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El fotógrafo Li Wei levita en su performance de debut en los EE. UU.

Observa la doble performance del artista en el museo Ringling.
To Fly, Li Wei. Todas las imágenes cortesía del museo Ringling

Con ayuda de alambres, andamios y grúas, el artista de Beijing Li Wei voló a más de 30 metros de altura sobre el museo Ringling de la mansión de Ca’ d’Zan para presentar una obra consistente en un híbrido de fotografía y performance de alto riesgo. Luego se puso un espejo por debajo del cuello cerca de una réplica del David de Michelangelo para crear la ilusión de que su cabeza flotaba en el aire. Los dos proyectos, To Fly y Mirror, constituyeron la performance de debut del artista en los EE. UU. el pasado noviembre, como parte de la exposición del museo que reúne arte contemporáneo chino de fotografía y vídeo, titulada  Seeing the Unseen.

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“La gente no está acostumbrada a ver este tipo de fotografía, por eso siempre creen que estoy haciendo una película”, dijo Wei en una entrevista con The Creators Project, donde nos hablaba sobre su interés en crear ilusiones visuales que desafían a la gravedad y demuestran los límites entre la realidad y la fantasía. En sus obras anteriores, se ha convertido en un cohete en forma de Buda sobre Suiza, ha saltado hacia fuera de edificios de elevadas alturas, ha plantado su cabeza en un lago de hielo y ha transportado a un grupo de niños sobre sus hombros. Con la performance en el Ringling, continúa desafiando a la percepción de la verdad por parte del espectador.

Las fotografías de las performances To Fly y Mirror han pasado a formar parte de la colección permanente del museo Ringling. Haz clic aquí para ver el vídeo de cómo se llevaron a cabo y observa a continuación unas imágenes alucinantes del resultado de las artimañas de Wei para desafiar a la física.

To Fly, Li Wei.

Mirror, Li Wei

Mirror, Li Wei

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