Hay que recordar al nombre, hay que verlo de frente y de perfil, contemplar su figura y acostumbrarse a su castellano colombianizado. Sus libretas y su visión para ver y entender el futbol. Poco a poco iremos comprendiendo quién es la persona que la Federación Mexicana de Futbol eligió como su próximo entrenador.
La elección de Juan Carlos Osorio parece muy polémica. Por nombre, nadie lo conoce. Por trabajo, se sabe que estuvo poco tiempo en Puebla, y fracasó. Su filosofía es desconocida y sus éxitos, sesgados únicamente a lo que conquistó en la Liga Postobon de Colombia con Atlético Nacional, pero de ahí en fuera, poco o nada.
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Pero nos guste o no, él será el entrenador de la selección. Por como se maneja el mercado mexicano, no podríamos asegurar que llegue al Mundial, vamos, no podríamos confirmar siquiera que acabé el 2015. Pero si los resultados son lo positivo que todos queremos que sean, Juan Carlos Osorio estará sentado en el banquillo del Tri en la Copa del Mundo de Rusia.
El ‘Profe’ como le gusta que le digan, fue un fino mediocampista que debutó en 1982 con el Atlético Pereira, pero una lesión maldita truncó su carrera cinco años después de su debut. La vida le había cambiado a Juan Carlos Osorio, pero su éxito en el futbol estaba más allá de recuperar pelotas y darles un enfoque ofensivo en el campo. El estudio es una virtud, y el colombiano la tenía.
La selección mexicana tendrá a un entrenador colombiano, formado en Inglaterra. La excelsa escuela inglesa tuvo durante seis años a Juan Carlos Osorio educándolo nada más y nada menos que en el Liverpool y en el Manchester City. Es muy probable, que los últimos tres entrenadores que el Tri ha tenido, no hayan tomado jamás un avión rumbo a Europa para tener una estadía en la cuna del futbol.
Osorio vivió pegado, de día y de noche a Gerard Houllier, técnico francés que llevó a los ‘Reds’ a conquistar la Copa UEFA en la temporada 2000-2001. Ahí, mamó todo el conocimiento que pudo para comprender el futbol mediante una filosofía que atribuyera las virtudes europeas, con las capacidades latinas, un mix que sin duda, muy pocos entrenadores serían capaces de juntar. El más avanzado, sin duda, el argentino Marcelo Bielsa. Curiosamente, la opción ‘A’ de la Federación Mexicana de Futbol.
He aprendido mucho de Inglaterra. Cuando estuve ahí, traté de ver la mayor cantidad de sesiones de entrenamiento del Liverpool
Estudio un posgrado en Ciencia del Futbol en la Universidad de Liverpool tras titularse en Ciencias del Ejercicio Físico y del Rendimiento Humano. Posteriormente, el Manchester City fue su casa. Ahí tuvo su licenciatura, maestría y doctorado. Su graduación que le entregaba en la mano el boleto para volver a su amada Colombia y llevar a cabo el aprendizaje adquirido. Juan Carlos Osorio se había convertido en un hombre que vivía por y para el futbol. Un loco y enfermo de la buena plática que gira alrededor de una pelota, llena de conceptos y comparaciones con la vida real.
Fue asistente y preparador físico, e incluso, asistente técnico del cuadro ‘citizen’. Logró la licencia de Director Técnico tipo ‘A’ por la UEFA, el mayor grado de distinción que entrega la Federación Europea.
Esto es mi vida, amo hablar de futbol y pasar mi tiempo aprendiendo de él
Para la gente que no conoce a Juan Carlos Osorio, el tipo es un enfermo de la táctica. Una persona que estudia de lunes a lunes al rival, y que aun cuando está enfrentándolo, cuenta con la inteligencia para seguir analizándolo hasta el final del encuentro. Su estilo no aburre. No será un hombre precavido y ‘amarrategui’. Gusta de tener la pelota, tener transiciones lo más rápido al frente, ser vertical y ofensivo. Adecuado a una escuela mexicana, se afianzaría más en el instituto ‘lavolpista’ que en el ‘lapuentista’, y si algún día acabara en un manicomio, podría ser el compañero de cuarto de otro ‘loco’ como Marcelo Bielsa.
