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La ciencia detrás del más convincente fantasma creado con efectos especiales

La magia se define por sus secretos. Un mago nunca hará dos veces el mismo truco y nunca revelará cómo lo hizo. Si los miembros de la audiencia quieren saber cómo es que se llevó a cabo un truco, cuando sepan la solución van a desear no haberla sabido.

¿Por qué? porque la solución es muy raramente igual de impresionante o inteligente que el efecto creado. El clásico truco de levitar a una mujer, por ejemplo, se lleva a cabo con una máquina elevadora que está escondida tras la cortina del escenario. No importa cuán ingeniosos sean los trucos, la solución siempre los desmitifíca. Tomen por ejemplo la famosa ilusión de “volar” llevada a cabo por David Copperfield en los 90’s.

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La solución fue revelada por su creador, John Gaughan, como una serie de cables que él patentó en 1993. Por una parte se puede apreciar la destreza técnica a la hora de crear un efecto tan dinámico, pero al final del día es tan sólo un conjunto de cables. David Copperfield es más como Cathy Rigby haciendo de Peter Pan que como Harry Houdini.

Imagen: US Patent & Trademark Office/Google

La ilusión fantasmal de Pepper es diferente. La solución es tan maravillosa como el truco mismo. Halloween es un excelente momento para discutir cómo gracias a la ciencia es posible que los fantasmas caminen entre nosotros.

El ejemplo más famoso de los fantasmas de Pepper debutó en la casa embrujada de Disney en 1969. En la mitad del paseo, un cuarto completo de fantasmas transparentes bailan música proveniente de un órgano. Otro grupo de fantasmas desaparece y aparece en la mesa del comedor donde se está llevando a cabo una fiesta de cumpleaños. Sobre ellos, dos pinturas vuelven a la vida, representando un eterno duelo.

Cuando abrió esta atracción este efecto especial confundió a todos quienes lo vieron, incluso a los magos, quienes deberían saber cómo funcionan estas cosas. Pero pese a esto, la ilusión no era una innovación tecnológica, sus principios fueron concebido hace cientos de años; Giovanni Battista della Porta escribió sobre este fenómeno en su libro Magia Naturalis de 1584.

Funciona de la siguiente manera: se coloca un pedazo de vidrio en un ángulo adecuado, frente al cuarto o escenario donde está el espectador. El vidrio refleja un segundo cuarto que está fuera del escenario, entonces cuando los espectadores miran hacia el escenario, lo que ven es una imagen compuesta; el cuarto frente a ellos y el reflejo del segundo cuarto que está fuera del escenario. Si el espejo está alineado de forma correcta, la composición es perfecta. Abajo hay una serie de diagramas visuales que muestran cómo funciona esta ilusión en situaciones controladas. El cuadrado rojo representa la visión de los espectadores y el cuadro verde representa el vidrio. En la primera imagen, el cuadro fuera del escenario está oscuro. No vemos ningún reflejo en el vidrio, por lo tanto no vemos ningún fantasma.

Imagen: Wikipedia

La siguiente imagen muestra qué sucede cuando el cuarto fuera del escenario es iluminado. Ahora el espejo muestra el reflejo y se crea una imagen compuesta muy convincente.

Imagen: Wikipedia

La ilusión fue re descubierta a mediados de la década de 1800 por los científicos británicos Henry Dircks y John Pepper; ellos inventaron y popularizaron el efecto al facilitar que se pudiera llevar a cabo en el escenario de un teatro. Abajo puedes ver el dibujo hecho por un artista de Recreative Science, un revista científica de comienzos de 1860. Imagina ver a Jacob Marley o al fantasma del padre de Hamlet en un teatro victoriano y quedar fascinado.

Imagen: Instructables.com

Los miembros del equipo creativo de Disney utilizaron la técnica de Pepper a una escala mucho mayor. Instalaron grandes trozos de vidrio para reflejar dos conjuntos de fantasmas hechos con animatronics. El primer conjunto está directamente sobre las cabezas de la audiencia.

Imagen: ImagineeringDisney.com

El segundo conjunto de fantasmas fue instalado directamente bajo los pies de la audiencia. Fíjate como en las fotografías todo está pintado color negro, salvo los fantasmas. Esto asegura que el vidrio reflejará los fantasmas y no la maquinaria utilizada para que se puedan mover.

Imagen: LongForgottenHauntedMansion

En estos días, los fantasmas de Pepper son utilizados para crear fantasmas completamente distintos, los “hologramas” digitales de músicos muertos que cantan y bailan al lado de músicos vivos. Digital Domain recreó al fallecido Tupac Shakur en el escenario de Coachella el año 2012 al proyectar una imagen de alta resolución sobre un vidrio y luego reflejando esta imagen en una trama de mylar. El fallecido Michael Jackson hizo una aparición en los premios Billboard del 2014 con una técnica similar. Pulse Evolution utilizó seis poderosos proyectores para cubrir todo el escenario, dandole al Michael virtual la opción de moverse libremente y llevar a cabo su característicos movimientos de baile.

Esto conlleva una serie de preguntas éticas y abre la puerta a una extraña industria. ¿Por qué no un John Lennon digital? ¿O un Kurt Cobain digital? ¿O un Elvis Presley digital girando por el mundo? Los fantasmas de Pepper seguirán entre nosotros, asegurando que las personas muertas puedan vivir y hacer shows perpetuamente, lo quieran o no.