España es un país en el que desde hace tiempo se han dado las coyunturas necesarias para que las teorías de la conspiración tengan una amplísima difusión y un gran éxito, surgiendo así sus propios canales y liderados por unos teóricos altamente consolidados.
Seleccionarlos y conseguirlos a todos no ha sido fácil. Finalmente, para este reportaje han accedido a aparecer los líderes de la conspiración en España de cada una de sus plataformas: Santiago Camacho por la televisión, JL Camacho por YouTube, Mitoa Edjang por la radio y Luis Carlos Campos por los blogs. Casi todos ellos, además, también han publicado libros; la crema para los autodenominados “insaciables buscadores de la verdad”. Como periodista tengo que confesar que jamás me habían facilitado tantosoff the recordsen tan poco tiempo. A continuación, lo publicable.
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La diferencia entre la verdad que ellos dicen y la que nosotros proponemos es una cuestión temporal; sólo hace falta tiempo para que el péndulo caiga de nuestro lado
JL Camacho es el autor de una web, MundoDesconocido.es, cuyo canal de YouTube tiene casi 800.000 suscriptores y una media de más de 200.000 visualizaciones por cada vídeo.
Su influencia le ha permitido dar el salto editorial y ya tiene publicados dos libros: “La conspiración reptiliana” y “Proyecto Mesías” . En España es, probablemente, el más carismático y seguido portavoz del mundo de la conspiración.
VICE: ¿Qué fue lo que hizo que te interesaras por este mundo?
JL Camacho: Yo comencé en el mundo del misterio básicamente por una serie de experiencias que tuve en mi niñez con la cuestión de los ovnis, de avistamientos… nadie me daba respuestas de qué era aquello y digamos que desde los siete años yo empecé a tener curiosidad sobre aquello que no nos estaban contando.
La teoría de la conspiración, más que una teoría debería ser casi una tesis… y en ocasiones es mucho más sólida que la propia versión oficial
Cuando empiezas a derivar y derivar, te das cuenta de que el misterio es como una especie de campos unificados y llegas como a una especie de paisaje de fondo que es la teoría de la conspiración, que más que una teoría debería ser casi una tesis y en ocasiones es mucho más sólida que la propia versión oficial.
Eso me fue llevando de una cosa a otra, y a otra… y te das cuenta de que, en ese extraño mundo del misterio, hay muchas cosas que están conectadas entre sí; lo único que hay que saber es coger los cables y enlazarlos correctamente.
¿Te dedicas a ello profesionalmente?
Sí. Yo durante 24 años estuve trabajando para la industria química, y hubo un momento, debido a los vídeos que yo hacía, que tuve que tomar una decisión. Fue un punto de inflexión: tuve que decir… o sigo trabajando en mi trabajo de 24 años y continúo así hasta el fin de mis días… o le doy un golpe de timón a mi vida y me dedico a hacer esto que me gusta.
Dedicarme a este mundo fue una de las decisiones más bonitas que he tomado en mi vida
Me fui de mi anterior trabajo a la francesa, prácticamente de un día para otro. Les dije: “Oye, que mañana no vengo. Me haces el finiquito, la parte del mes… que yo mañana no vengo”. Aquello fue… imagínate. Y comencé esta aventura en solitario y me dije: “bueno, pues si va bien, bien… y si no va bien, pues también bien”.
Pensé que conseguiría que las cosas funcionaran a mi favor si no en una cosa, en otra. Hay que saber utilizar esa magia que tenemos y que nos permite mover el universo para cubrir nuestras necesidades. Y la verdad que, de aquellos años a esta parte, la decisión que tomé fue una de las más bonitas que he tomado en mi vida.
Eres el único que he encontrado que vive al 100% de esto…
Bueno… estoy más diversificado en otro tipo de cuestiones totalmente ajenas a la conspiración. Se trata de un proceso de diversificación. Por consiguiente, me permite tener una calidad de vida razonable, no me quejo. Vivo bastante bien.
¿Cómo accedes a la información para luego elaborar o exponer las teorías?
El proceso comienza con un trabajo de base. Digamos que, cuando ya tienes muchos datos acumulados, y yo tengo la suerte de tener una muy buena memoria, cuando sigues leyendo y aportando nuevos datos, eventos que suceden… cosas curiosas, cosas extrañas… efectos… y coges todo y empiezas a amalgamar te das cuenta de que tiene un sentido lógico.
Ellos tienen una enorme agenda que parece ser que tiene un punto de inflexión, que es el año 2020. En esa fecha tienen que tener muchas de las páginas de esa agenda finiquitadas
No tienes por qué ser más listo que una u otra persona, sino que sencillamente subes un poquito más alto en la montaña y puedes ver más paisaje. Y dentro de esa vista del paisaje, de fondo, llegas a conclusiones que gente que está por debajo de esa perspectiva no las puede tener. Nada más.
