yo creo que eso que esté presentado en un formato más pro ayuda para que pueda distribuirse, para que la banda lo consuma, o incluso para que a los artistas los metan en festivales o en eventos de mayor tamaño.

¿Y qué planes para el resto del 2018?
Jars: Pues tenemos planeado lo de las sesiones con Driver, además de sacar un nuevo sencillo. Y posteriormente regresamos a la Ciudad de México y tenemos varias colaboraciones que vamos a hacer. La relación con Tino [El Pingüino] y su familiaridad con los ritmos funkys hace que sea una colabo de pechito. Y también ahí en Monterrey Eptos está cayendo muy seguido, ya le mostré cosas y dijo que sí. Estamos viendo quién más puede quedar ahí.

Funk: Como Jars tiene un chingo de contacto con toda la banda, en cuanto a la escena rapper, sí tenemos varias opciones, por así decirlo, de colaboraciones y también queremos (como se nos ha dado la conecta con bandas y otro tipo de músicos), a lo mejor hacer cosas que no vienen de ese mundo, sino alguien que le pueda meter instrumentos o algún otro grupo.

Foto tomada del Facebook Oficial de Cromosapiens.

¿Algo más que quieran agregar para terminar?
Jars: Hemos notado que la gente no sabía que le gustan estos ritmos porque no se los habían presentado. Entonces, de cierta forma creemos que podemos aportar al rap mexicano con esta variante, pero también a la escena funk mexicana, si es que existe como tal, podríamos aportar un poco para ellos y la verdad este primer trabajo fueron unos primeros pasos y yo creo que lo que viene va a estar mucho mejor

Funk: Yo creo que también empezar a hacer esos puentes, generar esos canales. Porque yo he escuchado comentarios como: “Ah chingá, ¿pero eso es rap?” Y como que les gusta, pero no les gusta normalmente el rap. A lo mejor por lo que está predominando. Entonces hacer esos vínculos para que la banda se acerque y que vea que hay más de una propuesta y también que los músicos se involucren y que el público vea que no nomás están los traperos.

Jars: [Risas]. Y tampoco nos mal entiendan, sí nos gusta mucho el trap.

Funk: Sí, está chido pero a lo que voy es que: ese sonido lo dejan de lado. Es la onda de “¿En serio ese sonido es rap?”. La idea es como mostrar que hay muchas versiones o muchas vertientes ¿sabes? El hip hop se puede interpretar de muchas maneras. Y la idea es que mientras más allá en México, más sana por decirlo así, va a ser la escena.

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Cromosapiens toca este jueves 15 de marzo en La Bipo de Coyoacán, en CDMX. Luego el viernes 16 en Terraza Pulquito en Puebla. Y el sábado 17 en la cantina Gracias a Dios en Queretaro. Síguelos en Facebook y en Instagram.