Juan Carlos Osorio le pide consciencia a sus futbolistas. Inteligencia para tomar decisiones. Es un hombre que analiza y que pide que los demás también lo hagan. No deja nada al azar
Para mí, el futbolista es igual en la cancha a quien va conduciendo su carro; manejar y jugar al fútbol requieren de una toma constante de decisiones en medio de imprevistos. Un conductor debe saber qué hacer en cuestión de instantes cuando se le atraviesa algo o alguien en la vía, igual que el jugador cuando va corriendo y de pronto se le atraviesa la pelota
Tiene cinco principios básicos en los cuales se rige como entrenador: Táctica, selección de los mejores hombres de acuerdo al rival, entrenamientos y planificación de trabajo, toma de decisiones y formar un patrimonio, esto último, para potencializar las posibilidades de cada jugador, cotizarlos y en caso de ser técnico de un club, que esos futbolistas dejen dinero en las arcas de la institución.
México no tendrá a un entrenador gracioso o entretenido. No será comparable el marketing que genere al que en algún instante derramó Miguel Herrera. Las pláticas en las conferencias de prensa estarán enfocadas estrictamente a temas futbolísticos y en comparaciones que podrían parecer burdas, pero que hacen que Juan Carlos Osorio explique de una manera más sencilla diversos conceptos que pueden ser engorrosos o complejos. Con el colombiano, hasta un ‘dummie’ en el futbol podrá entender mejor las cosas.
“Una mujer le puede parecer bonita, pero a mí, no. Es igual en el fútbol, a mí los toques de la pelota en dos metros o menos no me gustan, a mí me gusta el fútbol en largo, rápido, por los costados, de salir a proponer al ataque Jugar bien no es igual a jugar bonito. El fútbol bonito es subjetivo, como la belleza de la mujer”, dijo en alguna ocasión al sitio Futbol Red de Colombia.
Sí, es cierto. Juan Carlos Osorio fracasó en el Puebla, como muchos entrenadores y jugadores más. Pero ese tropiezo, fue el impulso que tuvo el colombiano para ser el entrenador exitoso que es hasta este día. Con Atlético Nacional, lo conquistó todo, absolutamente todo. Se convirtió en uno de los estrategas más ganadores del equipo más ganador de la Liga Postobon. Para los que denigren que el éxito del ‘Profe’ fue en el futbol colombiano, basta recordarles la cantidad de futbolistas de ese país que llegan semestre a semestre a México.
Hoy en nuestro país, se ha hablado más con el desconocimiento que con la investigación de quién es quién. Se lamentan porque Carlo Ancelotti o Jürgen Klopp dijo que no, que Marcelo Bielsa rechazó o que incluso, se tenía el dinero para contratar a Josep Guardiola y no se logró. Se habla de la opción ‘Z’, pero por más última letra del abecedario que haya sido, no deja de ser un tipo contrastante y diferente.
Alguna vez, Josep Guardiola y Juan Carlos Osorio tuvieron un encuentro. No en un café, sino en los campos de entrenamiento del Manchester City:
Cuando él estaba retirándose como jugador fue a ver los trabajos del Manchester City, y yo era parte del cuerpo técnico del equipo. Vio lo que yo hacía y cómo lo hacía. El día que estuvo en Bogotá nos vimos y me dijo que se acordaba muy bien de mis labores allá, que mi trabajo le parecía diferente, muy bueno y un poco loco
Así es el nuevo entrenador de México. A falta de oficialización, el Tri tendrá a un entrenador obsesivo con la táctica, estudioso del rival, ofensivo y exitoso. Pero sobre todo, a un tipo preparado y educado.