El problema del trabajo esclavo en la industria camaronera es peor de lo que parecía

A principios de este año, la Associated Press realizó una investigación encubierta sorprendente que descubrió que los mariscos capturados por los esclavos en Myanmar estaba llegando a las estanterías de los supermercados occidentales. Pero ahora, la AP dice que una mayor investigación ha revelado que los restaurantes y tiendas, incluyendo a minoristas globales supuestamente con conciencia, como Whole Foods, también están vendiendo camarones pelados por esclavos.

El camarón se ha rastreado a las fábricas de procesamiento en Tailandia. Estas fábricas (simples cobertizos) son lugares horribles donde los niños y los adultos trabajan 16 horas al día en condiciones infernales sin posibilidad de escape. Y Whole Foods no es el único; el camarón pelado por esclavos se ha encontrado en los puntos de venta y restaurantes en los 50 estados, según el informe. Estamos hablando de Wal-Mart, Petco (sí, el camarón se abrió camino en los alimentos para mascotas), Red Lobster y Olive Garden.

No estamos utilizando la palabra "esclavo" a la ligera. La investigación reveló que estos trabajadores son golpeados, son insultados, son llamados no por nombres sino por números, son amenazados, se les niega la atención médica, son privados de alimentos… supongo que queda claro. La palabra horrible ni siquiera empieza a describir la situación.

Los periodistas siguieron a los trabajadores en la Gig Peeling Factory (ahora cerrada), un cobertizo de pelado de camarón ubicado a una hora al norte de Bangkok, y la describió de la siguiente manera: "En el interior del gran almacén, los baños se desbordan con heces, y el olor pútrido de aguas negras flota desde una alcantarilla abierta a las afueras de la zona de trabajo. Los niños pequeños corren descalzos por los dormitorios sofocantes. Familias enteras trabajan lado a lado en las filas de los mostradores de acero inoxidable apilados con tinas de camarones".

Si alguna vez has pelado camarón, sabes que no es divertido. Pero hacerlo durante 16 horas al día en condiciones miserables es otra cosa. Los trabajadores solo piensan en escapar, pero muchos fueron literalmente vendidos al cobertizo de Gig y no pueden comprar su libertad, dice el informe.

Los salarios de los trabajadores en estos cobertizos están vinculados a la cantidad de camarones que pueden pelar en una hora. Un trabajador, Tin Nyo Win, y su esposa le dijeron a AP que pelan cerca de 80 kilos de camarón por sólo $4 dólares al día, todo esto mientras el supervisor los abofeteaba e insultaba. Según el informe, en las instalaciones de pelado de Gig: "17 niños pelaban junto con adultos, a veces llorando, en las estaciones donde la pintura desconchada de las paredes y los suelos lisos eran devorados por el agua salobre". Los trabajadores se despiertan a las 2 de la mañana para empezar a trabajar; los niños se despiertan a las 3 de la mañana. Los trabajadores dijeron que estaban encerrados en la fábrica y los que intentaban escapar eran localizados y golpeados.

Según la AP: "Una mujer embarazada de ocho meses abortó en el suelo del cobertizo y se vio obligada a seguir pelando por cuatro días con una hemorragia. A un niño inconsciente se le negó la atención médica después de caer cerca de 3 metros sobre el piso de concreto. Otra mujer embarazada escapó solo para ser rastreada, arrastrada a un auto por el cabello y esposada a un compañero de trabajo en la fábrica".

Llegamos a Whole Foods para obtener su versión de los hechos. Su representante, McKinzey Crossland nos dijo que la compañía tiene "tolerancia cero para los abusos contra los derechos humanos". Como resultado de la investigación, dijo que Whole Foods ahora ha "investigado nuestra propia cadena de suministro, yendo más allá de nuestras auditorías de terceros sobre instalaciones de procesamiento mediante la realización de nuestras propias inspecciones in situ de las instalaciones de la Unión tailandesa". Según esa auditoría, Whole Foods dice: "Estamos seguros de que el camarón que le suministra la Unión tailandesa a Whole Foods Market no vino de una planta de procesamiento ilícito, ni tampoco compramos camarones de instalaciones de pelado. También nos sentimos alentados por la decisión de la Unión tailandesa de llevar todo el procesamiento de camarones dentro de la empresa en un esfuerzo para garantizar la transparencia y la plena supervisión de su procesamiento de camarones, e instamos al gobierno de Tailandia para regular y hacer cumplir las cuestiones de derechos humanos y laborales dentro de su país".

Walmart también respondió a nuestra pregunta diciendo: "Estamos conscientes de la historia de Associated Press, y estamos horrorizados por las condiciones y el trato de los trabajadores que los reporteros revelaron… La contratación ética y el tratamiento de los trabajadores de la industria en su conjunto es muy importante para nosotros". La representante de la empresa, Marilee McInnis, dice que están "activamente involucrados en trabajar con organizaciones no gubernamentales, empresas del sector privado, proveedores y gobierno para encontrar soluciones".

Dada la magnitud del problema según informa AP, esperemos que las respuestas de estas empresas sean solo el comienzo de una corrección a un problema sistémico que requiere nuestra atención, ahora. Como lo puso uno de los trabajadores en Tailandia, cuyo nombre no fue revelado para proteger su seguridad: "A veces, cuando estábamos trabajando, las lágrimas corrían por nuestras mejillas porque era tan cansado que no podíamos soportarlo. Estábamos llorando, pero nos mantuvimos pelando camarones. No podíamos descansar… Creo que las personas son culpables si comen el camarón que pelamos como esclavos".