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Las frustraciones de un antiguo fanático adolescente de Wanderlei Silva

Como sucedió con muchos, mi introducción al deporte más fascinante del mundo, las artes marciales mixtas, fue a través de las primeras iteraciones del reality show de UFC, The Ultimate Fighter —un programa que, me tempo, está ya cerca de llegar a su fecha de caducidad.

Un adolescente inquisitivo y con un gusto por la investigación para satisfacer mi sed de conocimiento —que a veces llegaba a niveles de obsesivo compulsivo— tropecé con la floreciente escena de MMA en Japón a través de foros tales como el UG y Sherdog, y de inmediato quedé cautivo de Pride FC y su extenso listado de peleadores super estrellas y personajes excéntricos. Junto con el aullador Quentin “Rampage” Jackson, el absurdamente resistente Fedor Emelianenko y Antonio Rogeiro Nogueira de quijada de piedra también, Mirko Cro Cop y Wanderlei Silva eran mis dos peleadores favoritos.

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Cuando ambos entraron al cuadrilátero de Pride, mientras se escuchaba “Wild Boys” de Duran Duran y la ahora malafamada “Sandstorm” de Darude, el 10 de septiembre de 2006 durante la semifinal de pesos completos del Grand Prix de Pride –la segunda pelea entre los dos después de un encuentro de “reglas especiales” que terminó como empate en 2002— fue muy difícil elegir a un ganador ya que los dos hombres eran universalmente respetados y adorados entre la amplia fanaticada de las artes marciales mixtas. Cuando el peso pesado Cro Cop puntuó la pelea con una de sus nocauts via patada a la cabeza en la Super Arena Saitama, uno sería un desconsiderado si no respetar los esfuerzos del perdedor Silva al ponerse a pelear contra hombres mucho más grandes que él con la esperanza de crear su propia historia de David contra Goliat.

En septiembre, Fightland me envió a cubrir la primera ronda de la edición inaugural del Grand Prix mundial de peso abierto del Rizin Fighting Federation –una de las encarnaciones de Pride, después de que cerró en 2007. Tanto Silva como Cro Cop estaban entre los nombres involucrados en el torneo, y solo este último peleó aquella noche.

Después de la habilísima victoria por sumisión contra Hyun Man Myung, tan sorprendente como inesperada, el kickboxer croata se dirigió con mucho respeto a Silva e intentó organizar su siguiente pelea en la próxima ronda en el torneo durante lo que resultó ser un viaje en auto de 15 minutos junto con Nobuhiko Takada y Nobuyuki Sakakibara. A pesar del planteamiento torpe, los fanáticos estaban emocionados ante la posibilidad de una tercera pelea entre las dos leyendas de Pride.

Las negociaciones entre las dos partes fueron exitosas y el par estaba listo para enfrentarse en un perfecto viaje nostálgico el 29 de diciembre en los cuartos de final del torneo de peso abierto de Rizin. Cro Cop había instigado este encuentro, pero Silva había estado pidiendo a su antiguo rival desde hacía tiempo. De hecho, Silva pasó tanto tiempo durante ese evento echando rollos, constantemente buscando pleitos con gente como su archirrival Charles “Krazy Horse” Bennett (su nuevo apodo es “Felony”, “Crimen”); un hombre diminuto en estatura —quizá eso explica por qué es tan fácil irritar al Axe Murderer— pero de personalidad enorme.

Aceptando la especie bizarra de artes marciales mixtas que ofrece un torneo de peso abierto —los japoneses, claro, son los maestros para montar una noche de buenas peleas exóticas— muchos de los fanáticos que ansían echar un ojo a la época dorada de la MMA, estaban emocionados ante la posibilidad de Silva vs. Cro Cop no obstante su edad y los años sumados de desgaste. Sin embargo, cualquier esperanza de que este viaje a mediados de los dos miles sucediera, terminaron en el tacho de la basura cuando Cro Cop reveló que Silva se había retirado de la pelea con menos de un mes de anticipación.

Cro Cop fue muy poco cordial en su crítica a la decisión de Silva de retirarse del combate; lo llamó “perra”, “gallina” y arracó una hoja del libro de los hermanos Díaz cuando dijo que Silva era un “vato miedoso”. Ah, y Cro Cop dijo también que cachetearía a Wanderlei si se aparecía en el siguiente función de Rizin. No es muy inteligente insultar a Silva, dada su proclividad a la violencia y su indiscutible suceptibilidad —una combinación corrosiva. Después de todo, le apodan el Asesino del hacha.

