No sabemos si sus labios quedaron así por cierto acontecimiento con Chris Brown (y no nos echen la culpa de la mala broma: a final de cuentas, ella es la que no ha dejado al rapero) o por una razón propia de un dermatòlogo tan profesional como los que tenía Michael Jackson: una mujer que estuvo en un concierto de Rihanna probó el lipstick emblema de la artista, RiRi Woo, dijo que racias a su contacto bucal… se contagió de herpes.
La mujer, llamada (y esto es maravilloso) Starkeema Greenidge, demandó ya a la artista y a su marca, misma que se distribuye por el gigante del maquillaje Mac, por semejante atropello viral.