Bienvenidos a “El Epílogo” donde podrás encontrar lo más relevante de la Eurocopa 2016.
Los encuentros de ayer nos dieron una probada de lo que podría pasar en la siguiente ronda. Fue una serie plagada de emoción, buen futbol y dramatismo —los mejores ingredientes para un buen partido— que echó a perder más de una quiniela, y todo en el nombre del futbol.
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El rey ha muerto, viva el rey
España e Italia nos brindaron, hasta el momento, uno de los mejores partidos de la Eurocopa. Los todavía campeones de Europa se cansaron de tocar la puerta de Buffon, pero el veterano demostró una vez más por qué sigue siendo el titular de “Los Azzurri”; toda una leyenda viviente. Por su parte, Italia desplegó un futbol encantador. Por una parte supo defenderse cuando más asedio recibió por parte de los españoles, y por otra atacó con un futbol dinámico que terminó por sepultar a la madre patria con dos goles.
Al parecer la generación de oro que le dio a España dos Eurocopas consecutivas y una Copa del Mundo se ha terminado, y es hora de un nuevo proyecto que siga los pasos de aquel histórico plantel.
Islandia es el equipo de todos
Cuando en los primeros minutos del encuentro Inglaterra recibió una penalti a favor, la gran mayoría creímos que pintaba para una goliza del lado de los ingleses. Sin embargo, el partido tomó un rumbo shakesperiano cuando en menos de dos minutos los islandeses les sacaron el empate. Los fantasmas volvían a aparecerse para el equipo de la rosa y, como si se tratase de una tragedia del escritor más prolífico en lengua inglesa, los islandeses lograron meter el segundo; ventaja de la cual Inglaterra jamás se repondría.
Fue tanto el coraje, la impotencia y la desilusión (¿en dónde he visto lo mismo?) de los ingleses que ya le buscaron reemplazo a Roy Hodgson, quien renunció a la dirigencia después del encuentro, y piden a Miguel Herrera como sustituto. Que alguien le diga a los ingleses que nunca hay que hablar con la cabeza caliente.