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Cultură

Lo que siempre quisiste preguntarle a un multimillonario

"En realidad solo hago amigos con otras personas adineradas".
Fotos cortesía Christian Jagodzinski

Christian Jagodzinski no puede decirme exactamente cuánto vale, pero calcula que alrededor de unos 55 millones de dólares (55 millones de dólares). En términos financieros, Christian está forrado. Jagodzinski se convirtió en millonario a los 29 años, cuando vendió su tienda de libros en línea a Amazon. En la actualidad, su imperio incluye propiedades que renta, por lo general, a otros adinerados.

Tan solo la casa de Christian en Miami vale cerca de 25 millones. El inmueble incluye un jacuzzi con terraza, una casa de huéspedes, alberca, y un cine, cuyo techo recrea el cielo de noche. Cuando al alemán de 48 años le dan ganas de salir de vacaciones, le basta subir a su jet privado rumbo a Mykonos, y cuando desea irse de fiesta con sus amigos gasta 10 mil dólares en una noche —la mayoría en champaña— sin remordimiento.

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Platiqué con Christian para averiguar si de verdad la vida es más increíble cuando se es extremadamente rico. Además de confirmarme que sí lo es, Christian me comentó por qué todos sus amigos también son adinerados, habló de lo mucho que aún desea, y por qué algunas personas jamás serán tan adineradas como él.

VICE: ¿Cómo ha afectado a tu personalidad tener tanto dinero?
Christian Jagodzinski: Intento que mi dinero no me corrompa. Se te puede subir a la cabeza. Por ejemplo, muchos hombres adinerados no cuidan su fortuna o su peso —creen que no importa si tienen un poco de panza, porque de todos modos las mujeres estarán interesadas—. Puede ser cierto, pero yo siempre intento estar en forma.

Tienes que estar a la vivas de la gente que sólo se interesa en tu dinero y no en ti como persona. Sé que suena mal, pero esto ha cambiado la forma en que organizo mi vida social. En realidad sólo hago amigos con otras personas adineradas.

Christian Jagodzinski en un yate con una botella de champaña.

¿Quieres decir que las mujeres coquetean contigo por ser rico?
Estoy felizmente casado con dos hijos, y por lo mismo ya no salgo. Pero muchos amigos se han casado con personas que sólo buscaban una forma rápida de enriquecerse. Siendo honesto, la mayoría de mis amigos lo sabían antes de casarse, pero no les preocupó porque disfrutaban la atención.

¿Crees que es algo muy triste?
Nunca me gustaría estar en una relación así, pero soy bastante atractivo; algunos de mis amigos no lo son. Conozco a un tipo que siente la necesidad de mencionar que vale cientos de millones de dólares en los primeros cinco minutos de su conversación con una mujer.

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¿Has estado en una relación con alguien más adinerado que tú?
No. Sería difícil encontrar a alguien así, porque solamente hay 200 mil personas verdaderamente adineradas en el mundo, y la mayoría son hombres y mucho más grandes que yo. Tengo 48 años, soy bastante joven para ser millonario.

¿Sientes envidia por la gente que tiene más dinero que tú?
La verdad no, porque no necesito más dinero. Claro, si tuviera 100 millones en lugar de 50 podría comprar un yate o un jet privado en lugar de rentarlos. Pero no estoy seguro si eso me haría más feliz. He llegado a la conclusión que si tienes más de 30 millones, en realidad no necesitas más dinero.

¿Te preocupa perder tu fortuna?
Sería un gran reto perder todo mi dinero. Creo que sólo podría perderlo en inversiones bastante malas, pero nunca por mi estilo de vida. En 2008, durante la crisis inmobiliaria, mis acciones bajaron de 50 a 40 millones. Esto no afectó mi estilo de vida diario, pero me molestó. Sentí que no había hecho mi trabajo apropiadamente.

¿Alguna vez has sobornado a alguien?
No, pero incluso si quisiera hacerlo vivo en Estados Unidos y las cosas no funcionan así aquí. No hay necesidad. Puedo contratar un buen abogado y obtener lo que quiero por la vía legal. Sin embargo, cuando quiero una mesa específica en un restaurante y todos los lugares están apartados, puedo pasar por debajo del agua unos 100 o 200 dólares.

¿Pagas impuestos?
Sí. Los Estados Unidos es un lugar emocionante desde la perspectiva fiscal, específicamente para los inversionistas de bienes raíces. Me fui de Alemania porque mi carga fiscal estaba por encima del 50 por ciento. Si quieren quitarme más de la mitad de mis ganancias, no dudaré en mudarme.

Las autoridades alemanas tienen una extraña mentalidad a la Robin Hood —creen que simplemente pueden tomar el dinero de los ricos y dárselo a los pobres—. Honestamente, sólo alguien sin un peso pudo haber pensado en ello. Creo que a una persona adinerada que paga el 30 por ciento en impuestos le duele tanto como a alguien que gana menos y paga el mismo porcentaje.

¿Por qué crees que no todos están tan forrados como tú?
Creo que la mayoría de las personas no tienen la determinación suficiente. Quieren más dinero pero con el menor esfuerzo posible. Así no funciona. Cuando estás arrancando un negocio debes estar completamente comprometido. Imaginar que hay una olla de oro al final del arcoíris debería ser la motivación de todos los días. Cuando tenía 20 años, dije que quería ganar, mínimo, un millón para cuando cumpliera 30 años, así que organicé mi vida con dicho propósito en mente.

Cuando encuentras un vagabundo en la calle, ¿cuánto dinero le das?
Es una pregunta difícil. Si le doy 20 dólares creo que se los gastaría en una botella de whiskey. ¿Qué bien le haría? En alguna ocasión en Miami le di trabajo a un indigente, y hasta la fecha sigue trabajando para mí. En mi opinión, esto es mejor que darles dinero. No importa cuánto dinero les des se lo acabarían en un mes.