Ayer el gobierno subió el IVA tres puntos y los mineros cabreados tomaron las calles de la capital en protesta por el recorte del 60% de sus subvenciones para el 2012 y por la falta de cualquier plan de rehabilitación en el sector. Por desgracia, no hubieron lanzacohetes, pero sí una batalla campal con cargas, contraataques, detenciones y gas lacrimógeno.
Fotos de Felipe Hernandez.
