¿Alguna vez sentiste que tu mala suerte siempre estuvo ligada a la Luna llena? Bueno, no lo está y hay un astrónomo que lo está demostrando.
“La Luna es inocente” dice Jean-Luc Margot, un profesional de astronomía planetaria en UCLA.
Videos by VICE
Puede sonar extraño que un astrónomo publique un artículo de investigación en una revista científica de enfermería, pero eso exactamente es lo que Margot se sintió obligado a hacer, exonerar a la Luna de una antigua acusación: que sus fases influencian todo, desde el momento en que suceden los nacimientos hasta la posibilidad de enfermarse. Incluso hoy prevalecen estas creencias entre algunos trabajadores de hospitales.
“Las creencias cuestionables están en la raíz de muchos de los peores problemas de nuestra sociedad” me dijo Margot. “Aunque he tratado de disipar los mitos sobre la Luna, siento que la lección aprendida a partir de creencias erroneas relacionadas con la Luna se pueden aplicar en un contexto más amplio”.
El nuevo de estudio de Margot confirma lo que los científicos han sabido por mucho tiempo: la idea que las fases lunares ejercen influencia en nuestros asuntos es una locura, francamente.
La tradición lunar ha sido parte de la cultura humana desde tiempos antiguos. Hemos erigido monumentos y santuarios para la Luna, hemos adorado dioses y diosas en su cara lustrosa, hemos dibujado nuestros calendarios y plantado nuestros cultivos alrededor de sus ciclos.
También hemos adscrito a un lado siniestro. La palabra “lunático” fue usada por primera vez para describir a una persona que sufre ataques periódicos de locura, alineados con el ciclo lunar. Y luego está el hombre lobo, el que es parte del folklore medieval y se basa en la creencia que la Luna llena engendra al monstruo dentro de nosotros.
Muchos de nosotros ya no creemos en los hombres lobo, pero incluso hoy atribuimos todo tipo de problemas a la luna llena, desde los ataques epilépticos a la ansiedad, la locura y la furia asesina. Si bien la gran mayoría de los científicos coinciden que esto no es más que superstición, muchos estudios de investigación dicen haber encontrado correlación entre la Luna llena y nuestro bienestar. Dentro de estos hay un citado estudio del 2004, el que examinó los registros de hospitales españoles durante dos años y concluyó que un gran número de admisiones por sangrado gastrointestinal ocurrían durante la Luna llena.
“El artículo tiene defectos, pero ha permanecido sin respuesta” me dijo Margot. “algo debía hacerse al respecto”.
Como argumenta Margot en su nuevo paper, el estudio de 2004 recopiló datos y los analizó de manera defectuosa, lo que esencialmente invalida sus conclusiones. Por ejemplo para analizar 738 días de datos en las categorías “hubo Luna llena” o “no hubo Luna llena”, los investigadores emparejaron cada día del calendario con el día correspondiente del calendario lunar. Pero, como explica Margot, el tiempo lunar no corresponde a los días del calendario lunar, particularmente cuando las zonas horarias cambian y tampoco se consideran los cambios de hora. Como resultado, este método introduce variables que pueden influenciar la investigación.
Lo más problemático es que los autores utilizaron cada día 29 del calendario lunar como un día de “Luna llena”. Margot explica que el intervalo de tiempo entre lunas llenas varia desde 29.3 a 29.8 días del calendario. Si bien suena como un detalle trivial, en este contexto particular no lo es.
Margot encontró que en 13 ocasiones los investigadores asociaron la Luna llena con el día 29, cuando debería haber sido el día 30. De los 25 “días de Luna llena” en el estudio, más de la mitad están incorrectos.
Luego de analizar nuevamente los datos de los autores, Margot encontró que no había correlación entre el ciclo lunar y las admisiones al hospital. Luego continuó revisando la literatura científica histórica que mostraba que no hay relación entre los nacimientos y las fases lunares. Tampoco hay relación para el comportamiento criminal, la depresión, los accidentes de auto o los resultados de las cirugías.
Culpar a la Luna de tus males puede ser técnicamente incorrecto, pero aun así, de todos los lugares a los lugares q los que les echas la culpa falsamente este es el que parece más inofensivo. Margot, de todas formas, cree que estas creencias sientan un precedente peligroso.
“Si habitúas tu mente a creer cosas benignas que no están de acuerdo con la realidad, esto se puede propagar a otros partes más importantes de tu vida” dice.
De hecho es cosa de ver el reciente brote de sarampión, la masacre de rinocerontes o la negación del cambio climático para apreciar el efecto desastroso que algunas creencias equivocadas pueden tener en la sociedad.
Y si para sacrificar las falsas creencias tenemos que parar de culpar a la Luna cada vez que tenemos un mal día, parece un buen sacrificio.
Ademas la Luna es asombrosa y ya ha recibido mierda por parte de nosotros durante mucho tiempo.