¿Tienes alguna fuente de información de referencia, buscas en internet, tienes personas que te van diciendo cosas…?
Tengo colaboradores, principalmente son amigos a los que siempre les ha interesado el misterio. Me envían documentación, información, me envían datos que permiten enlazarme unos con otros… me ayudan algunos de mis vídeos a incluir ciertos puntos de vista o ciertos matices con un aderezo que al final permiten crear esos vídeos en los cuales trato de intentar que la gente acceda a esa información a la que no es tan fácil acceder.
Tengo ciertas sospechas de que ciertas loterías a nivel estatal sean al 100% limpias
¿Cuentas con acceso privilegiado a algún tipo de datos?
Tengo algún acceso privilegiado a datos, pero evidentemente esas fuentes no las puedo revelar por dos motivos: en primer lugar, por la persona o grupos de personas que me los revelan; y en segundo lugar porque, éticamente, no entra dentro de mis planes romper la confidencialidad de nadie.
¿Has elaborado alguna teoría de la conspiración cuyo contenido sea a raíz de una investigación 100% tuya?
Sí. Efectivamente, tengo ciertas sospechas de que ciertas loterías a nivel estatal sean a los 100% limpias. Nos damos cuenta que la conspiración se encuentra a todos los niveles, en todas las instituciones públicas, en muchas instituciones privadas… y de repente y misteriosamente, como si fuese una especie de ángel de la justicia, vemos que ciertas organizaciones que se dedican a esas loterías las consideramos públicamente como si fueran como la virgen María, de una pureza absoluta.
Los grandes medios están controlados por esas mismas fuerzas que son las que planifican las grandes conspiraciones
Pues yo creo que no: investigando los estatutos de esas organizaciones, ciertas cuestiones e incluso los datos y premios que han entregado, me doy cuenta que hay cosas que no encajan. No encajan. Y estoy investigando esa teoría que puede ser un auténtico bombazo. Estamos trabajando en ello y tenemos que tener los datos bien sólidos como para poder lanzar públicamente lo que tenemos preparado que es una auténtica bomba. Ya veremos.
¿Cuál es, para ti, la mayor conspiración que existe?
Me atrevería a decir que una de las más grandes es la conspiración de todas las exploraciones del espacio.
La conspiración del espacio está llena de lagunas. Nos damos cuenta de que cuando una nación llega a la Luna las fotos son de un color, su aspecto es de otro… cuando llega otra nación las rocas son distintas y su suelo es ocre… cuando mandan misiones a ciertos planetas o satélites, vemos que existen en esos lugares estructuras demasiado regulares como para pensar que la naturaleza, caprichosamente, ha obrado esas estructuras que parecen más bien construcciones artificiales que cualquier tipo de capricho natural.
La diferencia entre la verdad que ellos dicen y la que nosotros proponemos es una cuestión temporal; sólo hace falta tiempo para que el péndulo caiga de nuestro lado
Si lo intentamos comparar con lo que tenemos en la Tierra nos damos cuenta que no hay ejemplos similares… y nos vamos a otros planetas o satélites y vemos que ahí existe algo de fondo que yo estoy absolutamente convencido que las grandes organizaciones que se dedican al espacio saben perfectamente qué hay.
Entre la URSS y Estados Unidos hubo corporativismo al más alto nivel en la Guerra Fría… incluso hay documentos desclasificados de Kennedy que así lo demuestran. Por consiguiente, podemos pensar que una de las grandes conspiraciones es el gran enigma de lo que hay fuera, en el espacio. Ese espacio profundo en el cual ellos tienen el control total y absoluto de toda la información.
¿Y la teoría que más debería de saberse?
Pues está principalmente relacionada con los últimos eventos que ha habido desde el año 2000. Y cuando hablo de eventos hablo de eventos parecidos al 11S, al 11M, el 7J, unos atentados en París, en Bélgica, extrañas ‘primaveras árabes’ que ocurren de repente y todos se levantan… cosas muy curiosas que parece que obran en base a una especie de agenda que van recorriendo milimétricamente para llegar a un año en concreto de convergencia o un punto final que tenga la oportunidad de verlo a nivel económico y político que es el año 2020.
Ellos tienen una ventana de fondo con un objetivo en el 2020, año en el que tienen que llegar entre otras cosas a la desaparición del dinero en efectivo y que solo exista el dinero digital, una unificación política más férrea, una esclavización y un control de las personas mucho mayor, una aceptación de esas políticas de control…
Ellos tienen una enorme agenda que parece ser que tiene un punto de inflexión que es el año 2020. Ahí, o en esa fecha, tienen que tener muchas de las páginas de esa agenda finiquitadas.
¿Te has enfrentado a algún problema serio por dedicarte a esto?
Sí. Ha habido ciertas organizaciones que me escribían diciéndome que se sentían indignados porque estaba haciendo afirmaciones que no eran objetivas.
¿Te llegaron a amenazar?
