Las represiones de Trump contra los inmigrantes han comenzado

Cuando era candidato presidencial, muchas veces la retórica anti-inmigrante de Donald Trump parecía ambigua, pero generalmente se enfocaba en un par de temas: un muro que (teóricamente) impediría a los inmigrantes indocumentados cruzar la frontera sur y la deportación masiva de “bad hombres”. Sin embargo ya como presidente, Trump parece estar llevando la deportación a una escala mucho más grande, y las autoridades de inmigración parecen apoyarlo.

El abogado de inmigración Ajay Singh, que trabaja en el estado de Nueva York, recientemente ha escuchado historias que apuntan a la represión de todos los inmigrantes. La semana pasada se reunió con un cliente que dijo que un oficial lo detuvo cuando conducía simplemente para revisar su identificación; esa misma semana, Singh me contó, que vio como agentes de inmigración saqueaban una fábrica en Monroe, Nueva York, en busca de trabajadores indocumentados, una táctica que las autoridades no habían utilizado desde hace años.

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Sin embargo, Singh no se sorprendió, dada la naturaleza de una orden ejecutiva reciente de Trump en la que su objetivo es deportar a casi todos los inmigrantes, no sólo a los que han sido acusados de delitos.

“Trabajar ilegalmente es considerado un delito, cruzar ilegalmente la frontera es un crimen, así que si Trump dice que los casos prioritarios son personas con antecedentes penales puede ser cualquiera”, me dijo Singh. “La gente está tan asustada, estoy teniendo muchísimas consultas porque la gente se pregunta: ‘¿Qué va a pasar?’”. 

A pesar de que la orden ejecutiva firmada el 25 de enero, “Mejorar la seguridad pública en el interior de los Estados Unidos”, enfatiza el supuesto peligro que representan los inmigrantes indocumentados para la sociedad, está escrito de manera tan amplia que muchos abogados dicen que incluso los inmigrantes que no han hecho nada malo podrían ser deportados, incluso si están en el país legalmente.

“Casi todos son prioridad para la deportación”, William Stock, presidente de la Asociación Americana de Abogados de Inmigración, sobre las directrices me contó que son una estricta desviación del enfoque  establecido en el gobierno de Obama el cual se centra en la erradicación de los delincuentes, los inmigrantes indocumentados que tienen menos de dos años en el país, y las personas detenidas al cruzar la frontera. En cambio, la orden de Trump, incluye una amplia gama de categorías, lo que permite a los funcionarios de inmigración detener a cualquiera.

Las categorías incluyen a cualquier inmigrante (documentado o no) condenado, acusado o que se cree que haya cometido un crimen, esto podría incluir a los inmigrantes indocumentados que cruzaron ilegalmente la frontera (un delito penal) y a los residentes legales permanentes acusados de delitos menores.

“Las nuevas prioridades al respecto también se aplican a los titulares de Green Cards y personas con visas temporales”, me dijo Stephen Yale-Loehr, profesor de derecho de inmigración de Cornell University. “Por ejemplo, si soy titular de una Green Card y me arrestan por saltar un torniquete en la ciudad de Nueva York, soy una prioridad para la deportación, aunque sea un crimen menor”.

Yale-Loehr, quien advirtió que la orden probablemente “tendrá más impacto en nuestro sistema de inmigración que la prohibición de viajar”, dijo que “ya que todo el mundo es una prioridad, nadie es una prioridad” para deportar. Eso también podría llevar a que los oficiales de inmigración lleven a cabo allanamientos en el lugar de trabajo y que su blanco sean los inmigrantes más vulnerables, ya que es más difícil detener a los individuos con condenas penales graves.

“Debido a la nueva orden ejecutiva, los oficiales pueden capturar básicamente a cualquier persona y por lo tanto aumentar sus números [de deportación]”, dijo Yale-Loehr.

Las directrices también son clave en los tribunales de inmigración: si un individuo entra en una categoría de prioridad, para los abogados puede ser casi imposible defender su caso.