Según ha sido su estilo actual, la leyenda viva brasileña mandó una respuesta verborragica en su idioma natal. Traducida por Guilherme Cruz, de MMA Fighting, un Silva con bigote dijo: “Mi recuperación, no pude llegar a estar al 100 por ciento para esta pelea. Soy un profesional: nunca pelearía contra Mirko o contra nadie sin estar preparado. Pero lo que me soprende es que este croata, este tipo Mirko Cro Cop, me llamó el mejor del mundo, una leyenda me dijo a la cara, pero luego detrás de una computadora se pone a decir todas estas tonterías.

“¿Qué tipo de hombre eres si dices toda esa tontería en línea pero no me lo dices a mi cara? ¿Solo eres hombre frente a la computadora, cobadre? ¿Con quién crees que estás hablando? No te preocupes. No será ahora, pero te va a llegar la hora. Sé muy bien cómo atraparte. Sé que me tienes miedo, cobarde”.

“Me ofrecieron mucho dinero, me ofrecieron un millón de dólares”, dijo Silva. “Podría entrar y ver lo que pasa. Si peleó 30 segundos o un minuto recibo mi dinero igual. Pero soy un profesional, derecho, y nunca lo haría sin estar al 100 por ciento. Todo el mundo sabe que estoy recuperándome de una lesión seria. Estoy entrenando bien y entreno para regresar a mi forma de antes, a ser el verdadero ‘Asesino del hacha’. No voy a pelear solo por pelear, peleo para ganar. Silva está de regreso. Espéralo”.

Silva se lesionó cuando lo atropelló un auto en mayo y dice seguir sufriendo los efectos de esa colisión. Es difícil dudar de la legitimidad del razonamiento de Silva, dada su actitud y la cantidad de veces que ha peleado contra oponentes duros, del más alto nivel con varios problemas en el pasado. Pero mi molestia es que Silva pidió la pelea contra Cro Cop, y también la antes mencionada con Bennett, en septiembre pasado. Si sabía que estaba lesionado después del accidente en mayo, ¿por qué engañaría a los promotores y a sus fans que lo adoran al suponer que estaba en forma para disputar los cuartos de final del Gran Premio de Rizin? Esto puede ser injusto, pero Silva está prometiendo mucho y entregando muy poco estos días.

Este último episodio recuerda el breve pleito entre Silva y Chael Sonnen. Silva publicó varios videos altamente editados al estilo de la lucha libre en los que retaba a Sonnen y la UFC amó tanto la idea que organizó la pelea y la promovió a través de la versión brasileña de The Ultimate Fighter —los enfrentó a los dos como entrenadores.

En conversación con Ariel Helwani en su programa MMA Hour, Sonnen dijo que hubo problemas con Silva desde el primer momento. “Estábamos en Brasil, y el primer día de filmación para The Ultimate Fighter, renunció”, dijo Sonnen. “Renunció al show. Dice, ‘Ya estuvo, me voy’. Y era en serio. No mostraron mucho de eso, pero fue un desastre. No podíamos dejar el set. Tuvimos que traer a Wanderlei de vuelta, pero Dana (White) estaba al teléfono. Fue todo un desastre. Llamamos a Vitor (Belfort), y nos preguntábamos, hey, si este tipo de verdad se larga, ¿te subes a un avión? Así (de mal). Pensamos que el programa se iba a cancelar”.

“Así que trato de ser honesto con él”, dijo Sonnen. “Trato de ser tan honesto como puedo, porque todo esto está a punto de reventar. Le digo, ‘Wanderlei, aquí está el guión, ¿sí? Yo soy el malo. Insulté a toda esta nación. Tú usa el sombrero blanco. Tu puedes entrar y ser el bueno. Cuando me haces bullying, cuando comienzas a pelearte conmigo, cuando amenazas con irte, cuando amenazas con dejar todo esto, me dejas vulnerable. Y si estoy vulnerable me vulevo una buena persona. No quiero ser el bueno. Pero tú sí, así que disfruta ser el bueno, yo sigo siendo el malo. Pero eso sí, tienes que quedarte porque estás arruinando todo”.

“Y [Silva] empieza a hablar y hablar sobre deportivismo y honor. Y es que, esto no es deporte de niños, man. Puedes agarrar todas tus frases que te dijo tu entrenador o que leíste en una galleta de la suerte y te las puedes meter por el culo cuando esté yo cerca porque a mí no me importan. Esto es una pelea dentro de una jaula de metal. No hay nada de deportivismo ni de honor. Esto se trata de aplausos y de un cheque. Eso es todo.”

