¿Estás de pésimo humor? Comienza a hornear

Estas semanas han sigo largas —por no decir el 2016 entero—, hace mucho frío, no ligaste durante el fin de semana faltan y, para colmo, un par de días para la quincena.

¿La mejor forma de mejorar un pésimo estado de ánimo? La ciencia dice que saques a la "Chepina Peralta" que llevas dentro, el mandil, la harina, las tazas medidoras y comiences a hornear, una actividad que no solo te dejará kilos de deliciosos panes y pasteles, sino buen humor.

Un nuevo estudio de la Universidad de Otago, Nueva Zelanda, asegura que las actividades creativas cotidianas como cocinas u hornear incrementan el bienestar.

Quizás puedas pasar la tarde —o noche si eres oficinista— horneando y comiendo.

La investigación, publicada en Journal of Positive Psychology, revisó el diario de 658 estudiantes a los cuales se les pidió que llevaran registro de sus actividades diarias y estados de ánimo durante trece días. Después de analizar la información, los investigadores encontraron que en los días seguidos de actividades creativas como cocinas, los participantes reportaron altos niveles de entusiasmo y una sensación de crecimiento personal.

Al igual que cosas como pintar, tejer o escribir, estar dentro de la cocina se encontró como " un medio para cultivar un funcionamiento psicológico positivo".

¿Y quién se puede sentir triste cuando tiene unos deliciosos brownies (espaciales) con mucha cocoa en el horno?

El Dr. Tamlin Conner, psicólogo y autor líder del estudio, dijo en un comunicado de prensa que la nueva investigación resalta la importancia de enrolarse todos los días en actividades creativas: "En nuestra investigación temprana encontramos la aparición de efectos positivos incrementa la creatividad durante el mismo día, pero en nuestros últimos resultados encontramos que no hay un efecto transversal entre los días. Más bien, la actividad creativa de un día puede predecir bienestar al día siguiente.

No es la primera vez que los científicos han explorado la relación entre cocinar y la salud mental. Cocinar u hornear es usualmente utilizado como una forma de terapia que ayuda a mejorar las enfermedades mentales. De hecho, medir ingredientes y seguir recetas también ha sido encontrado como una forma de aliviar desórdenes como el Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad (ADHD, por su siglas en inglés) y reduce la ansiedad.

Así que la siguiente vez que te sientas apachurrado, dañe una oportunidad al horno y comienza a preparar montañas de galletas.