“Si alguien antes no era una prioridad, podríamos argumentar que la deportación no aplica, en lugar de desperdiciar los recursos de cumplimiento”, dijo Yale-Loehr. “Pero ahora relativamente pocas personas son las que no son prioridades de inmigración, por lo que será más difícil argumentar que la deportación no es apropiada”.

Ve este reportaje de VICE News Tonight sobre los solicitantes de asilo que son rechazados ilegalmente en la frontera México-Estados Unidos:

Las prioridades declaradas por Trump también incluyen a trabajadores indocumentados que hayan dicho en formularios gubernamentales que podían trabajar legalmente, como esta mujer de Arizona deportada esta semana por protestas locales, personas que sean sorprendidas conduciendo sin licencia y personas indocumentadas que hayan recibido ayuda alimentaria federal.

Pero las categorías no son exclusivas: los agentes de Inmigración y Control de Aduanas pueden agregar a cualquier otro individuo a la lista de prioridades.

“Esta orden le da a ICE prácticamente libertad de control en cuanto a quién dirigirse”, dijo Avideh Moussavian, abogado de política del National Immigration Law Center. Agregó que durante años ha habido problemas con la rendición de cuentas de ICE, ya que le permiten a los agentes abusar de su poder. “Ha habido problemas porque el ICE es una agencia que no está controlada, y existe la preocupación de que esta orden esté descentralizando gran parte de la actividad [de cumplimiento]”.

Trump también preparó el terreno para más deportaciones rápidas, expandiendo drásticamente el uso de la deportación expedita, un proceso en el cual un inmigrante puede ser expulsado sin ver a un juez o abogado de inmigración. En una orden de seguridad de la frontera emitida el mismo día que sus prioridades de deportación, Trump anunció que la deportación expedita ahora debería ser usada en todo el país, no sólo dentro de 100 millas de la frontera como lo es ahora.

También ordenó al ICE que detuviera a todos los individuos de los que sospechen que hayan violado las leyes de inmigración, haciendo aún más difícil que los inmigrantes tengan acceso a un abogado.

“La deportación expedita es algo que mucha gente que trabaja fuera de la frontera no conoce, hace que la gente sea sometida a la detención obligatoria y en una vía rápida a la deportación y limita severamente cualquier acceso a un abogado o a un juez”, me dijo Amy Fischer, Director de Políticas para el Centro de Refugiados e Inmigrantes para la Educación y Servicios Legales (RAICES).

El proceso apresurado puede hacer que ICE deporte a inmigrantes que merecen permanecer en Estados Unidos. El año pasado, por ejemplo, el ICE detuvo a familias centroamericanas en una redada y casi las deportó, pero los abogados se abalanzaron sobre sus casos y un juez de inmigración encontró que realmente calificaban para el asilo.

Las políticas de pro-deportación de Trump probablemente abrumará a un sistema que ya está bajo presión. El presidente ha ordenado el aumento de la detención de inmigrantes más allá de los 40.000 detenidos registrados en el país, pero no ha previsto más jueces de inmigración, a pesar de la acumulación de más de 500.000 casos. Esto significa que los inmigrantes detenidos pueden pasar más tiempo detenidos, y a otros probablemente los elegirán rápido para ser devueltos a sus países de origen en lugar de languidecer detrás de las rejas. Yale –Loehr señaló que la solicitud de Trump de contratar a 10.000 oficiales más de ICE, requeriría la aprobación del Congreso y podría tomar hasta un año y medio para implementarse.

Mientras los tribunales luchan por mantenerse al día con las demandas de Trump, los defensores de la inmigración enfatizan que las nuevas prioridades sirven para hacer que los  estadounidenses estén en contra de la población nacida en el extranjero.

“Lo primero que me dicen las prioridades de deportación es que el objetivo no es designar prioridades-es impulsar una narrativa que es la creciente criminalización de todos los inmigrantes”, dijo Mary Small, directora de Detention Watch Network, una organización sin fines de lucro que se opone a la detención de inmigrantes. “Trump está juagando a decirle al pueblo estadounidense que sólo se está enfocando en criminales, pero está cambiando el término criminales para incluir a todos los inmigrantes”.

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