Silva se quedó en el programa, regresó unos días más tarde. Y aunque TUF Brasil fue un éxito, y presentó a talentos como Warlley Alves y Vitor Miranda a UFC, la temporada fue en su mayor parte un caos y mucha, por no decir que toda la culpa puede asignarse a Silva. Un pleito post pesaje entre Silva y Sonnen —que se puede decir que comenzó por la agresividad de Silva a pesar de que Sonnen empujó primero— casi hace que la serie se cancele. Al final, el entrenador asistente de Silva, Andre Dida, fue sacado del programa después de que se reveló por el video que golpeó varias veces a un Sonnen tirado en la parte de atrás de la cabeza.

Esa temporada particular de TUF fue un fiasco en el sentido de que su propósito principal, cínicamente hablando, era promover el combate entre los dos entrenadores en semi completo en UFC 175 en julio de 2014. La pelea estaba agendada para suceder en el final de temporada, pero fue movida. Y luego, la pelea se canceló por completo porque Silva no ingresó una solicitud para pelear en el estado de Nevada, y también fue reprendido por huir de un examen sorpresa de doping —una acusación que provocó la ira de la ex funcionaria pesadilla de la Comisión Atlética de Nevada (NAC) Pat Lundvall, quien pidió un veto de por vida para Silva, y con eso le prohibiría a Silva volver a pelear en Estados Unidos de por vida.

Por fortuna, la sugerencia inane de Lundvall fue denegada por la corte, y el juez de la corte de Nevada dijo que era “arbitraria, caprichosa y no estaba basada en evidencia sustantiva”. Eso no obstante que que Silva confirmó que huyó de la prueba por haber tomado diuréticos prohibidos. La comisión después acordó imponer una suspensión de tes años, que terminará en mayo de 2017, y una multa de 70,000 dólares de castigo.

A pesar del veto en Estados Unidos, Silva pudo haber competido profesionalmente en MMA en Japón —aunque eso no habría sido bien visto por la NAC ni por las demás comisiones atléticas en Estados Unidos. No obstante, firmó con Rizin y Bellator.

Aunque legalmente no podía competir en Estados Unidos con Bellator, los fanáticos estaban emocionados por ver regresar al Asesino del hacha en Japón bajo los colores de Rizin —¿y qué fue lo que obtuvimos en realidad?— Un combate de grappling dos contra dos, en un combate que parecía más una especie de sesión trabajosa de sparring, que enfrentó a Silva contra sus viejos rivales Kazushi Sakuraba y Hideo Tokoro, y era pareja de Kiyoshi Tamura. La entrada grandiosa de Wandy en el evento de abril no fue para nada el arribo con fanfarrias que todos estábamos esperando.

Contando la derrota con Cro Cop en 2006, Silva ha perdido siete de las últimas once peleas desde septiembre de aquel año —cuatro via nocauts brutales—. Además, el brasileño no ha peleado desde 2013 —una victoria por KO sobre Brian Stann en una pelea emocionantísima. Pero, nada más por la magnitud de sus antiguos logros y por su estilo agresivo, arriesgado de pelear, Silva sigue teniendo mucha influencia en el mundo de los deportes de combate —como lo prueban los dos contratos que firmo a pesar de no haber competido en los en casi cuatro años.

Sería injusto criticar a Silva por haber aprovechado estas oportunidades lucrativas, especialmente con la amenaza a su modo de vida después de la arcaica decisión de Lundvall que finalmente fue rechazada. Pero, para mi, Silva se ha convertido en una figura frustrante del pasado glorioso de las MMA. Desde que inició la década, cada que pelea uno teme por su vida. Pero, cuando Silva está en la cartelera, uno no puede evitar estar emocionado, atrapado por la emoción pura que produce a manos llenas.

Sin embargo, sus dos últimas aventuras, tanto con Cro Cop y con Sonnen han sido de lo más exasperante. La petulancia y las malas decisiones de Silva nos costaron la posibilidad de verlo enfrentar a Sonnen en el enfrentamiento más anticipado de 2014, aunque no sería honesto decir que Sonnen también salió positivo en una prueba antidoping poco tiempo después. Mientras tanto, el anuncio de una tercera pelea contra Cro Cop emocionó a todo fan verdadero de MMA anticipando el regreso de diciembre en Rizin, solo para quedar amargamente decepcionado cuando Silva se salió de la promoción menos de un mes antes. Silva debió haber sabido que estaba lastimado mucho antes que el momento en el que dijo, dado que citó como razón las lesiones que padece a propósito del accidente de auto en mayo.

De cuando en cuando, es difícil desconectar al fanático interior que comenzó a ver el deporte en su adolescencia del periodista de MMA actual. Respeto muchísimo a Wanderlei Silva. Pero como el más cínico de los escépticos, solo creeré el anuncio del regreso de Silva cuando lo vea materializarse con mis propios ojos.