El futbol como motor de la limpieza étnica

El mundo está plagado de historias sobre limpieza étnica, desplazamiento de culturas por diferencias sociales, religiosas, genéticas y demás. Esas cicatrices todavía plagan nuestro mundo y siguen vivas en la memoria colectiva. Pero así como se crearon los monstruos que fueron líderes de estas limpiezas étnicas, también fueron héroes para muchos que compartían sus valores e ideales.

Los hooligans son bien sincronizados para cantar, mover los brazos y hacer cagadero racista.

Videos by VICE

El equipo de futbol de la Estrella Roja de Belgrado fue usado alguna vez como campo de entrenamiento para futuros paramilitares en las guerras de Yugoslavia y Kosovo. Su agrupación ultra llamada Delije, que significa “héroes” en serbio, protagonizó las batallas campales más sangrientas contra sus rivales directos no sólo en el futbol sino en la cultura, geografía y religión. Delije es hasta hoy en día una barra brava de apoyo a su equipo, pero los une el sentimiento de pureza étnica y superioridad racial.

Dentro de Delije han de haber pasado varios líderes, pero ninguno como Željko Ražnatović mejor conocido como Arkan. Si existe alguien en el mundo digno de inspirar una película es él: líder paramilitar a favor de las agendas pro étnicas serbias, servidor de Milocevic en sus últimos años, casado con una cantante famosa serbia pero con hijos regados por todo Europa, protegido por los altos círculos políticos del radicalismo étnico europeo, buscado por la Interpol, asesinado y enterrado como un héroe, pero sobretodo, Arkan fue un apasionado de su equipo La Estrella Roja de Belgrado.

Arkan fue el fundador de Delije, usaba sus conocimientos militares para la organización perfecta y así crear disturbios, organizar a las masas, aterrar a los oponentes, pero sobre todo reclutar nuevos soldados. El 13 de mayo de 1990 llevó a cabo uno de los amotinamientos más escandalosos en la historia del futbol europeo, donde con sólo mil 500 personas redujo en casa a toda la barra ultra del Dynamo de Zagreb, rivales directos y enemigos fuera del campo.


Arkan frente a su casino

El legado de Arkan es infinito en la cultura del radicalismo serbio. Amaba tanto el futbol que después de hacer toda una vida y acumular riquezas con negocios legítimos e ilegítimos en 1996 compró un equipo de futbol de segunda división, el FK Obilić, que con su administración lo subió a la primera división y lo hizo campeón de la liga de futbol de Yugoslavia dos años después.

Se dice que el Obilić logró tal hazaña porque los jugadores de los equipos rivales eran amenazados por el mismo Arkan: si ganaban serían asesinados. Los fanáticos del equipo eran seguidores del mismo Arkan y en sus cánticos sonaban amenazas e incluso usaban armas de fuego durante el juego para aterrorizarlos. La Unión de Federaciones Europeas de Futbol (UEFA, por sus siglas en inglés) prohibió al Obilić jugar en torneos continentales por sus lazos con Arkan.

Hoy en día la Estrella Roja de Belgrado sigue manteniendo su reputación como uno de los equipos más fuertes de Europa, ganando la Champions League en 1991 e incluso una Copa Intercontinental el mismo año contra el Colo Colo de Chile. Pero aún queda la huella que Arkan dejó en el equipo, en sus fanáticos y en los cánticos de Delije.

Arkan murió como todo tipo de persona que pasa por el mundo comiéndoselo a bocados grandes, asesinado por sus mismos benefactores (se dice que fue el mismo Milocevic), en el lobby de un hotel mientras llenaba una boleta de pronósticos. Fue enterrado con todos los honores entre una multitud de 30 mil personas, donde predominaba el amor a la Estrella Roja de Belgrado.

@Pazcabrales

Para leer más sobre esta fina persona no te pierdas estos links en VICE.com:

Hablando con el abogado del Diablo: Segunda parte

La guía de VICE a los Balcanes