No. Me decían: “oye, esto que nos estás contando no es así… no es de esta manera”. Entonces yo, en aquellos correos que les escribía, les explicaba todas las fuentes, de dónde venían mis datos, de manera mucho más objetiva, y ellos afortunadamente acaban entendiendo que yo no era el ideólogo sino que detrás hay un trabajo de fondo que no partía de mí. En general, intento mantener siempre un gran respeto tanto con unas u otras organizaciones, sean más benévolas o sean absolutamente terroríficas.
Si los hechos que cuentas son tan relevantes y susceptibles de interesar a todo el mundo, ¿por qué parece que la mayoría de vosotros no salís de internet?
Porque los grandes medios están controlados por esas mismas fuerzas que son las que planifican las grandes conspiraciones. Entre ellos existe corporativismo… no digo yo que alguno se escape, pero las principales fuerzas de información están o son afines a esos intereses.
Los teóricos de la conspiración, ¿os conocéis entre vosotros?
Por lo general sí. La mayoría de nosotros nos conocemos más, otros menos, otros de primera mano… pero entre nosotros existe un cierto contacto.
Un teórico de la conspiración se distingue, sobre todo, por no creer en casi nada. Entonces, ¿en qué cree un teórico de la conspiración? ¿En qué cree JL Camacho?
No es un “creer en casi nada”; es dudar de la versión oficial. ¿Por qué dudamos? Pues mira, algo tan sencillo como si ellos dudan de nosotros, evidentemente nosotros tenemos que dudar de ellos.
Y además nos han dado pruebas constantemente de que tenemos y que casi es sano y obligatorio dudar de ellos… si es que su honradez se ha puesto en tela de juicio constantemente. No hay más que abrir un periódico.
¿Dispones de alguna información molesta y sensible que te hayas guardado por miedo?
Claro, claro que dispongo de esa información. Pero hay un marco legal cada vez más inflexible y, si yo publicase esa información sería como si yo pusiese un rifle en mi pecho y disparara.
Entonces tengo una actitud inteligente con la cual mantengo esa información reservada de manera personal, no porque no quiera difundirla sino porque no puedo, y me sirve como referencia para futuros trabajos y proyectos.
¿Ha habido alguna información que hayas tratado asumiendo un alto riesgo?
Sí, sí. Ha habido varias: ciertas teorías que desarrollé sobre ciertas conspiraciones globales y por supuesto la difusión de ideas contracorriente, contra el pensamiento único, ha supuesto en no pocas ocasiones más de un pequeño disgusto.
En el último número de Muy Interesante publican un reportaje titulado ‘En la mente del conspiranoico’ en el que dicen cosas como que “Las teorías de la conspiración son muy atractivas porque dan sentido a un mundo que parece caótico” y que “La clave del éxito de ellas es una pizca de verdad en un caldero de fantasía”. ¿Cómo valoras estas afirmaciones?
Partimos de la base de que Muy Interesante es una revista más del aparato que el Boletín Oficial del Estado.
Es una revista que obedece a unos intereses políticos concretos y tiene una línea editorial hartamente conocida en la cual el viejo axioma de que lo que parece muy interesante resulta que es lo más aburrido que suele reflejar no sólo en sus titulares sino en su contenido.
Con lo cual, en un mundo en donde los problemas crecen y desde luego se demuestra cada día que la conspiración institucional existe debido a la enorme cantidad de casos de corrupción… decir que la conspiración es eso que tú me dices que aparece en ese titular es intentar meter a la gente una idea tan infantil como que vivimos en el mundo de Bambi.
Cada dos por tres nos están dando motivos suficientes como para dudar de esa verosimilitud. Lo que pasa es que los grandes medios de comunicación trabajan, son financiados, y funcionan en muchas ocasiones con los intereses políticos de esas organizaciones que al final acaban llevando el poder.
Parece que para los medios masivos son como una especie de loquitos que hay ahí diciendo cosas muy extrañas y que, aunque sea para entretenerse, que tengan cuidado porque hacerles caso puede ser peligroso…
Lo que es realmente peligroso es intentar sostener el pensamiento único, de tal modo que cualquier cosa que discrepe de él y que transmiten los grandes medios de comunicación es considerado por los mismos como una especie de locura.
Y yo me pregunto: ¿desde cuándo dudar de las informaciones que nos están entregando de manera oficial es insano, peligroso, malo? Desde el momento en el cual existen intereses para que todo el mundo piense de la misma manera diciendo que aquel que no está apoyando la versión oficial es que no está bien de la cabeza, cuando nos damos cuenta de que, con el paso del tiempo, muchas de las cuestiones que nosotros estábamos diciendo tienen un fondo de realidad.
Al final, la diferencia entre la verdad que ellos dicen y la que nosotros proponemos es una cuestión temporal; sólo hace falta tiempo para que el péndulo caiga de nuestro lado.
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